Cosechas de oto?o
Las editoriales rescatan novelas y relatos que, o bien fueron publicados en su momento y merecen otra vida editorial, o bien nunca hab¨ªan sido traducidos al espa?ol
1. Recuperaciones
El oto?o, que Poussin y Goya personificaron en Baco, es tambi¨¦n un mes de grandes cosechas editoriales. Tambi¨¦n de novelas y relatos que, o bien fueron publicados en su momento y merecen otra vida editorial, o bien nunca hab¨ªan sido traducidos al espa?ol. En el programa de Alfaguara, por ejemplo, encontramos la recuperaci¨®n de la que para m¨ª es la mejor novela corta de Bola?o, Estrella distante, que sale en septiembre, simult¨¢neamente a la publicaci¨®n de otro producto p¨®stumo de la m¨¢s que inquietante factor¨ªa Bola?o, tres nouvelles in¨¦ditas recogidas bajo el t¨ªtulo de Sepulcro de vaqueros. Sabrosas recuperaciones tambi¨¦n aparecen en el avance de N¨®rdica, como El c¨ªrculo se ha cerrado (1936), la ¨²ltima novela de Knut Hamsun, y algunos libros con peso gr¨¢fico, como Y nuestros rostros, mi vida, breves como fotos (1984), un librito miscel¨¢neo de John Berger que no public¨® Alfaguara en su momento; El libro de los gatos, de T. S. Eliot, en la versi¨®n de Edward Gorey, y Diez d¨ªas que sacudieron al mundo, de John Reed, adaptado e ilustrado por Fernando Vicente. Impedimenta, que sigue fiel al rumano Mircea Cartarescu publicando Solenoide, su ¨²ltima novela (?800 p¨¢ginas!), celebra su primera d¨¦cada con recuperaciones importantes de las que selecciono dos: El desertor, de Siegfried Lenz (1926-2014), una novela sobre los horrores de la guerra, escrita a principios de los cincuenta y publicada en 2016, dos a?os despu¨¦s de la muerte del autor; la otra es Stanley y las mujeres (1984), de Kingsley Amis, el mejor de los escritores c¨®mico-sat¨ªricos brit¨¢nicos de la segunda mitad del siglo XX (adem¨¢s de borrachuzo impenitente y pertinaz ad¨²ltero, por ese orden), una divertida novela desmadrada y feroz en la que no es aventurado encontrar motivos autobiogr¨¢ficos.
2. ¡®Eccolo qui!¡¯
A Duomo, la editorial espa?ola del Gruppo Editoriale Mauri Spagnol, le encanta repetir ¨¦xito cada oto?o. Los or¨ªgenes del holding, como gustan denominarse oficialmente, se remontan a los a?os treinta y, desde entonces, no ha parado de absorber otras editoriales (la hist¨®rica Garzanti, por ejemplo). El sello espa?ol fue fundado en 2009, y su primera directora fue la estadounidense Valerie Miles, que asumi¨® el cargo despu¨¦s de una experiencia poco satisfactoria como responsable del cat¨¢logo extranjero de Alfaguara. El actual capo de Duomo es, precisamente, Luigi Spagnol, un apellido perfecto, dadas las circunstancias. Bueno, pues, desde hace tres rentr¨¦es, Duomo consigue colocar uno de sus t¨ªtulos entre los best sellers del oto?o. En 2014 fue Open, mi historia, las memorias de Andr¨¦ Agassi; bueno, en realidad de Agassi y del negro de lujo J. R. Moehringer, un periodista que hab¨ªa cosechado un gran succ¨¦s d¡¯estime con su propia autobiograf¨ªa, El bar de las grandes esperanzas, cuya lectura fascin¨® al tenista y le convenci¨® para contratar su negritud. Y fue precisamente el libro de Moehringer el que se convirti¨® en el ¨¦xito de Duomo en 2015. Para 2016, contaron con Me llamo Lucy Barton, de Elizabeth Strout, una intensa novela de superaci¨®n que Jos¨¦ Mar¨ªa Guelbenzu calific¨® de obra maestra. Cuando me estaba preguntando cu¨¢les ser¨ªan las ¡°apuestas¡± de Spagnolo para 2017, me llegaron las pruebas sin corregir de La voz de los ¨¢rboles, de Tracy Chevalier, que entrar¨¢ en las librer¨ªas el 28 de agosto. Y voil¨¤ ¡ªo, mejor, eccolo qui!¡ª: aqu¨ª tienen, casi con seguridad, el best seller de Duomo para este a?o. Lo que no he conseguido que alguien me explique es qu¨¦ ha pasado para que Penguin Random House haya perdido a una autora que vend¨ªa (La joven de la perla) que, hasta ahora, publicaba en sellos (Alfaguara, Lumen) del grupo.
3. ?xtasis
Para las mujeres concienciadas de mi generaci¨®n la lectura de El segundo sexo (1949), el revolucionario ensayo de Simone de Beauvoir, supuso una sacudida. Se les notaba tanto, que muchos varones nos vimos en la ¡°obligaci¨®n¡± de leerlo y discutirlo luego en tensas reuniones en las que hab¨ªa dogm¨¢ticos izquierdistas que consideraban el feminismo (y sobre todo el motto que resum¨ªa el libro: ¡°No se nace mujer, se llega a serlo¡±) la ¨²ltima a?agaza ideol¨®gica de la burgues¨ªa. El libro se ley¨® primero en franc¨¦s, circulando de mano en mano los dos tomos de la colecci¨®n Blanche de Gallimard. Pero su verdadera influencia se sinti¨® en los sesenta, cuando llegaron al cuarto de atr¨¢s de las librer¨ªas los ejemplares de las editoriales argentinas Leviat¨¢n y Siglo XX. Muchas de aquellas j¨®venes, educadas en colegios de monjas, abrieron los ojos a asuntos en los que les daba miedo pensar, y de los que sus compa?eros pasaban interesadamente: por ejemplo, que la maternidad ¡ªsu previsible destino¡ª pod¨ªa convertirse en una trampa pegajosa. Y tambi¨¦n se escandalizaron con el audaz an¨¢lisis de aquel amor m¨ªstico tan ponderado en su educaci¨®n religiosa: Beauvoir pon¨ªa, entre otros ejemplos de la sublimada ¡°uni¨®n ¨ªntima con Dios¡±, el c¨¦lebre fragmento del Libro de la vida en que Santa Teresa se refiere al largo dardo de oro que le introduce el ¨¢ngel del Se?or y que le llega a las entra?as: ¡°Era tan grande el dolor¡±, dice la santa, ¡°que me hac¨ªa dar aquellos quejidos, y tan excesiva la suavidad que me pone este grand¨ªsimo dolor que no hay que desear que se quite, ni se contenta el alma con menos que Dios¡±. De las formas que reviste ese amor m¨ªstico en las diversas religiones trata precisamente Faire l¡¯amour avec Dieu, de Catherine Cl¨¦ment (Albin Michel; septiembre), uno de los t¨ªtulos que m¨¢s me interesan de la rentr¨¦e francesa; en ¨¦l se plantea, entre otras cuestiones, el sentido de ese ¡°coito con la Presencia divina¡± que supone la oraci¨®n (seg¨²n expresi¨®n de un rabino ucraniano del XVIII), en una ¨¦poca en la que, tambi¨¦n por amor a Dios, se perpetran masacres suicidas en su nombre.
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