¡®disPLACE¡¯, una ¨®pera sobre la gentrificaci¨®n

Una pareja socialmente acomodada habita un piso elegante de un barrio de Barcelona remozado, enseguida sabremos que gentrificado. Pero no todo marcha bien, el var¨®n, fanfarr¨®n y seguro de su posici¨®n social, no termina de entender qu¨¦ le sucede a su mujer. Esta percibe que ese piso de sus sue?os encierra algo turbio, como si ciertas trazas hubieran quedado prendidas en sus paredes y en su carism¨¢tico balc¨®n, y de esa crisis surge la ruptura.

Segunda parte, ese mismo piso a?os antes, una pareja enamorada y compenetrada celebra su ¨²ltima noche antes de ser desalojados a causa de la crisis, pero el estallido amoroso esconde una decisi¨®n: un suicidio al que invitan a periodistas y amigos. Es el drama del desahucio y la destrucci¨®n de los centros urbanos a favor de las nuevas clases acomodadas.

Sobre este tema tentador y fascinante escribe un libreto sugestivo Helena Tornero. El oficio del libretista est¨¢ por reinventar y Helena se lanza con las mejores intenciones, pero el tema es mucho m¨¢s tremendo que el resultado; descorazona un poco que la mayor carga de denuncia se encuentre en el dosier publicitario. A¨²n as¨ª, es un buen intento y le ponen m¨²sica dos j¨®venes compositores catalanes ya curtidos y en crecimiento art¨ªstico admirable. La primera parte es de Joan Magran¨¦ (1988), una voz muy s¨®lida, que ya se ha hecho escuchar en la Philharmonie de Par¨ªs por el Ensemble Intercontemporain. La segunda parte de esta ¨®pera doble, y la primera cronol¨®gicamente, corre a cargo de Raquel Garc¨ªa Tom¨¢s (1984), enamorada del audiovisual y del mestizaje de disciplinas.

disPLACE se estren¨® en Viena el 1 de septiembre de 2015 y llam¨® la atenci¨®n en el Festival Musiktheatertage Wien. Luego lleg¨® al Centro Santa M¨®nica de Barcelona el pasado diciembre. Posee un leve acompa?amiento instrumental a cargo del d¨²o Sophia Goidinger-Koch y Barbara Riccabona, viola y violonchelo, miembros del Ensemble PHACE, dirigidas por Vinicius Kattak.

La escena, bien resuelta, es de Peter Pawlik y los dos cantantes son Elena Copons y S¨¦bastien Soules.

Magran¨¦ y Garc¨ªa Tom¨¢s son reincidentes en esto de colaborar en una ¨®pera, ya lo hicieron en Dido & Aeneas Reloaded, junto a dos compositores (Xavier Bonfill y Octavi Rumbau) y parecen c¨®modos. En 2013, esta producci¨®n se vio en Madrid, en la Sala Berlanga. Ambas producciones han sido propuestas por ?pera de Butxaca i Nova Creaci¨®, admirable organizaci¨®n que est¨¢ dinamizando la ¨®pera de peque?o formato en nuestro pa¨ªs y principalmente en Catalu?a.

La m¨²sica, que es lo esencial, apunta maneras de muy buen tejido oper¨ªstico. Magran¨¦ y Garc¨ªa Tom¨¢s creen en la aventura sin renunciar a sus se?as de identidad, firmes pese a su juventud. Magran¨¦ lidia con un texto en ingl¨¦s al que aplica tratamientos mel¨®dicos consistentes. Habr¨¢ que estar atentos a futuras producciones de este compositor que a¨²n no ha cumplido los treinta a?os. Garc¨ªa Tom¨¢s apuesta por una mayor sensualidad l¨ªrica, m¨¢s melism¨¢tica en la voz femenina, sensual en la manifestaci¨®n de su amor, pero obcecada en su disposici¨®n de llegar hasta el final en el suicidio de denuncia, el idioma catal¨¢n es una buena ayuda en ello, as¨ª como una electr¨®nica leve.

Es una buena combinaci¨®n este d¨ªptico, y un espect¨¢culo cre¨ªble que, por momentos, sobrecoge. Solo se le puede pedir m¨¢s en su denuncia pol¨ªtica, bien enunciada pero finalmente t¨ªmida. Los dos cantantes hacen un trabajo admirable y la ambientaci¨®n queda perfecta para esta sugerente Sala Negra de Teatros del Canal.