La conexi¨®n francesa
El maestro Michel Portal clausura el festival con dos conciertos memorables, en contraste con la descafeinada reuni¨®n de la Akoustic Band de Chick Corea
Ah, Francia y el jazz. Su jazz, porque podemos hablar de un jazz de sensibilidad franc¨¦s, que abarca una buena cantidad de est¨¦ticas adem¨¢s, algunas de las cuales fueron excelentemente representadas en el Teatro Victoria Eugenia de San Sebasti¨¢n en las ¨²ltimas jornadas del Jazzaldia. Doce horas despu¨¦s de que la flautista parisina Na?ssam Jalal y su grupo Rhythms Of Resistance ofreciesen un fascinante recital en la medianoche del s¨¢bado ¡ªaunando jazz y m¨²sica ¨¢rabe con un gusto exquisito¡ª, el legendario Michel Portal recib¨ªa el premio Donostiako Jazzaldia en el mismo escenario, convirti¨¦ndose en el primer franc¨¦s en obtener el galard¨®n.
El clarinetista de Baiona regresaba al festival 32 a?os despu¨¦s de su ¨²ltima visita ¡ªen julio de 1986, compartiendo cartel con Don Cherry, la Vienna Art Orchestra y un tal Miles Davis, entre otros¡ª y lo celebr¨® con sendos conciertos en cuales que se uni¨® a dos proyectos diferentes del joven talento del saxo soprano ?mile Parisien: a mediod¨ªa, su d¨²o junto al extraordinario acordeonista Vincent Peirani, y a medianoche su quinteto Sfumato.
Ambos recitales fueron tan sensacionales como diferentes: en el primero, tras algunos temas en d¨²o con Peiranu (primero Parisien, despu¨¦s Portal), los tres m¨²sicos desgranaron juntos algunas piezas deliciosas, con mucho humor y car¨¢cter amable y cercano. Vi¨¦ndolo tocar uno nunca dir¨ªa que Portal tiene la friolera de 82 a?os, porque se muestra en una forma espectacular, manteniendo el pulso a sus j¨®venes compatriotas como uno m¨¢s, a pesar de ser un pedazo de historia musical viviente.
Hay que tener cuidado en no confundir historia con nostalgia: el maestro Michel Portal es historia del jazz franc¨¦s y, por extensi¨®n, europeo; por otro lado, la reuni¨®n de la ef¨ªmera Akoustic Band de Chick Corea que actu¨® por la noche en La Trinidad tiene m¨¢s que ver, entendemos, con la nostalgia. Cuesta creer que haya grandes anhelos musicales detr¨¢s de ella ¡ªpuede haberlos personales, qu¨¦ duda cabe¡ª porque ni en su momento, a finales de los 80, ni mucho menos en su concierto en San Sebasti¨¢n, el grupo ha tenido la qu¨ªmica de otros tr¨ªos ac¨²sticos de Corea, como los que tuvo con Miroslav Vitous y Roy Haynes o con Avishai Cohen y Jeff Ballard, por ejemplo.
Casi 30 a?os despu¨¦s del ¨²nico ¨¢lbum de la banda, que no era sino un spin-off ac¨²stico de la c¨¦lebre Elektrik Band de Corea, el pianista se ha reunido con John Patitucci y Dave Weckl para una gira que, aparte de la mencionada nostalgia, poco m¨¢s tiene que aportar. Desde el primer momento, su concierto en San Sebasti¨¢n fue la viva muestra de que tres m¨²sicos pueden tocar estupendamente y, al mismo tiempo, no funcionar en absoluto como grupo. Weckl en concreto, se mostr¨® incapaz de acompa?ar con tino a sus compa?eros; por momentos, ni siquiera parec¨ªa que el bater¨ªa supiera tocar el tipo de m¨²sica que hace el grupo, provocando que todo sonase atropellado y tedioso durante la mayor parte del concierto. Pero al final, c¨®mo no, tocaron el obligado "Spain" de Corea, y todo el mundo cant¨® y se qued¨® contento.
Afortunadamente, poco despu¨¦s ?mile Parisien y su quinteto acogieron de nuevo a Portal y Peirani en el Victoria Eugenia, y lo hicieron con toda naturalidad, convirti¨¦ndose en un mete¨®rico septeto que dio rienda suelta a la otra cara del l¨ªder: la del jazz din¨¢mico y contempor¨¢neo en el que grupo y solistas conjugan un poderoso tejido ac¨²stico, que va desde lo m¨¢s reflexivo a la explosi¨®n colectiva. La presencia de m¨²sicos tan brillantes como el guitarrista Manu Codjia o el pianista Roberto Negro ¡ªen sustituci¨®n del titular Joachim K¨¹hn¡ª hizo que las improvisaciones de alto voltaje no dejasen de surgir, y Portal, nuevamente, hizo cantar y aullar su clarinete bajo como uno m¨¢s del grupo. Excelente clausura para una edici¨®n del festival que se sit¨²a, sin ninguna duda, entra las mejores de los ¨²ltimos tiempos.
Babelia
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