Muere Arturo Fern¨¢ndez, gal¨¢n eterno del teatro, a los 90 a?os

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Arturo Fern¨¢ndez (Gij¨®n, 1929), el gal¨¢n eterno del mundo del teatro, ha muerto en la madrugada de este jueves a los 90 a?os, seg¨²n ha confirmado su mujer al diario La Nueva Espa?a. La dilatad¨ªsima carrera profesional del actor se interrumpi¨® el pasado 2 de abril, cuando suspendi¨® las representaciones de Alta seducci¨®n, comedia con la que realizaba una gira por Espa?a. Fern¨¢ndez fue operado en un hospital madrile?o de una dolencia estomacal de la que no se pudo recuperar. Despu¨¦s del ¡°?saben aquel que diu¡­¡± de Eugenio en los a?os ochenta y el ¡°pecadoorrr¡± de Chiquito de la Calzada revelado en Genio y figura en Antena 3 en 1994, miles de espa?oles incluyeron en sus conversaciones el ¡°?chatina!¡± de Arturo Fern¨¢ndez desde 1996. Pocos actores, gusten m¨¢s o menos, pueden presumir de haberse introducido con sus locuciones en las charlas de la ciudadan¨ªa.

De hasta qu¨¦ punto estaba Fern¨¢ndez incrustado en el imaginario popular dan cuenta la enorme diversidad de voces que han lamentado su muerte: desde el dramaturgo Albert Boadella, el escritor Arturo P¨¦rez-Reverte y los actores Mar¨ªa Luis Merlo?y Josema Yuste, hasta los l¨ªderes de los grandes partidos: Pedro S¨¢nchez (PSOE), Pablo Casado (PP) y Albert Rivera (Cs). Mientras el ministro Cultura, Jos¨¦ Guirao (PSOE) ha destacado su figura como ¡°s¨ªmbolo de toda una ¨¦poca¡±, el Ayuntamiento de Gij¨®n (PSOE) ha decretado tres d¨ªas de luto y el de Madrid (PP y Cs) ha propuesto que una calle de la capital lleve su nombre.

Mensajes de cari?o generalizados, en fin, para un hombre al que muchos recordar¨¢n por su af¨¢n de ofrecer titulares defendiendo a toda costa sus opiniones pol¨ªticas conservadoras: en 2012 arremeti¨® con exabruptos contra quienes se movilizaban en contra de la pol¨ªtica del Gobierno que presid¨ªa Mariano Rajoy y, m¨¢s recientemente, anunci¨® su negativa a llevar Alta seducci¨®n a C¨¢diz por ser una ciudad gobernada por Podemos.

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El l¨ªder de esta formaci¨®n, Pablo Iglesias, tambi¨¦n ha recordado a Fern¨¢ndez en un tuit en el que rememora el d¨ªa en que, siendo un adolescente, coincidi¨® con ¨¦l cuando hizo de extra en la serie La casa de los l¨ªos: ¡°Fue amable y muy majo con nosotros que est¨¢bamos all¨ª por 5.000 pelas. Abrazo a la familia y amigos. Descanse en paz¡±, ha escrito Iglesias en las redes sociales.

Como actor, Arturo Fern¨¢ndez hab¨ªa quedado devorado desde hace muchos a?os por un ¨²nico personaje en las tablas: el de eterno gal¨¢n, seductor, elegante y divertido. Sin embargo, su carrera?va mucho m¨¢s all¨¢. Y mucho m¨¢s all¨¢ de un ¡°?chatina!¡±. Antes de convertirse en una figura popular¨ªsima del teatro y la televisi¨®n, particip¨® en m¨¢s de 70 pel¨ªculas desde su debut a los 24 a?os, sin acreditar, en El beso de Judas (1954), de Rafael Gil, con quien trabajar¨ªa en otros seis filmes m¨¢s.

El actor se convirti¨® muy pronto en una presencia constante en el cine espa?ol: solo en la d¨¦cada de los sesenta interpret¨® 30 pel¨ªculas, algunas de ellas convertidas en ¨¦xitos tan potentes como Mar¨ªa, matr¨ªcula de Bilbao (1960), El ¨²ltimo verano (1962), Escala en Hi-Fi (1963), Currito de la Cruz (1965), Camino del Roc¨ªo (1966), estas dos ¨²ltimas tambi¨¦n a las ¨®rdenes de Gil, y No desear¨¢s la mujer de tu pr¨®jimo (1968), una de las nueve pel¨ªculas en las que fue dirigido por Pedro Lazaga.

