Germ¨¢n Vald¨¦s, ¡®Tin Tan¡¯, el vers¨¢til c¨®mico que hizo c¨¦lebre al personaje del pachuco
El artista mexicano interpret¨® m¨¢s de un centenar de pel¨ªculas de la ¨¦poca dorada del cine que suponen la mejor radiograf¨ªa de la cultura en la frontera m¨¦xico-estadounidense
En Ciudad de M¨¦xico hay una estatua de casi cuatro metros de alto que inmortaliza la esencia de "Tin Tan", uno de los muchos apodos con el que se conoci¨® a Germ¨¢n Vald¨¦s, un vers¨¢til c¨®mico que cantaba, actuaba y hasta doblaba pel¨ªculas. Le daba igual cine que teatro o radio, porque supo encarnar como nadie el esp¨ªritu de los pachucos, personajes parranderos, vagos y mujeriegos pero que supo reconvertir en alegres, bondadosos y simp¨¢ticos.
Su atuendo t¨ªpico era un pantal¨®n holgado, aunque ce?ido en la cintura y en los tobillos, camisa de cuello grande, corbata mal anudada, gabardina, sombrero italiano con una pluma y zapatos bicolor se convirti¨® en su mejor se?a de identidad y en un homenaje a los aut¨¦nticos pachucos, como eran llamados los p¨ªcaros pandilleros que deambulaban por las noches de Los ?ngeles (California) en los a?os 30 y 40 del siglo XX.
Germ¨¢n Genaro Cipriano G¨®mez Vald¨¦s Castillo, que as¨ª era su largo nombre, naci¨® el 19 de septiembre de 1915, en la Ciudad de M¨¦xico. Su padre trabajaba en la aduana y fue trasladado al puerto de Veracruz primero, y despu¨¦s a Ciudad Ju¨¢rez cuando el futuro "Tin Tan"?era adolescente. Tuvo ocho hermanos, entre ellos tres que tambi¨¦n se dedicaron a la interpretaci¨®n: Ram¨®n Vald¨¦s, conocido por interpretar a don Ram¨®n en el programa El Chavo del Ocho, Antonio Vald¨¦s Castillo, tambi¨¦n c¨®mico del programa Puro Loco, y Manuel "El Loco" Vald¨¦s.
La vida de Vald¨¦s como pachuco comenz¨® en la estaci¨®n de radio La XEJ de Ciudad Ju¨¢rez a los 19 a?os. Un d¨ªa, mientras arreglaba los cables, el joven, bromeando y pensando que nadie estaba escuch¨¢ndolo, imit¨® al cantante mexicano de boleros Agust¨ªn Lara. Este gesto inocente impresion¨® a su jefe y fue el trampol¨ªn en la entrada de Vald¨¦s en las ondas con el personaje de Topillo Tapas. Y en el programa de radio diario titulado El Barco de la ilusi¨®n, Germ¨¢n cant¨® e hizo imitaciones mezclando ingl¨¦s y espa?ol, el famoso spanglish.
Pachuco y pachuca es un t¨¦rmino coloquial que hace referencia a los j¨®venes de origen mexicano, de clase social baja, que viv¨ªan en las ciudades del sur de Estados Unidos en la d¨¦cada los 50 y que se caracterizaban por defender su identidad como grupo social frente a las costumbres estadounidenses. Ten¨ªan una forma caracter¨ªstica de vestir y tambi¨¦n de actuar como pandilleros y granujas.
En julio de 1943, la Compa?¨ªa Paco Miller, un grupo de vodevil compuesto sobre todo por artistas mexicanos, invit¨® a Vald¨¦s a unirse a ellos en su gira por California y M¨¦xico. Vald¨¦s continu¨® desempe?ando el papel de un pachuco, ahora acompa?ado por su carnal (hermano de otra madre) Marcelo Ch¨¢vez. Cuando el grupo lleg¨® a la Ciudad de M¨¦xico, Paco Miller decidi¨® cambiar el nombre art¨ªstico de Vald¨¦s. Miller tom¨® prestado el nombre "Tin Tan" de Juan Mu?oz Leyva, una estrella de radio chilena, conocida como "El ni?o de tin tan" porque conclu¨ªa sus mon¨®logos usando un vaso lleno de agua para producir el sonido "tin tan". Con este nuevo nombre art¨ªstico, tom¨® casi por asalto la Ciudad de M¨¦xico.
Al poco tiempo, Germ¨¢n Vald¨¦s fue contratado para trabajar en la estaci¨®n de radio XEW, el hogar de las celebridades m¨¢s importantes de M¨¦xico y que jug¨® un papel destacado en el lanzamiento al estrellato de muchos de los actores m¨¢s famosos del pa¨ªs azteca.
A los dos a?os en la capital del pa¨ªs "Tin Tan" ya consigui¨® el papel principal en la pel¨ªcula El hijo desobediente?(1945). El largometraje comparte muchas de las t¨¦cnicas y estrategias cinematogr¨¢ficas de la ¨¦poca, con una historia de amor y un caso de identidad confusa. El uso coloquial del lenguaje, lleno de humor, permite al protagonista burlarse siempre de sus enemigos. Sin embargo, El hijo desobediente?es distinto en el uso del pachuco en la imitaci¨®n de cantantes.
