15 novelas negras para leer este puente
Esp¨ªas, maestros del thriller y alguna apuesta dist¨®pica para no parar de leer estos d¨ªas
El oto?o viene de nuevo cargado de novedades en un g¨¦nero muy prol¨ªfico y algo saturado. ?Se est¨¢ suicidando la novela negra? Nos pregunt¨¢bamos no hace tanto tiempo. Bueno, que cada cual juzgue. El caso es que me he quemado las pesta?as para cribar y elegir y poder apostar con criterio. Me dej¨¦ libros a medias y otros los termin¨¦ y no merece la pena contar mucho. Los aqu¨ª recogidos lo est¨¢n con todas las consecuencias.
Para no hacer esto demasiado largo, nos centramos en las novelas y dejamos la no ficci¨®n para otro post (parece que el panorama se anima y que a una excelente reedici¨®n de la fundacional Operaci¨®n Masacre de Rodolfo Walsh (Libros del Asteroide) se une una escalofriante cr¨®nica judicial de Helen Garner (Libros del K.O.) o una biograf¨ªa de Capone en Anagrama).
As¨ª que de algunos de nuestros cl¨¢sicos contempor¨¢neos m¨¢s queridos a la revitalizaci¨®n del g¨¦nero de esp¨ªas, pasando por una joya afrancesada (y no es, que tambi¨¦n, esa delicia de edici¨®n especial de Siruela con todo Fred Vargas) y un poco de ciencia ficci¨®n criminal y thrillers, tenemos todo lo que necesitas para empezar a quedarte en casa a leer. Para los m¨¢s puntillosos: es cierto, no todo son novelas.?
Una historia negra, Antonella Lattanzi (Reservoir Books, traducci¨®n de C¨¦sar Palma). Me gusta mucho esta novela inc¨®moda con momentos escalofriantes contados a trav¨¦s de la actitud de personajes complejos. Me gusta porque me toca la moral, porque no s¨¦ d¨®nde situarme, porque va a la l¨ªnea de flotaci¨®n de mis prejuicios. Carla, 38 a?os, es la principal sospechosa tras la desaparici¨®n de su exmarido Vito, una bestia que la ha maltratado toda vida. A partir de aqu¨ª, y tras un inicio de estilo difuso, se despliega una trama que hiere, que nos muestra personajes que nos van por donde esperas, que te irritan y sublevan, y ambientes familiares asfixiantes. Aqu¨ª hay v¨ªctimas por todas partes, algunas por partida triple.
Lean la excelente disecci¨®n que Laura Fern¨¢ndez hizo de la autora y de su libro
Cr¨ªmenes a la francesa, Mauro Armi?o, ed. (Siruela). Del excelente trabajo de recuperaci¨®n de cl¨¢sicos en un formato de calidad que est¨¢ haciendo Siruela nos llega ahora esta peque?a joya editada con cuidado y anotada con precisi¨®n y estilo por Armi?o, traductor, escritor y experto en cultura francesa que muestra una erudici¨®n y una sencillez poco comunes. Ya la introducci¨®n es una deliciosa clase de historia del crimen en Francia llena de personajes memorables que merecen un libro aparte. En los relatos, como en cualquier libro de recopilaci¨®n, los hay muy buenos y otros m¨¢s irregulares, pero la n¨®mina de autores es excelente: Honor¨¦ de Balzac, Guy de Maupassant, Gaston Leroux, Maurice Leblanc, Prosper M¨¦rim¨¦e, Alexandre Dumas, L¨¦on Bloy, Guillaume Apollinaire, y m¨¢s.
Caballos lentos, Mick Herron (Salamandra, traducci¨®n de Enrique de H¨¦riz). Una excelente noticia para los amantes de las novelas de espionaje. Jack Lamb es un personaje ¨²nico, un anti esp¨ªa, un tipo con las manos manchadas de pasado y grasa de bocata, un ser despreciable a veces y brillante siempre que es mucho mejor agente de lo que parece. Todo lo dem¨¢s, queda a merced del lector en una novela con ritmo y un glorioso sentido del humor.
Pueden leer m¨¢s sobre Herron y Lamb en este post.
Moscas, Agust¨ªn Pery (Pepitas). Con tantos autores reivindicando un puesto en la ficci¨®n criminal espa?ola m¨¢s pegada a la realidad, llega Pery y con los ingredientes m¨¢s sencillos lo consigue. A saber: pulso narrativo, conocimiento de la realidad que cuenta y mala leche. Un polic¨ªa navarro curtido en los peores tiempos de ETA y destinado despu¨¦s a Mallorca investiga la muerte de un periodista de investigaci¨®n que se met¨ªa con quien no deb¨ªa. Un ejercicio de poco m¨¢s de 100 p¨¢ginas sustentado en buenos di¨¢logos, mucho ritmo y un lenguaje bien escogido para cada situaci¨®n. Los personajes, tanto los del mundo policial- judicial como los de la alta alcurnia de Mallorca o los matados de los barrios bajos est¨¢n retratados con certeza y sin moralinas.
