Llega el ¡®true crime¡¯ literario, llega la nueva Serie Negra
La m¨ªtica colecci¨®n de RBA se renueva con una apuesta por el menos es m¨¢s y la introducci¨®n de un g¨¦nero en boga: el de la no ficci¨®n criminal
Saben, los amantes de lo criminal literario, que el pen¨²ltimo auge del g¨¦nero en Espa?a lo lider¨® la colecci¨®n que por entonces, hace m¨¢s de una d¨¦cada, dirig¨ªa Anik Lapointe: la Serie Negra, de RBA. La primera novela negra que se edit¨® en RBA fue una novela de Ian Rankin, Black & Blue. Se public¨® el a?o 2001. Por entonces no exist¨ªa una colecci¨®n de novela negra, si no que las novelas negras se publicaban en la colecci¨®n literaria, ¡°porque son literatura¡±, recuerda su directora editorial, Luisa Guti¨¦rrez. Seis a?os despu¨¦s, se decide crear un premio de novela negra, el mejor dotado del mundo, el RBA de Novela Polic¨ªaca, y decididos a apostar por el g¨¦nero, en un momento en que justo se asist¨ªa a su definitivo despegue en Espa?a, un a?o m¨¢s tarde, en 2008, se creaba la colecci¨®n Serie Negra. Su primer t¨ªtulo, La muerte de Amalia Sacerdote, de Andrea Camilleri, coincid¨ªa en librer¨ªas con el primero de Stieg Larsson, Los hombres que no amaban a las mujeres (Destino), la novela llamada a poner de moda el crimen n¨®rdico, y a devolver la fe a un mercado maltratado por la sensaci¨®n de que el lector de g¨¦nero no era un lector literario.
As¨ª, desde 2008 hasta 2014, y con la colecci¨®n noir de la prestigiosa Gallimard en mente, se publicaron cl¨¢sicos, pero tambi¨¦n autores contempor¨¢neos, recuerda Guti¨¦rrez, con la idea de crear ¡°un mapa de lo m¨¢s completo posible¡± en lo que a novela negra se refer¨ªa. Conviv¨ªan, en la colecci¨®n, La jungla de asfalto, de William Riley Burnett, con La mala mujer, de Marc Pastor; los cl¨¢sicos de Raymond Chandler con los musculosos noirs hist¨®rico-germ¨¢nicos de Philip Kerr.
El auge del g¨¦nero permit¨ªa al mercado absorber una enorme cantidad de t¨ªtulos. Se llegaron a publicar alrededor de 80 al a?o. Luego las cosas cambiaron, el mercado se estanc¨® y, con la salida de Lapointe del sello, la colecci¨®n se apag¨®, metida como estaba en un peque?o callej¨®n sin salida. ¡°La colecci¨®n en realidad nunca ha parado, pero durante este tiempo se ha limitado a reeditar t¨ªtulos o a seguir publicando a autores de la casa¡±, dice Antonio Lozano, ahora al frente de esta nueva etapa.
?Una nueva etapa para Serie Negra? S¨ª. Una en la que, para empezar, el n¨²mero de t¨ªtulos se reducir¨¢ a la mitad. ¡°Queremos ser exhaustivos en la selecci¨®n¡±, dice Lozano. Y en la que se dar¨¢ por primera vez cabida a la no ficci¨®n, aprovechando que el true crime, es decir, las historias basadas en cr¨ªmenes reales, m¨¢s bien, los libros reportaje que relatan casos reales ¨C y los examinan a fondo, a la manera en que lo hacen, tambi¨¦n, series de televisi¨®n, como Making a Murderer ¨C, es tendencia. As¨ª, hace unos d¨ªas, la serie se relanz¨® oficialmente con El asesino sin rostro, de Michelle McNamara. En El asesino sin rostro, McNamara se propuso descubrir qui¨¦n hab¨ªa sido el Asesino del Estado Dorado, el misterioso y violento depredador que, durante m¨¢s de una d¨¦cada, cometi¨® 50 agresiones sexuales en el norte de California antes de trasladarse al sur, donde perpetr¨® diez asesinatos. El tipo desapareci¨® en 1986, sin que nadie tuviera ni la m¨¢s remota idea de qui¨¦n era. Una d¨¦cada m¨¢s tarde, McNamara se propuso encontrarlo. Estudi¨® informes policiales, entrevist¨® a v¨ªctimas y buce¨® en comunidades online tan obsesionadas como ella con el caso. Qui¨¦n sabe si habr¨ªa dado con ¨¦l si no hubiera muerto durante la investigaci¨®n.