Pero los m¨¢s j¨®venes quiz¨¢ no sepan que Arturo Fern¨¢ndez no solo fue un actor de comedia. Es m¨¢s, en su momento se revel¨® como un s¨®lido int¨¦rprete dram¨¢tico y, entre finales de los a?os cincuenta y la mitad de los sesenta, particip¨® en m¨¢s de 10 pel¨ªculas de g¨¦nero negro, en la mayor¨ªa de ellas dirigido por Julio Coll, responsable del auge en Barcelona de este g¨¦nero. Obras como Distrito quinto (1958) y Un vaso de whisky (1959) revelaban a un actor m¨¢s que solvente, aunque no fuera poseedor de un amplio registro.

D¨¦cadas m¨¢s tarde, regresar¨ªa al cine negro de la mano de Jos¨¦ Luis Garci en El crack II (1983). Ese mismo a?o filmaba Truhanes, en compa?¨ªa de Paco Rabal. A buen seguro que poco imaginaba que esa pel¨ªcula le har¨ªa vivir uno de sus ¨¦xitos m¨¢s sonados, puesto que diez a?os despu¨¦s se convertir¨ªa en una serie que le supondr¨ªa uno de sus m¨¢s atronadores triunfos televisivos. Telecinco estren¨® Truhanes en 1993 y la emiti¨® hasta el a?o siguiente. Arturo Fern¨¢ndez, aunque ya era un ¨ªdolo en el teatro, entr¨® en las casas de los espa?oles para quedarse, porque en 1996 lleg¨® su culminaci¨®n televisiva con La casa de los l¨ªos, serie de arrolladora aceptaci¨®n popular que Antena 3 emiti¨® durante cuatro a?os, entre 1996 y 2000, y que logr¨® mantener una media de seis millones de espectadores, algo que hoy resulta por completo impensable.

Su trabajo le hizo obtener dos TP de Oro y un Premio Iris, que entrega la Academia de las Ciencias y las Artes de Televisi¨®n de Espa?a. Fue ah¨ª donde Arturo Fern¨¢ndez consigui¨® incorporar el ¡°?chatina!¡± y el ¡°?la leche!¡± al vocabulario de los espa?oles y tambi¨¦n donde se encasill¨® definitivamente en su papel de maduro vividor, de modos exquisitos y seductor innato, lo que le llevar¨ªa m¨¢s adelante a una suerte de autoparodia actoral en la que siempre pareci¨® moverse a gusto. Fueron a?os de gloria en los que el actor logr¨® que el p¨²blico afirmase algo que est¨¢ al alcance de pocos: ¡°Voy a ver una serie o una obra de Arturo Fern¨¢ndez¡±.

Su ¨²ltimo trabajo para la televisi¨®n ser¨ªa la abortada serie Como el perro y el gato en TVE, en la que interpretaba el doble papel de dos hermanos gemelos, que fue cancelada tras la emisi¨®n de solo cuatro episodios. Desencantado con el medio y tambi¨¦n con el cine (solo rod¨® seis pel¨ªculas entre Truhanes, en 1983, y su despedida en 1995 con Desde que amanece apetece), Fern¨¢ndez ¨²nicamente pis¨® desde entonces las tablas del teatro, en una repetitiva espiral que lo llev¨® a interpretar definitivamente a un ¨²nico personaje protot¨ªpico. As¨ª, en parte por sus propias decisiones y en parte por un cierto desprecio del cine espa?ol, un actor solvente qued¨® relegado de las pantallas.

Sus galardones son interminables: hijo predilecto de su Gij¨®n natal e hijo adoptivo de Oviedo,?consigui¨®, entre otros, el Premio del Sindicato del Espect¨¢culo al mejor actor en 1961 y 1968, la Medalla del C¨ªrculo de Escritores Cinematogr¨¢ficos al mejor actor por Truhanes en 1983 y la Medalla de Honor en 2015, la Medalla del Ministerio de Cultura al M¨¦rito en Bellas Artes en 2004... Un actor de probada profesionalidad que, en las ¨²ltimas d¨¦cadas, qued¨® atrincherado en la comodidad de una convenci¨®n interpretativa en el ¨¢mbito profesional y en un tenaz posicionamiento pol¨ªtico en la vida p¨²blica.