El sol verde, Kent Anderson (ADN, traducci¨®n de Cristina Mart¨ªn). Anderson publica poco, le cuesta escribir y no es, precisamente, lo que m¨¢s le gusta del mundo. Pero cuando le sale, sus policiales son ¨²nicos. Escritos desde la perspectiva de un polic¨ªa que intent¨® cambiar su peque?a porci¨®n de la realidad y buscar la justicia en el d¨ªa a d¨ªa, El sol verde es un extra?o y poderoso relato de la vida y los anhelos de un agente en Oakland en 1983. Loado por James Ellory o Joseph Wambaugh, Anderson era una joya ausente en el poblado panorama negro espa?ol.
En esta entrevista, habla de sus miedos y esperanzas y de su relaci¨®n con la escritura
?Sabes qui¨¦n es?, Karin Slaughter (Harper Collins, traducci¨®n de Victoria Horrillo). En este caso cuento con la inestimable colaboraci¨®n de Berta Tena que nos dice:? "La escritora estadounidense, consagrada como una de las autoras de thrillers m¨¢s afamadas gracias a sus repetidas apariciones en la lista de best sellers de The New York Times, vuelve con una novela que parte de un tiroteo a manos de un adolescente despechado en un centro comercial de una peque?a y tranquila localidad en el estado de Florida. La protagonista, una treinta?era perdida en la vida que a¨²n vive en casa de sus padres y que tiene un trabajo que detesta, presencia como su madre abate al joven con total sangre fr¨ªa; lo que le hace sospechar, que nada en la vida de su dulce y arquet¨ªpica madre es lo que parece".
Traici¨®n, Walter Mosley (RBA, traducci¨®n de Eduardo Iriarte). Tres virtudes a resaltar de este libro con el que uno de los cl¨¢sicos vivos de la novela negra estadounidense gan¨® el ¨²ltimo Premio RBA de Novela Polic¨ªaca. La primera, es la capacidad de Mosley para retratar a trav¨¦s de sus personajes todas las capas de la sociedad de su pa¨ªs y no olvidarse de denunciar las injusticias sin que por ello sea un panfleto. La segunda es, como siempre en Mosley, sus personajes. No echamos en falta al gran Easy Rawlins porque en esta novela el protagonista es Joe King Oliver, un polic¨ªa ca¨ªdo en desgracia que atesora los pecados y las virtudes de un personaje de altura. O ese Melguart Frost, asesino implacable con el que a veces cuesta no empatizar como ocurr¨ªa con Mouse. Es lo que tiene Mosley. La tercera es que estamos ante un hombre que ama el g¨¦nero y que construye libros polic¨ªacos impecables.
Pueden leer aqu¨ª la entrevista que le hicimos al gran autor estadounidense en Barcelona.
Asesinato en el Parque Sinaloa, Elmer Mendoza (Literatura Random House). La vuelta de un personaje que amamos es siempre una buena noticia. La vuelta de Edgar El Zurdo Mendieta es m¨¢s que eso porque con ¨¦l- ahora en horas bajas- y su inseparable Gris Toledo vuelve tambi¨¦n el m¨¢s certero relato del M¨¦xico actual, carcomido por el poder del narco y la corrupci¨®n generalizada. En este caso el lector adelanta al pobre Zurdo porque en las primeras p¨¢ginas ya sabemos lo que ha pasado, pero el crimen a resolver - anecd¨®tico en la inmensidad de la guerra del narco- es siempre la excusa para desplegar ese lenguaje y esa voz que hacen ¨²nico a Mendoza. Hay acci¨®n, humor, investigaci¨®n y un par de secundarios- incluido un sicario- muy notables. Es quiz¨¢s su novela m¨¢s melanc¨®lica, pero mantiene el nervio, la violencia, la vida. Puro Elmer Mendoza.
Si quieren saber m¨¢s del padre de la narcoliteratura, aqu¨ª tienen la ¨²ltima entrevista que le hizo EL PA?S
La sombra del poder, Ian Rankin (RBA, traducci¨®n de Efr¨¦n del Valle). Qu¨¦ gusto da encerrarse una tarde con un buen policial en las manos. Rebus, nuestro amado John Rebus, siempre ser¨¢ el rey, pero este polic¨ªa de asuntos internos que ha creado Rankin para dar y darse un respiro est¨¢ genial. Me gusta Malcom Fox por su contenci¨®n, su amor por las reglas, su vida anodina, su b¨²squeda de la verdad, su tozudez amable. Ahora me cae bien, cosa que no ocurr¨ªa cuando debut¨® como personaje secundario en Standing in another man?s grave frente a Rebus. El caso que se nos presenta en esta ocasi¨®n, trasciende los Asuntos Internos, divisi¨®n en la que trabaja Fox, y crea una complicada trama con esp¨ªas y ramificaciones pol¨ªticas que funciona muy bien. Larga vida al policial con todas las letras.
