Mia Hansen-L?ve y las renuncias de la vida

En Maya, Mia Hansen-L?ve (Par¨ªs, 38 a?os) sigue a lo suyo. Y como cineasta lo suyo est¨¢ bien claro: indagar en la psique humana, sea quien sea su objeto de estudio. Ya lo hizo, y con gran m¨¦rito, en Tout est pardonn¨¦ (2007), El padre de mis hijos (2009), Un amor de juventud (2011), Eden (2014) y El porvenir (2016). Puede que Maya no est¨¦ a la altura de este curr¨ªculo, pero la cineasta francesa -que ya est¨¢ en mitad de su siguiente proyecto- sabe husmear en el alma de sus personajes para hablar de lo divino (los sentimientos) y lo humano (los sentidos). En Maya -estrenada en Espa?a- el protagonista, un corresponsal de guerra en reconstrucci¨®n emocional, descubre en la India una reparaci¨®n a sus m¨²ltiples dolores.

Pregunta. En sus pel¨ªculas los protagonistas tienden a sufrir una amargura existencial por lo que est¨¢n (o no) haciendo. ?Tanto lo atraen esos personajes?

Respuesta. No entrar¨ªa en la amargura, sino que lo llamar¨ªa melancol¨ªa.

P. Puede que en tono, pero en los personajes no puede negar la amargura...

R. De acuerdo, pero ese sentimiento, llam¨¦mosle como le llamemos, nace de la renuncia. En Eden Paul renuncia a la m¨²sica. En El porvenir Nathalie renuncia al amor f¨ªsico. Y Gabriel, el protagonista de mi ¨²ltima pel¨ªcula, renuncia a Maya. Pero esas renuncias les llevan a otras cosas. Si Paul no dejara la m¨²sica, no escribir¨ªa. Lo resumir¨ªa como una b¨²squeda. Y si buscas, renuncias, lo que hace que duela lo que dejas atr¨¢s.

P. Siempre dejan un aroma agridulce.

R. Me gusta la ambivalencia. A veces me lo pregunta el p¨²blico. Bueno, en el cine actual casi todo es plano, con personajes que van de forma directa a un objetivo concreto. Un ejemplo: un tipo me ha violado, voy a matarle. Eso no es mi cine. Mis personajes no est¨¢n tan definidos ni sus caminos tan trazados.

P. Esa ambivalencia ?nace de que le interesa como creadora o porque es as¨ª en la vida real? ?O las dos cosas?

R. No soy capaz racionalmente de analizarme. Escribo de manera intuitiva. Jam¨¢s planeo, me dejo llevar. Despu¨¦s medito sobre lo redactado. Empec¨¦ muy pronto, escrib¨ª mi primer guion a los 23 a?os. Literalmente pas¨¦ de ser estudiante a dirigir. Sent¨ª que renunci¨¦ a parte de mi juventud, me plante¨¦ preguntas m¨¢s profundas y que llegaban m¨¢s lejos que las de un estudiante de 23 a?os. Esa renuncia fue consciente porque quer¨ªa entrar en la creatividad, que es lo que me interesa. Y eso se ve en mi cine. Con eso no quiero decir que un cineasta no puede salir de fiesta [risas], aunque no fue mi caso. Lo viv¨ª como meterme en un convento. Descend¨ª al ascetismo.

P. ?Y c¨®mo lleva hoy la renuncia? Cuando uno trabaja no es progenitor y viceversa. Usted es madre, ?logra compatibilizarlo con el cine?

R. Efectivamente... Espera, no usar¨ªa la palabra renuncia, y s¨ª dolor. Hay un sufrimiento. Porque buscas un equilibrio imperfecto. Como madre siempre te remuerde la culpabilidad. Llevo dos a?os compatibilizando dos pel¨ªculas, rodando entre la India y la isla sueca de Faro, as¨ª que imag¨ªnate.

P. En Maya su protagonista dice prefiere la acci¨®n y no la palabra, y en la India se pasa todo el rato hablando.

R. No estoy de acuerdo. Puede que al principio de su recorrido en la India no act¨²e, porque se sumerge en un largo rodeo... para al final volver a la acci¨®n. Y cuando habla, no habla de ¨¦l. Sobre todo escucha. Y si te fijas, en mi cine se habla poco. Cada vez menos.

P. En la fotograf¨ªa ha contado con una grande, H¨¦l¨¨ne Louvart.

R. Es formidable. Es la Isabelle Huppert de los directores de fotograf¨ªa. No es que me ayudara, es que literalmente me llev¨®. Tiene una energ¨ªa descomunal en su trabajo y cuidando de sus hijos, y son cinco. Yo enferm¨¦ en la India, y ella me impuls¨®. Me convenci¨® de que no renunciara a lo que quer¨ªa a pesar del presupuesto tan bajo que pose¨ªamos.

P. ?C¨®mo va Bergman Island? ?Y cu¨¢nto ha influido en su cine Ingmar Bergman?

R. Es una larga historia. Para m¨ª, esta pel¨ªcula es el logro de mi carrera. Bergman es el cineasta fundamental, y mi pel¨ªcula va sobre dos cineastas que viajan a Faro porque van a escribir una pel¨ªcula sobre Bergman. No solo hablo de la pareja, sino del cine. Y por eso creo que desde los 23 a?os he estado viajando hacia a ese punto. Me falta por rodar la segunda parte este verano. Veremos qu¨¦ sale.