El orgullo gitano de Petitet

A Joan Xim¨¦nez (Barcelona, 1962) se le conoce en los escenarios como Petitet, el gitano que ha heredado el trono de la rumba catalana. Hijo de Ram¨®n, El huesos, uno de los palmeros que acompa?aban a Peret, prometi¨® a su madre volver a llevar el g¨¦nero a lo m¨¢s alto. Al menos durante una noche. As¨ª que se ech¨® a las espaldas el fantasma del olvido y una permanente debilidad muscular a la que le condena la enfermedad rara que padece, miastenia gravis. Termin¨® nada menos que el Liceo de Barcelona.

Carlos Bosch, candidato al ¨®scar por Balseros, resume la cr¨®nica de este viaje en forma de documental que lleva el nombre y el ADN de su protagonista. Entre la salida y la meta de esta odisea gitana, Petitet recluta a un grupo de m¨²sicos para resucitar las melod¨ªas de su infancia. Intenta como puede domar el caos propio de aquellos que han pasado muchas noches sobre los escenarios de los bares de Barcelona para que congenie con la disciplina de la Orquesta Sinf¨®nica del gran teatro catal¨¢n, a cuyos responsables ¨¦l mismo convence para esta fusi¨®n musical.

¡°Fue un gesto que hice por la promesa que hice a mi madre, porque la pelea por la rumba ya la dej¨¦ hace a?os, cuando muri¨® mi padre. Yo aprend¨ª de mis ellos dos y de Peret un concepto de la m¨²sica que ya no existe¡±, cuenta por tel¨¦fono desde un hospital barcelon¨¦s, que en los ¨²ltimos tiempos ha visitado a menudo.

Tras subirse al escenario del Liceo, ha surgido una gira con la que mostrar por el resto de Espa?a el giro sinf¨®nico que le ha dado a la rumba catalana, consciente de que el sonido tradicional, el de Peret, es casi imposible de revivir. ¡°?l era como la Coca-Cola: ten¨ªa una qu¨ªmica que nadie sabe de d¨®nde sal¨ªa. Nadie puede imitarlo y mira que muchos lo han intentado¡±.

Un d¨ªa ense?¨® a Carlos Bosch un reportaje dedicado a la vida del Raval y sus personajes en el que, por supuesto, ¨¦l no pod¨ªa faltar. Al verlo, el director decidi¨® que la historia de Petitet merec¨ªa su propia pel¨ªcula, que puede verse en Movistar +, en la que el barrio barcelon¨¦s actuara como personaje secundario. ¡°Ahora es un corral de gallinas. Han dejado la puerta abierta y ha entrado todo el mundo. Pero eso no siempre es malo. La tierra es de todos. Quiz¨¢ vendr¨ªa bien un peque?o control, pero es de todos los que respeten el sitio al que entran¡±, dice con honesta espontaneidad.

El mismo concepto lo aplica a la cultura general y a la suya propia cuando se le pregunta por la cantante Rosal¨ªa, que enfrenta a menudo cr¨ªticas en nombre de la cada vez m¨¢s mencionada apropiaci¨®n cultural. ¡°Jam¨¢s pensar¨ªa que Rosal¨ªa nos est¨¢ robando nada. La conoc¨ª el a?o pasado, que los dos actuamos en las fiestas de La Merc¨¦ en la Catedral de Barcelona. No sabes el arte que tiene esa ni?a. A los cinco minutos, toda la gente ya tarareaba sus canciones y tambi¨¦n imitaban su estilo al cantar. Y qu¨¦ m¨¢s da si es gitana o lo que sea. A esa ni?a hay que prestarle atenci¨®n¡±, defiende.

Por eso Petitet, tan enemigo de las fronteras, no entiende que sigan existiendo clich¨¦s sobre su etnia, ni siquiera cuando llegan en forma de broma como las del pol¨¦mico mon¨®logo de Rober Bodegas (Pantomima Full).

¡°El Robin Hood ese¡­ Ese chico la verdad es que a m¨ª, ni f¨² ni f¨¢, como dir¨ªa Peret. Se ha equivocado y creo que se ha dado cuenta. Se ha cerrado m¨¢s puertas de las que se ha abierto¡±, dice con un tono m¨¢s comprensivo que airado, para despu¨¦s tirar de iron¨ªa: ¡°Es que las cosas que se dicen de los gitanos¡­ ?No hab¨ªa por ah¨ª una rubia que era paya y se hizo ministra [sic]? Hay que ir a robar cremas para que te hagan ministro. Y otros payos, sin estudiar, les dan un m¨¢ster. Por eso no hay que generalizar. Hay de todo. Hay gitanos tan malos que mejor que te apartes¡­ como con algunos payos¡±.

Con su promesa cumplida y un pu?ado de conciertos en el horizonte, Petitet prefiere ahora dedicarse a sus hijos y nietos. ¡°Ya solo tengo un reto, que es re¨ªr y re¨ªr y pas¨¢rmelo bien. Y seguir luchando para hacer algo de m¨²sica. Con eso me vale. Pero por favor, cuando se publique esto, haz el favor de coger una foto en la que salga guapo¡±.