¡°Odio a los directores que dicen: ¡®Tengo una pel¨ªcula en la cabeza¡±
Christian Petzold inaugura el Festival de Cine Alem¨¢n en Madrid con 'En tr¨¢nsito' El filme es la adaptaci¨®n contempor¨¢nea de una novela sobre un refugiado del horror nazi
La escena se repet¨ªa id¨¦ntica, cada verano. Se juntaban en una piscina p¨²blica. Se colocaban uno al lado del otro. Y se sumerg¨ªan, por en¨¦sima vez, en la lectura de la misma novela. Por nada en el mundo Christian Petzold, cineasta, y Harun Farocki, guionista, renunciaban a su rutina literaria favorita. Ni un a?o sin Tr¨¢nsito, el libro de Anna Seghers sobre un hombre que busca refugio tras huir de un campo de concentraci¨®n nazi. ¡°Ha sido una referencia en todos nuestros proyectos¡±, reconoce Petzold (Hilden, 1960). Inspir¨® B¨¢rbara, la pel¨ªcula m¨¢s aplaudida del d¨²o, centrada en una doctora exiliada a un pueblo de la Alemania Este. E influy¨® en Phoenix, un drama con ecos del Holocausto que cosech¨® una buena taquilla en 2014. Ese mismo a?o, sin embargo, Farocki falleci¨®. Y con ¨¦l la tradici¨®n literaria de dos amigos. En la piscina, por primera vez, nadie abri¨® Tr¨¢nsito.
La muerte de Farocki trunc¨® tambi¨¦n otro proyecto. Ambos creadores hab¨ªan pensado varias veces en llevar al cine su novela fetiche. Cuando se qued¨® solo, Petzold apart¨® tanto la idea como el libro. En el fondo, iba en contra de sus creencias: ¡°Barry Lyndon, El resplandor o Lawrence de Arabia son libros y filmes estupendos. Pero, por lo general, Harun y yo siempre cre¨ªmos que solo la mala literatura puede ser llevada al cine. La mayor¨ªa de productores compra los derechos de superventas de los que solo les interesa la historia. Me resulta aburrido, la gran literatura es much¨ªsimo m¨¢s que la trama¡±. De ah¨ª que tardara dos a?os en retomar Tr¨¢nsito, volver a leerla y decidirse. La adaptaci¨®n de la novela llega al fin este viernes a las salas ¡ªhoy martes inaugura el Festival de Cine Alem¨¢n en Madrid¡ª , titulada En tr¨¢nsito, con el mismo hilo argumental, pero con una gran diferencia. ¡°Parece una versi¨®n de Casablanca escrita por Kafka¡±, lo resume la cr¨ªtica del filme en la web Indiewire.
En la obra original, ambientada en 1942, el fugitivo del horror nazi suplanta la identidad de un escritor fallecido para lograr escapar de la Francia invadida hacia M¨¦xico. En el En tr¨¢nsito de Petzold la historia se repite, pero cambia el tiempo. Mientras los di¨¢logos y la narraci¨®n parecen evocar la Segunda Guerra Mundial, la Francia de Vichy y la persecuci¨®n a los jud¨ªos, el protagonista se mueve en realidad entre las calles y los habitantes de la Marsella contempor¨¢nea. ¡°El cine es tomarle el pulso a la actualidad, as¨ª que decid¨ª crear un paralelismo con lo que ocurre hoy, un tr¨¢nsito entre el pasado y la contemporaneidad¡±, defiende Petzold.
Al fin y al cabo, el cineasta considera que ¡°xenofobia¡± y ¡°nacionalismo¡± recuperan poder¨ªo y fieles en esta ¨¦poca, mientras mareas humanas se fugan de guerras y miserias en busca de asilo. Su madre y su padre tambi¨¦n huyeron, de la Alemania Este hasta el otro lado del Muro, para hacerse pintora y actor. Sus sue?os nunca cuajaron, pero su hijo s¨ª ha logrado convertirse en creador. En el cine, otro medio en periplo constante, seg¨²n Petzold: ¡°Cuando ves una pel¨ªcula est¨¢s en una zona de tr¨¢nsito, sentado en la butaca y a la vez en otros lugares. El cine ama a los viajeros y es un proceso en marcha, en desarrollo. En la producci¨®n de un filme nunca sabes qu¨¦ saldr¨¢. Eso es lo que me interesa¡±. Para ello, cita al director franc¨¦s Jean-Luc Godard: ¡°Dijo que el montaje es como el amor. A veces juntas dos im¨¢genes y no encajan, no ocurre nada. En otras ocasiones se convierten en algo nuevo, distinto y eso es el cine¡±.
Petzold subraya tambi¨¦n que es un medio colectivo. ¡°Odio a los cineastas que andan diciendo: ¡®Tengo una pel¨ªcula en la cabeza¡¯. Un director no puede convertirse en un escritor solitario. Amo la parte industrial del cine, su sentimiento partisano. Es un proyecto com¨²n, que implica a muchas personas¡±. Aunque a veces, para que nazca, hacen falta muchas menos. Bastan dos amigos, leyendo en una piscina.?
Babelia
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