El mir¨®n exhibicionista

La contradictoria personalidad de un voyeurista exhibicionista, armado hasta los dientes con una c¨¢mara de v¨ªdeo, solo pod¨ªa dar a luz una pel¨ªcula como Bigas x Bigas, intrigante documento sobre la cotidianidad, las obsesiones personales y el trabajo del cineasta catal¨¢n Bigas Luna. "Como escribir me da cada vez m¨¢s pereza, voy a componer un diario en im¨¢genes", se vino a decir un buen d¨ªa el director de Angustia y Jam¨®n, jam¨®n. Y acab¨® conformando, entre 2000 y 2007, una suerte de colecci¨®n con m¨¢s de 600 horas de v¨ªdeos que hablan de su personal¨ªsimo universo.

El que vaya buscando en la pel¨ªcula, montada por Santiago Garrido Rua, una obra did¨¢ctica sobre la filmograf¨ªa de Bigas, fallecido en 2013, que se vaya olvidando. Aqu¨ª hay vivencias, an¨¦cdotas y trabajos al margen de los largometrajes, donde una impactante videocreaci¨®n como Collar de moscas se puede unir a ciertos momentos familiares que no est¨¢ claro que contribuyan demasiado al retrato. Apenas un par de instantes de Jam¨®n, jam¨®n y de Yo soy la Juani, junto a algunas pruebas de c¨¢mara de Son de mar, son las ¨²nicas aportaciones expl¨ªcitas al an¨¢lisis de su obra. Sin embargo, entre sus zalamer¨ªas con los perros, entre sus cotidianas escenas junto a mujeres embarazadas, entre su aprendizaje de c¨®mo hacer una hogaza, entre sus discursos sobre los pechos de la mujer, quiz¨¢ se vayan asomando, casi sin pretenderlo, pel¨ªculas como Bilbao y Caniche, La teta y la luna y B¨¢mbola.

Afirma Bigas en la pel¨ªcula que sus tres m¨¢ximas obsesiones son el erotismo, la comida y la espiritualidad. Las dos primeras quedan muy claras; no tanto, o apenas nada, la tercera. Aun as¨ª, Bigas x Bigas, desigual documento que a¨²na estampas muy bellas junto a una excesiva verborrea que desmiente un tanto lo de "diario en im¨¢genes", puede acabar configur¨¢ndose como en un inclasificable complemento de la obra de un cineasta siempre en el margen: de lo convencional, de lo moral y de lo cultural.