En el fondo, "Tin Tan" resultaba similar a muchos actores de cine de mediados del siglo XX, pero su sensibilidad lo diferenci¨® hasta el punto de que muchos hombres imitaron su forma de hablar y de vestir, vi¨¦ndose en muchos salones de baile de la ¨¦poca el estilo de sus trajes y sus zapatos de dos tonos estilo pachuco, se?alando todos a Germ¨¢n Vald¨¦s como el art¨ªfice de esta moda.
La transformaci¨®n de Vald¨¦s en el icono mexicano "Tin Tan" es el resultado del contexto cultural, social e hist¨®rico que se entrecruza a lo largo de la frontera entre Estados Unidos y M¨¦xico, que dio lugar a la generaci¨®n mexicoamericana. Germ¨¢n hizo la transici¨®n del teatro popular al cine, cant¨® canciones cl¨¢sicas mexicanas, us¨® el lenguaje de manera creativa para burlar a sus enemigos y se benefici¨® de una creciente y s¨®lida industria de la radio y el cine mexicano.
Sus ¨¦xitos llamaron continuamente la atenci¨®n de los productores cinematogr¨¢ficos, y la consagraci¨®n definitiva lleg¨® al comenzar a trabajar con el director Gilberto Mart¨ªnez Solares, convirti¨¦ndose junto a Cantinflas en el c¨®mico m¨¢s cotizado del pa¨ªs. Hac¨ªa siempre equipo inseparable con comediantes de gran calidad, y entre sus escenas m¨¢s memorables est¨¢n las protagonizadas junto a Pedro Infante en la pel¨ªcula ¡®Tambi¨¦n de dolor se canta¡¯, considerada un cl¨¢sico del cine mexicano.
Asimismo, es memorable la versi¨®n cinematogr¨¢fica de la novela de Jos¨¦ Rub¨¦n Romero La vida in¨²til de Pito P¨¦rez, junto a Andr¨¦s Soler, Anabel Guti¨¦rrez y Eduardo Alcaraz, llevada a la pantalla con el t¨ªtulo de Las aventuras de Pito P¨¦rez.
En la d¨¦cada de los 70 el consagrado Tin Tan comenz¨® a sacrificar la calidad por la cantidad, y sus actuaciones perdieron la frescura y la magia de sus inicios, llev¨¢ndolo a caer cada vez m¨¢s en papeles secundarios de pel¨ªculas de poca trascendencia. Sin embargo, en esos momentos se reinvent¨® a s¨ª mismo y destac¨® como doblador de cine con el oso Baloo en El libro de la selva, o el gato ¡®O¡¯Malley¡¯ en Los Aristogatos.
A lo largo de su larga vida sobre los escenarios sus apodos fueron variados: El Pachuco de M¨¦xico, El Rey del Barrio, el Trompudo y La chiva, que fue con el que se dio a conocer con su primer cortometraje independiente llamado: El que la traga, la paga. En otra de sus facetas, la m¨²sica, su grabaci¨®n m¨¢s famosa fue la canci¨®n Bonita, de Luis Alcaraz, quien alguna vez declar¨® que la mejor interpretaci¨®n de su obra se la deb¨ªa al c¨®mico pachuco.
Una de sus caracter¨ªsticas principales y m¨¢s elogiadas fue su capacidad para fusionar g¨¦neros musicales y su habilidad para hacer improvisaci¨®n, estilo que import¨® del jazz estadounidense y que aderez¨® con su particular modo para interpretar piezas de swing y boogie boogie en varias de sus primeras pel¨ªculas y logrando rasgos que a?os m¨¢s tarde explotar¨ªa el rock and roll nacional.
Despu¨¦s, grupos de rock latino se inspiraron en ¨¦l para algunas de sus creaciones, como Maldita Vecindad, Los Nelzon y Pante¨®n Rococ¨®, entre otros. En 2010 se realiz¨® el largometraje documental "Tin Tan", producido por su hija, la tambi¨¦n cantante Rosal¨ªa Vald¨¦s, y dirigido por Francesco Taboada Tabone, en el que sus antiguos compa?eros de escena le hacen un homenaje.
En los ¨²ltimos a?os de su vida Germ¨¢n Vald¨¦s padeci¨® una hepatitis que le ocasion¨® posteriormente cirrosis hep¨¢tica, y que junto a un c¨¢ncer de p¨¢ncreas causaron su fallecimiento el 29 de junio de 1973 en la Ciudad de M¨¦xico, a los 57 a?os. A pesar de su fama, al morir no dej¨® fortuna alguna, y en su testamento todo lo dejaba para que su esposa Rosal¨ªa y sus hijos Rosal¨ªa y Carlos, que en ese entonces eran menores de edad, pudieran salir adelante.
M¨¢s de un centenar de pel¨ªculas en la ¨¦poca del cine de oro mexicano mantienen vivo su legado junto a memorables actuaciones en radio y teatro de quien perpetu¨® el personaje del pachuco para adaptarlo a la simpat¨ªa mexicana con todo tipo de oficios y alej¨¢ndolo de la imagen americana donde naci¨®.
Babelia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.