Futuros cl¨¢sicos
¡°He sido lector y seguidor del true crime durante a?os, pero hasta ahora no ha habido un inter¨¦s real en el mercado espa?ol. El inter¨¦s es evidente por el creciente ¨¦xito de series documentales al respecto. Creemos que por fin ha llegado el momento¡±, dice el editor. Pero la no ficci¨®n no s¨®lo tomar¨¢ la forma de vol¨²menes que persigan a asesinos reales ¨C en 2019 desembarcar¨¢n en la colecci¨®n el crud¨ªsimo cl¨¢sico contempor¨¢neo, People Who Eat Darkness, de Richard Lloyd Parry, y Sombras de Reikiavik de Anthony Adeane, la historia de la desaparici¨®n, a¨²n sin resolver, de dos tipos en la pac¨ªfica capital de Islandia, que ha dado pie a un documental que puede verse en Netflix ¨C, sino tambi¨¦n de biograf¨ªas y libros tot¨¦micos como Cases Files of the NYPD, esto es, un compendio de no ya los casos m¨¢s c¨¦lebres, sino tambi¨¦n de c¨®mo fueron evolucionando las t¨¦cnicas de investigaci¨®n a lo largo de las d¨¦cadas. ¡°Hay curiosidades como la del tercer grado, el tipo de interrogatorio, que patent¨® la polic¨ªa de Nueva York¡±, cuenta Lozano.
He sido lector y seguidor del true crime durante a?os, pero hasta ahora no ha habido un inter¨¦s real en el mercado espa?ol Antonio Lozano
Un detective llamado Dashiell Hammet, de Nathan Ward, estrena el apartado biograf¨ªas. El libro relata los a?os de Hammet en la agencia de detectives Pinkerton, y entrelaza la experiencia del escritor con los relatos que luego acabar¨ªa escribiendo, lo que hace del todo evidente hasta qu¨¦ punto estaban todos basados en algo que le hab¨ªa ocurrido. Y no s¨®lo los relatos. La misma Cosecha roja tiene mucho que ver con uno de los trabajos que tuvo que hacer como investigador de la Pinkerton. ¡°Por entonces no s¨®lo se dedicaban a investigar, tambi¨¦n se los enviaba a reventar piquetes a las huelgas¡±, relata Lozano. Por lo dem¨¢s, la colecci¨®n seguir¨¢ con la reedici¨®n de cl¨¢sicos ¨C habr¨¢ incluso versiones ¨®mnibus ¨C, la edici¨®n de las nuevas novelas de autores de la casa ¨C Ian Rankin, la novela p¨®stuma de Philip Kerr, parte de lo pr¨®ximo de Benjamin Black ¨C, y atentos a nuevos fichajes. ?Alguno a destacar del pr¨®ximo a?o? ¡°S¨ª, Dean Koontz¡±, dice el editor.
?Dean Koontz? ?El famoso escritor de terror? S¨ª, tiene una serie de novelas protagonizada por una agente del FBI, Jane Hawk, especializada en asesinos en serie, que recuerda mucho, dice Lozano, a Jessica Jones, la superh¨¦roe detective de Brian Michael Bendis. ?M¨¢s nombres? Viejos conocidos de los amantes del g¨¦nero como Michael Koryta y George Pelecanos, y primeras novelas de qui¨¦n sabe si futuros cl¨¢sicos, Wil Medearis y Stina Jackson.
Pero todo eso llegar¨¢ en 2019. Por ahora, a quien recuperan es a David Mamet, con su primera novela en 20 a?os, Chicago, una historia negra ambientada en el Chicago de la Ley Seca. La colecci¨®n, de hecho, se reestrena con Chicago y el true crime de McNamara, y para el a?o pr¨®ximo tiene listos 30 t¨ªtulos. ¡°La idea es nunca superar los 40¡±, apunta el editor. ?Habr¨¢ cambios en el dise?o? ¡°S¨ª, la idea es que los t¨ªtulos sean ¨²nicos. Ha habido un redise?o de colecci¨®n, y hemos acabado con el fondo negro. Queremos personalizar al m¨¢ximo cada libro¡±, contesta.
?Sigue el g¨¦nero negro funcionando tan bien como hace unos a?os? Porque se dir¨ªa que el descenso en el n¨²mero de t¨ªtulos podr¨ªa tener que ver con el hecho de que el mercado ha levantado el pie del acelerador en ese sentido. ¡°El inter¨¦s del lector sigue estando ah¨ª pero es cierto que se hab¨ªa llegado a un punto de saturaci¨®n, hasta el punto de que, como el crimen vende, novelas no de g¨¦nero intentaban pasar por novelas de g¨¦nero. Estamos ahora mismo en un momento en el que debemos reconsiderar el g¨¦nero. Es decir, ser m¨¢s selectivos y abrirnos a nuevos enfoques. Lo criminal siempre interesar¨¢, pero hay que conseguir que interese tanto como antes, en un momento en el que la oferta es descomunal, y para eso hay que ofrecer algo nuevo¡±, articula Lozano, que ama, desde ni?o, las historias de Los Cinco ¨C un precedente detectivesco ¨C y que luego se dej¨® seducir por las de Agatha Christie, y acab¨® descubriendo que el g¨¦nero era algo superior leyendo Una investigaci¨®n filos¨®fica de Philip Kerr, un verano de adolescencia.
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