Un pr¨ªncipe saud¨ª, propietario del ¡®Salvator Mundi¡¯ de Da Vinci, el cuadro m¨¢s caro de la historia

450 millones de d¨®lares son muchos millones incluso para la ¨²ltima pintura en el mercado de Leonardo Da Vinci, el Salvator Mundi. La puja evidenci¨® un decidido empe?o por hacerse con el cuadro. Nada m¨¢s cerrarse la subasta el pasado 15 de noviembre se desat¨® la curiosidad. Pero la revelaci¨®n del nombre del comprador por parte de The New York Times, este jueves, solo ha a?adido m¨¢s misterio al asunto. El pr¨ªncipe saud¨ª que consigui¨® la pieza, Bader Bin Abdullah Bin Mohamed Bin Farhan al Saud, no solo es un desconocido en el mundo del arte, sino que adem¨¢s no va a colgarla en su palacio.

¡°El Salvator Mundi de Da Vinci se viene al Louvre Abu Dhabi¡±, tuite¨® el flamante museo a media tarde del mi¨¦rcoles en ingl¨¦s, franc¨¦s y ¨¢rabe. ?En qu¨¦ quedamos? ?El cuadro lo hab¨ªa comprado un pr¨ªncipe saud¨ª o un emirat¨ª? Y ah¨ª es donde la historia se convierte en pol¨ªtica y el car¨¢cter religioso de la pintura adquiere un metasignificado que trasciende su valor art¨ªstico.

Porque m¨¢s all¨¢ de la controversia sobre su autor¨ªa, la pintura resulta altamente arriesgada para un saud¨ª, pr¨ªncipe o no. En un pa¨ªs dominado por una austera y disputada interpretaci¨®n del islam, conocida como wahabismo, la representaci¨®n humana puede herir sensibilidades. M¨¢s a¨²n trat¨¢ndose de Cristo, a quien los musulmanes consideran un profeta.

De acuerdo con la investigaci¨®n de The New York Times, los responsables de Christie¡¯s, la empresa encargada de la venta del Da Vinci y que no comentan sobre sus clientes, tuvieron dificultades para establecer la identidad y la capacidad financiera del pujador. Incluso, una vez que el pr¨ªncipe Bader hubo facilitado el requerido dep¨®sito de 100 millones de d¨®lares para participar en la subasta, los abogados de la firma se plantearon dudas sobre el origen del dinero.

No era para menos. Apenas diez d¨ªas antes, Mohamed Bin Salm¨¢n (MBS), hijo y heredero del rey saud¨ª, hab¨ªa encerrado a once pr¨ªncipes, entre dos centenares de altos cargos y empresarios, en una purga contra la corrupci¨®n, y las riquezas de los privilegiados miembros de la extensa familia real estaban bajo lupa. El potencial comprador dijo que sus fondos ven¨ªan ¡°del sector inmobiliario¡±. Los datos descubiertos por el diario neoyorquino sugieren que la respuesta fue un ejercicio de modestia.

Bader no es, como dijo, uno m¨¢s entre los 5.000 pr¨ªncipes de la Casa de Al Saud. Aunque los Al Farhan de los que desciende son una rama colateral de la familia gobernante, el desconocido pr¨ªncipe coincidi¨® en la Universidad King Saud de Riad con quien iba a terminar siendo el pr¨ªncipe m¨¢s poderoso del reino, MBS, con quien al parecer hizo una gran amistad. A ella se atribuye su nombramiento al frente del Grupo Saudi Research and Marketing, editor del diario Al Sharq al Awsat y propiedad de la familia Salm¨¢n, la primera vez que se encomienda a alguien ajeno a la familia.

No es el ¨²nico v¨ªnculo. El pasado julio, el rey Salm¨¢n nombr¨® a Bader responsable de una nueva comisi¨®n, presidida por el omnipresente MBS, para desarrollar el potencial arqueol¨®gico de Al Ula, donde se encuentra la ciudad nabatea de Madain Salih y que es uno de los ejes del desarrollo tur¨ªstico que quiere potenciar el heredero dentro de su Vision 2030. Bader tambi¨¦n es miembro del consejo de administraci¨®n de Energy Holdings International, una empresa de energ¨ªa. La biograf¨ªa que aparece en su web, le describe adem¨¢s de cofundador de un consorcio para construir una red de fibra ¨®ptica y de una compa?¨ªa de reciclaje y tratamiento de residuos. Menciona tambi¨¦n su participaci¨®n en proyectos inmobiliarios ¡°en Arabia Saud¨ª, Dub¨¢i y Oriente Pr¨®ximo durante los ¨²ltimos cinco a?os¡±.

Esa relaci¨®n privilegiada es lo que ha llevado a algunos observadores a preguntarse si el pr¨ªncipe Bader no habr¨¢ comprado el Salvator Mundi por encargo de MBS. Eso explicar¨ªa que el intermediario no haya tenido miedo de llamar la atenci¨®n en un momento de purga, que no tema ser tachado de iconoclasta (MBS est¨¢ limitando el poder del estamento religioso) y que el cuadro pueda acabar en Abu Dhabi, cuyo pr¨ªncipe heredero y gobernante de facto, el jeque Mohamed Bin Zayed (MBZ) es el principal aliado de MBS en la regi¨®n.