Jos¨¦ Guirao, nuevo ministro de Cultura y Deporte
El exdirector del Museo Reina Sof¨ªa sustituir¨¢ a M¨¤xim Huerta en el Gobierno de Pedro S¨¢nchez
Jos¨¦ Guirao Cabrera ha sido elegido como nuevo ministro de Cultura y Deportes, en sustituci¨®n de M¨¤xim Huerta, que ha dimitido este mi¨¦rcoles tras conocerse que entre 2006 y 2008 defraud¨® 256.778 euros?al fisco, seg¨²n una informaci¨®n adelantada por El Confidencial. Guirao, gestor cultural, ha desempe?ado cargos relacionados con el mundo del arte desde los ochenta. Fue director del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sof¨ªa entre 1994 y 2001 y, de 2002 a 2014, director de La Casa Encendida de 2002 a 2014, un exitoso experimento cultural en el coraz¨®n del madrile?o barrio de Lavapi¨¦s.
De la cultura de masas a la exquisitez en una semana. La salida fulminante de Huerta ha propiciado un remedio de urgencia, que implica un notable golpe de tim¨®n. No hab¨ªa pasado hora y media desde que el periodista y escritor dec¨ªa adi¨®s en la sede del ministerio cuando Moncloa anunci¨® su sustituto: Guirao (Pulp¨ª, Almeria, 1959), hombre refinado y experto en gesti¨®n, que despierta el consenso en los ¨¢mbitos del arte, la literatura y las vanguardias.
El presidente Pedro S¨¢nchez arriesg¨® con Huerta. Y el mundo de la cultura lo recibi¨® con cierto desd¨¦n. El nuevo ministro es, por el contrario, un hombre bregado en casi todos los aspectos de la vida cultural, especialmente en la gesti¨®n muse¨ªstica.
Su nombre ya son¨® en las quinielas cuando S¨¢nchez dio la sorpresa con la designaci¨®n de Huerta. Entonces respond¨ªa con humor a quien le preguntaba sobre esa posibilidad. Este mi¨¦rcoles la cosa fue en serio. A las 16.30, el nuevo ministro fue llamado a consultas. Cuando el presidente del Gobierno acord¨® con Huerta su salida hacia las 17.00, Guirao estaba llegando a Moncloa. Tras una larga conversaci¨®n, acept¨®.
Dos se?ales lanzaba S¨¢nchez con una maniobra que, al fin y al cabo, ha resultado una carambola. Por un lado, enmendar un error cara a los sectores culturales, m¨¢s dispuestos a confiar en un pata negra cultural. Por otro, oponer un remedio de cirujano a cualquier sombra de duda que manchara la imagen pulcra perseguida con los nombramientos de su Gabinete de ministros.
Licenciado en Filolog¨ªa Hisp¨¢nica, Guirao es un profesional curtido y transversal que se maneja bien, sobre todo, en el arte y la literatura. Tiene maneras de fina diplomacia, aunque es franco cuando la ocasi¨®n se presta. Y conoce bien los entramados de la gesti¨®n p¨²blica y privada, donde ha creado una escuela de pupilos j¨®venes, como la actual directora de La Casa Encendida, Luc¨ªa Casani. Adem¨¢s tiene fama de buen consigliere dentro del mundo de los mecenazgos y los organismos privados.
Como prueba de sus dotes para la pol¨ªtica cuenta el hecho de que desempe?ara durante siete a?os el cargo de director del Reina Sof¨ªa con dos partidos distintos y en un tiempo en el que sus responsables se suced¨ªan con vertiginosa cadencia y los museos, no solo este, se empleaban como parte del debate partidista. Tras mudarse de Sevilla a Madrid tras una fulgurante carrera en Andaluc¨ªa, donde fue director general de Bienes Culturales, estuvo un a?o de director de Bellas Artes y Archivos del Ministerio de Cultura. Comenz¨® su mandato en el Reina con apenas 35 a?os. Y desempe?¨® el cargo con Carmen Alborch (PSOE) como titular de Cultura, y, ya con el PP en el Gobierno, con Mariano Rajoy, Esperanza Aguirre y Pilar del Castillo de ministros.
De ah¨ª salt¨® a uno de los proyectos m¨¢s novedosos de las ¨²ltimas d¨¦cadas en Madrid: La Casa Encendida, donde forj¨® una programaci¨®n que, con un ojo puesto en las tendencias y las vanguardias, contribuy¨® a la ebullici¨®n cultural del nuevo Lavapi¨¦s.
Desde 2014, es director general de la Fundaci¨®n Montemadrid, de la que depende La Casa Encendida. Es adem¨¢s patrono, entre otras, de la Fundaci¨®n Federico Garc¨ªa Lorca, de la Fundaci¨®n Antonio Gala .
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