En pie: suena m¨²sica cl¨¢sica
Un surtido espa?ol ¡®invade¡¯ este a?o los hist¨®ricos Proms de Londres, donde los acordes m¨¢s solemnes se pueden escuchar a buen precio y lejos del protocolo y la formalidad
El p¨²blico tambi¨¦n puede salvar un concierto de m¨²sica cl¨¢sica. Y no simplemente con su presencia, concentraci¨®n y aplauso. Sucedi¨® en Londres, durante los Proms de 1974. El bar¨ªtono Thomas Allen se desmay¨® durante una interpretaci¨®n de Carmina Burana, de Orff. Y el director de orquesta Andr¨¦ Previn encontr¨® entre los espectadores a un joven estudiante que se ofreci¨® espont¨¢neamente para cantar esa parte solista hasta el final. Se lo agradecieron efusivamente las m¨¢s de cinco mil personas que llenaban aquella noche el Royal Albert Hall. Pero tambi¨¦n las decenas de miles que segu¨ªan la transmisi¨®n radiof¨®nica y televisiva en directo por la BBC. Hoy los Proms mantienen esa dif¨ªcil combinaci¨®n de evento musical y espect¨¢culo medi¨¢tico. Casi un centenar de conciertos con muchas de las mejores orquestas, directores y solistas del mundo, durante ocho semanas de verano, en la ac¨²stica atroz del referido Royal Albert Hall, aunque transmitidos con inmejorable calidad t¨¦cnica por la BBC.
El formato de los Proms actualiza los conciertos promenade que Inglaterra import¨® desde Francia a principios del siglo XIX. Programas musicales atractivos, a precios reducidos y en un ambiente relativamente informal donde se pod¨ªa comer, beber o ¨Ccomo su nombre indica¨C pasear. Este festival naci¨® en 1895 en el Queens Hall y, tras su destrucci¨®n en 1941 durante la Segunda Guerra Mundial, se traslad¨® al Royal Albert Hall donde est¨¢ celebrando su 123? edici¨®n. El fact¨®tum musical de los Proms, el director de orquesta brit¨¢nico Henry Wood, transform¨® este festival a comienzos del siglo XX en una herramienta eficaz para crear p¨²blico de m¨²sica cl¨¢sica en Londres. Su filosof¨ªa combinaba obras ligeras con gran repertorio y creaci¨®n contempor¨¢nea. Pero su se?a de identidad m¨¢s caracter¨ªstica son los llamados prommers, es decir, el sector del p¨²blico que adquiere localidades a precios populares tras pasar horas haciendo cola el mismo d¨ªa del concierto. Los prommers asisten de pie en la arena de abajo o en la galer¨ªa de arriba; tienen sus propios rituales y recaudaciones ben¨¦ficas, pero son los ¨²nicos que pueden pasear o tumbarse durante el concierto.
Javier Perianes habla de ¡°familiaridad¡± al describir lo que sinti¨® el pasado martes 22 de agosto al salir por vez primera al escenario del Royal Albert Hall. El pianista andaluz culmin¨® su exitoso debut en los Proms tocando como propina el arreglo para piano que hizo el propio Falla de su Danza ritual del fuego de El amor brujo. Fue una interpretaci¨®n mod¨¦lica, pero tambi¨¦n una excepci¨®n. Los Proms de 2017 est¨¢n teniendo la mayor presencia de m¨²sicos espa?oles en toda su historia, aunque en ning¨²n caso para interpretar m¨²sica espa?ola. Esta peque?a invasi¨®n espa?ola se inici¨® el pasado 21 de julio con la ¨®pera Fidelio, de Beethoven, que cant¨® el Orfe¨®n Donostiarra, coincidiendo con su 120 aniversario, bajo la direcci¨®n de Juanjo Mena. Su responsable, Jos¨¦ Antonio Sainz Alfaro, destacaba poco despu¨¦s a este peri¨®dico ¡°el ambiente excepcional del Royal Albert Hall, donde la m¨²sica fluye de forma fascinante¡±. Pero Juanjo Mena, que tambi¨¦n dirigi¨® la Sinfon¨ªa ¡°Pat¨¦tica¡±, de Chaikovski, junto a una obra de Mark Simpson el pasado 27 de julio, resalt¨® la dificultad que tiene la ac¨²stica del Royal Albert Hall: ¡°Es una espacio inmenso que cuesta mucho llenar de sonido¡±. En eso coincide con el flautista y director, Jaime Mart¨ªn, quiz¨¢ el m¨²sico espa?ol que m¨¢s veces ha participado en los Proms como integrante de varias orquestas: ¡°Es complicado incluso saber para qui¨¦n tocas, es decir, si piensas en el p¨²blico del Royal Albert Hall o en los oyentes de la BBC, pues el planteamiento interpretativo que beneficia a uno perjudica al otro¡±, reconoc¨ªa en Santander a este peri¨®dico hace pocos d¨ªas.
