Garc¨ªa Montero, poeta poli¨¦drico

Los primeros versos que se escuchan en el documental sobre Luis Garc¨ªa Montero que han dirigido Charlie Arnaiz y Alberto Ortega no son del poeta granadino. Una voz sin identificar y grave rompe el silencio del negro y recita versos de Espronceda: ¡°Con diez ca?ones por banda, viento en popa a toda vela, no corta el mar sino vuela, un velero Bergant¨ªn¡±. Tras la voz desconocida, Quique Gonz¨¢lez entona Aunque t¨² no lo sepas, la canci¨®n sacada del poema hom¨®nimo de Garc¨ªa Montero, y que tambi¨¦n da nombre al documental.

Quique Gonz¨¢lez es solo la primera de las conocidas voces que cosen el filme, bien confesando su admiraci¨®n por el poeta, bien desvelando detalles de la amistad que les une a ¨¦l. Javier Riego, Ismael Serrano, Mara Torres, Serrat, Sabina, Angels Barcel¨®, Eduardo Mendicutti, Victor Manuel. ¡°Son personajes conocidos, pero fue muy f¨¢cil convencerlos de salir en la pel¨ªcula, porque todos sienten admiraci¨®n por Luis¡±, confiesa el codirector Charlie Arnaiz. La pel¨ªcula recorre la vida de Garc¨ªa Montero desde su Granada natal, esa ciudad ¡°peque?a y mutilada por la guerra¡±, en palabras del propio poeta, hasta su desembarco en Madrid y la consolidaci¨®n actual de su poes¨ªa. Entre medias, alzarse con el premio Adonais, la honda amistad con un Alberti ¡°que se baj¨® del p¨²lpito donde yo cre¨ªa que estaba para pasar a formar parte de mi familia¡±, los paseos solitarios por la abandonada casa familiar de Federico Garc¨ªa Lorca, las noches en el rebelde caf¨¦ La Tertulia, su historia de amor con la escritora Almudena Grandes.

¡°Conoc¨ª la obra de Garc¨ªa Montero cuando estudiaba filolog¨ªa, en el a?o 97¡±, explica Arnaiz. ¡°Y desde entonces se convirti¨® en mi poeta de cabecera¡±. La vida le llev¨® a trabajar en una productora con Alberto Ortega, el otro director del documental, al que le propuso la idea de narrar juntos la vida y la obra de Garc¨ªa Montero. As¨ª iniciaron un trabajo de m¨¢s de dos a?os que ahora se repone en la Cineteca y la Sala berlanga, tras ser presentado en el pasado Festival de cine de M¨¢laga.

¡°T¨² me llamas, amor, yo cojo un taxi¡±. Tambi¨¦n hay sitio en el documental para la pol¨¦mica. El elogiado (y discutido) verso de Garc¨ªa Montero sirve de entrada para esbozar ese mundo complejo de talentos que se rozan que es el de la poes¨ªa. ¡°Es un verso que firmar¨ªa yo, encantado, en cualquiera de mis canciones¡±, confiesa entre risas Joaqu¨ªn Sabina. ¡°Muchos nos acusaron (A los llamados poetas de la experiencia) de ser poetas sin vuelo po¨¦tico¡±, explica Garc¨ªa Montero. ¡°Escriben solo lo que ven en la calle, nos dec¨ªan. Pues s¨ª¡±. El lector, el poeta, el amigo, el hombre comprometido, son muchos los prismas desde los que se acerca a Garc¨ªa Montero el documental.

¡°Alberto no conoc¨ªa la obra de Luis, y creo que la contraposici¨®n entre nuestras dos visiones es la clave de todo. Quer¨ªamos hacer algo profundo, pero a la vez accesible. No aspir¨¢bamos a hacer un ejercicio acad¨¦mico, quer¨ªamos algo que pudi¨¦ramos divulgar, que le llegara a la gente que no conoce la poes¨ªa¡±, explica Arnaiz. ¡°Ese es tambi¨¦n el sentido del t¨ªtulo: aunque t¨² no lo sepas ah¨ª hay un mundo po¨¦tico a tu lado. Esper¨¢ndote¡±. El documental, que fue presentado en el festival de M¨¢laga, ser¨¢ repuesto este jueves, viernes y s¨¢bado en la Cineteca de Madrid (a las 18:00 horas), y la pr¨®xima semana estar¨¢ en la Sala Berlanga el jueves y el s¨¢bado.

¡°Mi memoria de lector se identifica con esta terraza¡±, dice, al final del documental, Garc¨ªa Montero, flanqueado por sus padres en la casa familiar donde creci¨®. ¡°Y con este ejemplar de Mis mejores poemas en lengua castellana¡±, explica, se?alando un libro de cuero rojo que su padre tiene entre las manos. ¡°Me fascinaba la Canci¨®n del pirata de Espronceda. Con ella aprend¨ª a identificarme con la rebeld¨ªa¡±. Misterio resuelto. Es la voz de su padre la que se pone a recitar, cerrando el c¨ªrculo con que comenz¨® la pel¨ªcula. ¡°Bajel pirata que llaman, por su bravura, el Temido, en todo mar conocido, del uno al otro conf¨ªn¡±.