¡°Notre Dame sigue viva¡±
La catedral de Par¨ªs celebra su primera misa tras el devastador incendio
La catedral de Notre Dame celebr¨® este s¨¢bado su primera misa tras el devastador incendio que, hace justo dos meses, destruy¨® buena parte de su estructura. En medio de fuertes medidas de seguridad ¡ªcomo el uso imperativo de casco de obra¡ª, una treintena de personas, en su mayor¨ªa sacerdotes, pero tambi¨¦n voluntarios, operarios de las obras de recuperaci¨®n del templo g¨®tico y algunas personas en situaci¨®n de vulnerabilidad invitadas por la di¨®cesis de Par¨ªs participaron en la ceremonia religiosa, celebrada en una capilla lateral en el fondo de la nave de la catedral que no fue da?ada por el fuego. Se trata de la capilla que albergaba la corona de espinas, una de las reliquias que guardaba Notre Dame y que tambi¨¦n pudo salvarse del fuego que el 15 de abril provoc¨® el desplome de la cubierta de la catedral y la desaparici¨®n de la aguja.
¡°La catedral sigue viva, porque celebramos la eucarist¨ªa¡±, proclam¨® el arzobispo de Par¨ªs, Michel Aupetit, al iniciar la ceremonia. Aupetit, al igual que el resto de religiosos y participantes, port¨® durante toda la misa, de casi una hora, un casco blanco que solo se quit¨® para dar la comuni¨®n. Un recordatorio de que el emblem¨¢tico templo g¨®tico en pleno coraz¨®n de Par¨ªs sigue en un estado extremadamente ¡°fr¨¢gil¡±, como advirti¨® la v¨ªspera el ministro de Cultura, Franck Riester. Una situaci¨®n que confirmaron las im¨¢genes del templo de la cadena cat¨®lica elegida para retransmitir la misa en directo, con redes atravesando la nave para frenar la ca¨ªda de cascotes sobre un suelo donde todav¨ªa se amontonan escombros, as¨ª como grandes partes de la b¨®veda destruidas, cubiertas desde el tejado por dos grandes pl¨¢sticos que impiden temporalmente la entrada de lluvia.
Aun as¨ª, para las decenas de fieles que, entremezclados con los centenares de turistas habituales del centro de Par¨ªs, se acercaron hasta la catedral ¡ªrodeada de vallas y con su plaza ante la fachada a¨²n cerrada al p¨²blico porque no se ha podido eliminar todav¨ªa todo el plomo dispersado cuando se derrumb¨® el tejado del templo, el 15 de abril¡ª la misa era una ¡°se?al positiva¡±.
¡°Es un s¨ªmbolo de alegr¨ªa, porque desde el incendio, la catedral era como una pantalla vac¨ªa, y hoy ya no est¨¢ vac¨ªa, porque al menos, por una hora, hay gente dentro rezando, que para eso fue construida¡±, explicaba Bruno, un residente de Dunkeerke que se encontraba en Par¨ªs por motivos de trabajo y quiso acerarse hasta Notre Dame antes de coger su tren de vuelta. Situado cerca de la ¡°puerta roja¡±, una entrada lateral de la Edad Media elegida para que ingresaran los participantes en la misa porque no result¨® da?ada y era la m¨¢s pr¨®xima a la capilla donde se celebr¨® la ceremonia, Bruno y otros fieles segu¨ªan la misa a trav¨¦s de sus tel¨¦fonos m¨®viles y rezaban y cantaban al mismo tiempo que los que se encontraban en el interior del templo, al otro lado de los muros de Notre Dame.
¡°Esta tarde se da una se?al de esperanza muy fuerte, es un nuevo comienzo para Notre Dame¡±, coincid¨ªa el p¨¢rroco Olivier de Cagny, que oficia en las inmediaciones de la catedral y que tampoco quiso perderse, aunque no pudiera entrar en la iglesia, la primera misa desde el incendio, celebrada coincidiendo con la fiesta de la dedicaci¨®n ¡ªla consagraci¨®n del altar¡ª, que en las ¨²ltimas d¨¦cadas Notre Dame ha celebrado siempre el 16 de junio.
El arzobispo de Par¨ªs aprovech¨® la homil¨ªa para reivindicar Notre Dame, ante todo, como ¡°un lugar de culto¡±. ¡°Esa es su finalidad propia y ¨²nica (¡) Este bien cultural, esta riqueza espiritual no puede ser reducida a un bien patrimonial¡±, sostuvo. Posteriormente, en declaraciones a la prensa, Aupetit destac¨®?la ¡°emoci¨®n¡± de haber podido volver a oficiar en la catedral y lo calific¨® de un ¡°momento de esperanza¡± para todos los creyente que conf¨ªan en que la catedral ¡°volver¨¢¡±. Eso s¨ª, reconoci¨®, no hay por el momento fecha para una nueva misa en Notre Dame.
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