?Qu¨¦ dir¨ªa Pradera?
Jordi Gracia arma con gran sensibilidad un libro sobre la trayectoria del editor a partir de textos escritos por el tambi¨¦n l¨²cido periodista de opini¨®n
Seis a?os despu¨¦s de su muerte algunos de sus amigos siguen pregunt¨¢ndose en momentos de especial zozobra: ¡°?Qu¨¦ dir¨ªa Pradera?¡±. No necesariamente para coincidir con ¨¦l, sino por su capacidad para hacer las preguntas imprescindibles y su lucidez para iluminar los ¨¢ngulos ciegos. Poco dado al protagonismo social, actu¨® como levadura madre en los territorios profesionales que frecuent¨®: el periodismo de opini¨®n, sobre todo en EL PA?S, que le debe una parte sustantiva de su acervo intelectual y moral, y la edici¨®n de libros. De esto ¨²ltimo trata el t¨ªtulo que Jordi Gracia ha armado con gran sensibilidad sobre textos de Javier Pradera, con m¨ªnimos apuntes a pie de p¨¢gina.
Los libros le permitieron empezar a soldar la tremenda fractura que hab¨ªa provocado la Guerra Civil en la cultura espa?ola y recuperar parte de la memoria que hubo de refugiarse en Am¨¦rica. M¨¦xico-Buenos Aires-Madrid fue el tri¨¢ngulo sobre el que pivot¨® su oficio de editor, definido por ¨¦l mismo como ¡°el m¨¢s bello del mundo¡±. Algunas de sus cartas de los a?os sesenta, hace apenas medio siglo, nos retrotraen a los tiempos hoy casi inveros¨ªmiles de la censura.
Su m¨¢s memorable herencia editorial fue sin duda el cat¨¢logo de Alianza Bolsillo, que en 1984 celebr¨® con solemnidad inhabitual en Pradera sus primeros 1.000 t¨ªtulos, que permitieron a dos generaciones de espa?oles acceder a autores esenciales de la cultura del siglo XX que el r¨¦gimen de Franco se hab¨ªa obstinado en vetar. Volcado sobre la vertiente cultural del oficio de editor, siempre supo que su sostenibilidad depend¨ªa del beneficio.
Los libros le permitieron empezar a soldar la? fractura que hab¨ªa provocado la Guerra Civil en la cultura espa?ola
A finales de los ochenta tuvo un conflicto definitivo con el accionista mayoritario de Alianza, que decidi¨® poner en venta la editorial convencido de que solo una empresa de mayor tama?o garantizar¨ªa su futuro. Pradera intent¨® sin ¨¦xito convencer a Diego Hidalgo de que aceptara una propuesta de los trabajadores, incluso articul¨® una oferta de un grupo de inversores interesado en mantener la navegaci¨®n solitaria de Alianza. El libro recoge dos largos y minuciosos informes elevados al consejo de administraci¨®n en los que detalla sus incansables gestiones, a las que el accionista hizo o¨ªdos sordos. Llegado a este extremo decidi¨® poner punto final a sus 30 a?os como editor, aunque dijera luego que fue la edici¨®n la que le abandon¨® a ¨¦l y no al rev¨¦s.
Fue un tiempo de malestar en el que vio peligrar la esencia cultural de su trabajo. En varias conferencias dej¨® testimonio de que se avecinaban tiempos dif¨ªciles en los que grandes conglomerados pod¨ªan convertir el libro en una mercanc¨ªa m¨¢s, sometida a las leyes del m¨¢ximo beneficio. Ese no era su mundo, que hund¨ªa sus ra¨ªces en Tito Pomponio Attico, editor de Cicer¨®n hace m¨¢s de 2.000 a?os.
Pero los dos ¨²ltimos textos del libro (El despertar de la bella durmiente y Contra la melancol¨ªa o la continuidad del oficio) abren una puerta a la esperanza a trav¨¦s de Internet y los buscadores de red, que permiten una microedici¨®n a la medida de lectores cada vez m¨¢s diferenciados, aunque ¨¦l no se ver¨¢ nunca como editor de libros en un soporte distinto al papel. En cualquier caso, escribe: ¡°No podemos convertir nuestros problemas personales, o nuestra mala pata, o nuestra mala suerte biogr¨¢fica, en una eleg¨ªa por la decadencia de la cultura occidental o del mundo editorial¡±.
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Autor: Javier Pradera.
Editorial: Trama (2017).
Formato: tapa blanda ( 256 p¨¢ginas)
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