Despu¨¦s de la ca¨ªda, Dennis Lehane (Salamandra, traducci¨®n de Victoria Alonso). La habilidad de Lehane para hacer lo que se proponga dentro del g¨¦nero negro y sus amplias fronteras es apabullante. El creador de la pareja Kenzie y Gennaro, la mente que dio Mystic River o Shutter Island y que describi¨® con dureza y melancol¨ªa la vida de los bajos fondos de EE UU en el siglo XX en maravillas como Ese mundo desaparecido nos entrega en esta ocasi¨®n un thriller con protagonista femenina y una pregunta como motor: ?qu¨¦ hacer cuando ya no conf¨ªas en la persona a la que amas? Por ejemplo, pegarle un tiro en el pecho, como pasa en las primeras p¨¢ginas de esta novela llevada con una mano incre¨ªble por Lehane. Porque despu¨¦s de este inicio nos pasamos 100 p¨¢ginas viendo crecer al personaje, llenarse, sufrir. Y cuando crees que ya est¨¢, Lehane suelta la bomba. A la mitad del libro est¨¢ resuelta la trama que se inicia con el disparo de las primeras p¨¢ginas pero da igual, la fiesta sigue. Una vez que las piezas est¨¢n, ya s¨ª, encima de la mesa, se inicia un tobog¨¢n de acci¨®n impecable que nos lleva a un final brutal al estilo de Los Soprano o un cuento de Carver. Podr¨ªa haber sido de otra manera, pero entonces no ser¨ªa Lehane.
Vivir sin permiso, Manuel Rivas (Alfaguara). Algunos conocer¨¢n el t¨ªtulo por la serie de T5. Tanto para quienes la hayan visto como para quienes no aqu¨ª va una recomendaci¨®n: no dejen de leer estos tres relatos impecables sobre el narco, contados con una sencillez, una cercan¨ªa y una prosa dignas de todo elogio. Las ramificaciones que se extienden como un c¨¢ncer por la sociedad de Oeste (sitio que ya se pueden imaginar a qu¨¦ lugar real corresponde) est¨¢n trazadas de manera impecable en el relato que da t¨ªtulo al libro. Una peque?a joya.
Rubem Fonseca, un cl¨¢sico por partida doble
Las editoriales a veces tienen empe?os maravillosos. En Txalaparta quieren que leamos a Rubem Fonseca, cl¨¢sico vivo de las letras en portugu¨¦s, due?o de historias oscuras y turbulentas, hombre que ya ha cruzado la frontera de los 90 a?os en plena forma literaria. En esta ocasi¨®n publican Vastas emociones y pensamientos imperfectos (traducci¨®n de Mario Merlino) en la que mezcla una bailarina muerta, una caja con diamantes y la pasi¨®n por la literatura de Isaac B¨¢bel. No les voy a contar m¨¢s porque aspiro a que se enganchen solos a esta novela escrita a finales del siglo XX. Y, si les gusta, el empe?o de esta editorial incluye tambi¨¦n El gran arte, publicada hace 10 a?os y en la que el gusto del autor por la alta cultura se mezcla con una trama criminal casi perfecta. En su momento RBA tambi¨¦n trat¨® con la publicaci¨®n de Agosto que este autor, distintos y necesario, fuera le¨ªdo en Espa?a. No se lo pierdan.
Cr¨ªmenes dist¨®picos
Materia Oscura, Blake Crough (Nocturna, traducci¨®n de Noem¨ª Risco). Un thriller que a¨²na lo mejor de la ciencia ficci¨®n- g¨¦nero por el que tuve debilidad en otra ¨¦poca- con los viajes en el tiempo y las teor¨ªas multiespacio- debilidad de madurez. No se asusten: todo lo cient¨ªfico est¨¢ integrado en el argumento y explicado de una manera que no hace sino enriquecer la narraci¨®n. Ah¨ª va el argumento: Jason Dessen vive en Chicago, donde ha renunciado a sus grandes aspiraciones cient¨ªficas para dar clases y centrarse en su familia. Una noche, tras asistir a una gala, Jason se dirige a casa¡ y nunca llega. Un hombre oculto tras una m¨¢scara lo conduce a punta de pistola a una central el¨¦ctrica abandonada, donde le inyecta algo. Cuando despierta, empieza una pesadilla. No cuento m¨¢s. El thriller y la lucha de este hombre por recuperar su sitio- donde quiera que est¨¦ y en la dimensi¨®n que sea- est¨¢ contada muy bien y lleva al lector a reflexiones interesantes.
El juego de la memoria, Felicia Yap (Maeva, traducci¨®n de Laura Vidal). Un mundo dist¨®pico en el que solo hay dos clases, Uno y Duo, distinguidos por su capacidad para recordar, poco o muy poco. La pareja protagonista, un escritor de ¨¦xito y una ama de casa que quiso ser escritora, forma un matrimonio mixto muy poco com¨²n en un mundo estrictamente separado en el que recordar puede ser delito o motivo de internamiento en un manicomio. ?C¨®mo se investiga en un mundo as¨ª un asesinato? Un polic¨ªa un tanto peculiar se empe?a en resolver la muerte de una joven que conoci¨®, a fondo, al protagonista en una novela que me deja un buen sabor no tanto en lo literario- normalita- como en lo filos¨®fico.
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