El pasado 19 de agosto le lleg¨® el turno tambi¨¦n al Orfe¨® Catal¨¤ dentro de los Gurrelieder, de Schoenberg, que Simon Rattle dirigi¨® a la London Symphony. Fue una jornada muy emotiva, que se inici¨® una hora antes del concierto delante del Royal Albert Hall; cantaron bajo la direcci¨®n de su titular, Simon Halsey, una emotiva versi¨®n del responsorio O vos omnes, de Pablo Casals, en memoria de las v¨ªctimas de los recientes atentados yihadistas en Catalu?a. Y todav¨ªa falta el debut del director Pablo Heras-Casado con la Orquesta Barroca de Friburgo, el pr¨®ximo 3 de septiembre, dirigiendo un programa ¨ªntegramente dedicado a Mendelssohn que forma parte de su ¨²ltimo disco que acaba de publicar Harmonia Mundi; el director granadino considera, en declaraciones telef¨®nicas a EL PA?S, que este debut llega en un momento de consolidaci¨®n como director invitado de varias orquestas brit¨¢nicas como la London Symphony y la Philharmonia.
Pero tambi¨¦n se han escuchado composiciones espa?olas en esta edici¨®n de los Proms, aunque siempre en manos de m¨²sicos for¨¢neos. El pasado 17 de agosto, la mezzo francesa St¨¦phanie d¡¯Oustrac cant¨® en El amor brujo, de Falla, bajo la direcci¨®n de Charles Dutoit. E incluso en una matin¨¦e del Cadogan Hall, el 21 de agosto, la mezzo alemana, Christiane Karg, incluy¨® las Seis canciones castellanas, de Guridi, dentro de un exquisito recital de m¨¦lodie francesa acompa?ado al piano por Malcolm Martineau. M¨¢s impactante incluso ha sido la sinfon¨ªa Mural, del joven compositor Francisco Coll. Su maestro y protector, Thomas Ad¨¨s, dirigi¨® esta monumental obra a la Joven Orquesta Nacional de Gran Breta?a, el pasado 5 de agosto. Ya el a?o pasado, Ad¨¨s dirigi¨® en este mismo festival Cuatro miniaturas ib¨¦ricas, obra para viol¨ªn y orquesta de este joven compositor valenciano, aunque esta vez ha podido estar presente y salir a recibir los aplausos del p¨²blico de los Proms: ¡°Es complicado explicar con palabras lo que sent¨ª al escuchar Mural en el Royal Albert Hall¡ Me pareci¨® una versi¨®n llena de energ¨ªa y pasi¨®n¡±, ha reconocido Coll por correo electr¨®nico a este peri¨®dico.
En el apartado de solistas de piano, Javier Perianes se acaba de convertir en el quinto pianista espa?ol en debutar en los Proms, tras Jos¨¦ Iturbi, Alicia de Larrocha, Rafael Orozco y Joaqu¨ªn Ach¨²carro. ¡°Es algo muy especial para m¨ª y, sobre todo, si tenemos en cuenta que Alicia de Larrocha toc¨® aqu¨ª en siete ediciones¡±, precisa el pianista andaluz que toc¨® una sensacional versi¨®n del Concierto para piano n? 2, de Saint-Sa?ns, con la BBC Symphony Orchestra bajo la direcci¨®n de Sakari Oramo. ¡°Es una obra tremendamente virtuos¨ªstica pero tambi¨¦n muy apropiada para los Proms¡±, precisa durante una conversaci¨®n previa a su concierto. Su versi¨®n fue solemne y po¨¦tica en el Andante sostenuto, donde Saint-Sa?ns avanza desde Bach a Schumann y Chopin, precisamente donde escuchamos al Perianes m¨¢s po¨¦tico. El ligero y mendelssoniano Allegro scherzando son¨® algo m¨¢s alocado de lo habitual en la orquesta, aunque lo mejor de la noche lleg¨® a continuaci¨®n con el fren¨¦tico Presto final, que son¨® convertido en un espectacular tour de force. El concierto se hab¨ªa iniciado con una colorista versi¨®n de la primera suite de Sc¨¨nes historiques, de Sibelius, cuyo bolero final sirvi¨® como una especie de bienvenida al pianista espa?ol. Concluy¨® con la siempre discutible Tercera sinfon¨ªa, de Elgar que fue elaborada y completada por el compositor Anthony Payne que sali¨® a recibir los aplausos del p¨²blico.
Esta 123? edici¨®n de los Proms ha estado marcada por alusiones y manifestaciones contra el Brexit, especialmente en los primeros conciertos. As¨ª, en la primera noche de los Proms, el pianista Igor Levit toc¨® como propina un arreglo para piano del himno beethoveniando de la Uni¨®n Europea; y el director Daniel Barenboim clam¨® en un discurso improvisado pocos d¨ªas despu¨¦s en favor de una cultura global y en contra de las tendencias aislacionistas del Reino Unido. Pero de todos los conciertos de este festival, el m¨¢s festivo y emblem¨¢tico no llegar¨¢ hasta el 9 de septiembre: se conoce como la ?ltima Noche de los Proms. Ese d¨ªa el ambiente informal adquiere tintes casi carnavalescos, con una honda impronta patri¨®tica y dentro de una sala plagada de banderas y alusiones nacionales. En los ¨²ltimos a?os se ha establecido la tradici¨®n de terminar este concierto con todo el auditorio cantando con los brazos entrelazados la famos¨ªsima canci¨®n escocesa Auld lang syne. Un canto de despedida a la espera de los Proms de 2018.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.