Irak, fisicidad y contexto

A la hora de componer una pel¨ªcula sobre un atentado suicida con protagonismo absoluto del sujeto encargado de cometer la masacre, el creador cinematogr¨¢fico puede elegir fundamentalmente dos posibles vertientes en su aparato narrativo: la f¨ªsica y la mental; la metodol¨®gica y la de los razonamientos; la del presente, y la del pasado que ha llevado hasta ese terrible presente.

Paradise Now, dirigida por el palestino Hany Abu-Assad en 2005, una de las obras m¨¢s importantes de los ¨²ltimos a?os en su acercamiento a la realidad del terrorismo y, sobre todo, de la formaci¨®n del terrorista, ten¨ªa el coraje y el talento de retratar el drama desde ambas vertientes. Sab¨ªa exponer la encrucijada mental (y el impacto f¨ªsico) de los dos j¨®venes reclutados para la inmolaci¨®n, pero tambi¨¦n desarrollaba con verdadera complejidad las justificaciones personales, sociales y religiosas de los fan¨¢ticos.

La decisi¨®n, sexto largometraje del iraqu¨ª Mohamed Al Daradji, prefiere centrarse ¨²nicamente en el primero de los flancos, el del momento del atentado, lo que lleva a la pel¨ªcula a convertirse en un atisbo de experiencia f¨ªsica, pero en la que en todo momento se extra?an datos, relaciones y sensaciones que ayuden a entender al espectador: tanto en lo referente a la mujer protagonista, con un cintur¨®n bomba atado a su cintura en la estaci¨®n central de trenes de Bagdad, como en lo que ata?e a la situaci¨®n social que la rodea.

Ambientada en diciembre de 2006, poco m¨¢s de tres a?os despu¨¦s de la invasi¨®n de Irak por parte de Estados Unidos y sus pa¨ªses aliados, La decisi¨®n centra su objetivo en la mirada de la mujer, y ah¨ª el impactante rostro cargado de matices de Zahraa Ghandour se convierte en su principal virtud. Sin embargo, la pel¨ªcula resulta m¨¢s indolente de lo que debiera; en parte por las limitaciones de su puesta en escena, pero tambi¨¦n por su falta de ambici¨®n. A Al Daradji, nacido en Bagdad en 1978 y formado cinematogr¨¢ficamente en Reino Unido, hay que valorarle el ¨ªmpetu por regresar a su pa¨ªs e ir forjando una carrera con producciones locales, y adem¨¢s centradas en la tragedia contempor¨¢nea de su tierra: Ahlam, Son of Babylon, In my Mother¡¯s Arms, In the Sands of Babylon. Pero La decisi¨®n, mejor cuanto m¨¢s delicada con esas notas de clarinete de fondo, queda como un esfuerzo un tanto alicorto.

La presencia del beb¨¦ como elemento desestabilizador, incluso en su llanto, y sus puntuales im¨¢genes de impacto no son suficientes para sostener un guion esquel¨¦tico al que le faltan toneladas de contexto.