Los ¨²ltimos d¨ªas de la clase obrera
Los hijos de la crisis dan un nuevo impulso a la literatura social. Los paisajes de minas y f¨¢bricas cerradas protagonizan novelas y ensayos que narran la desesperanza de los trabajadores
Con la cabeza inclinada y los brazos abiertos, una virgen de 10 metros, que mand¨® construir en un siglo ya lejano una familia de ricos industriales, parece velar sobre un valle industrial que en otro tiempo fue pr¨®spero. Aunque, en vista del actual estado de este rinc¨®n de la Lorena francesa, sometido a un feroz proceso de decadencia, ese monstruo de piedra parezca m¨¢s impotente que benefactor. Los lugare?os juran que algunas noches la oyen pronunciar, resignada: ¡°?Y qu¨¦ quer¨¦is que haga yo por vosotros?¡±. Al pie de la monta?a, impregnada de una gama de verdes luminosos e improbables, yacen los f¨®siles de la industria que, hasta no hace tanto, daba de comer a toda la regi¨®n: varias decenas de hornos sider¨²rgicos extinguidos, en los que trabajaron miles de obreros que hoy deambulan por las calles como muertos vivientes.
La novela que marc¨® la temporada pasada en Francia fue escrita observando estos paisajes. Las frases de Sus hijos despu¨¦s de ellos (AdN), ganadora del ¨²ltimo premio Goncourt, brotaron en barras de bares en los que el escritor Nicolas Mathieu empin¨® el codo y tendi¨® la oreja. Si cambi¨® los nombres de estos lugares en su libro ¡ªHayange por Heillange; Fensch por Henne¡ª fue para poder tomarse alguna que otra licencia po¨¦tica. Sus protagonistas son tres adolescentes de los noventa, futuras v¨ªctimas de la globalizaci¨®n a los que, como admite el autor, hoy no sorprender¨ªa ver luciendo un chaleco amarillo en alguna rotonda.
El libro transcurre en este enclave, pero podr¨ªa hacerlo en las minas inglesas o el Rust Belt estadounidense. En las f¨¢bricas metal¨²rgicas pegadas a la frontera alemana, o en alguna rec¨®ndita comarca leonesa o asturiana. El fen¨®meno procede, pese a todo, de Francia, donde la literatura centrada en la l¨²gubre epopeya de la clase obrera en el siglo XXI se ha convertido en un poderoso nicho editorial. Otros dos t¨ªtulos que llegan este mes a las librer¨ªas espa?olas junto con el de Mathieu dan fe de ello: Qui¨¦n mat¨® a mi padre (Salamandra), nueva entrega de una estrella como ?douard Louis, y El d¨ªa antes (Reservoir Books), cr¨®nica de un tr¨¢gico accidente minero en el norte franc¨¦s a cargo del escritor y periodista Sorj Chalandon.
Louis, fen¨®meno internacional de las letras francesas desde que public¨® Para acabar con Eddy Bellegueule en 2014, recuerda que la historia del proletariado tambi¨¦n es una historia de extremidades agotadas, espinas dorsales rendidas y sonrisas sin ortodoncia. Y, sobre todo, de esperanzas de vida truncadas por la dureza del trabajo. Su libro, pensado originalmente como un texto teatral, aspira a explicar c¨®mo las pol¨ªticas econ¨®micas de las ¨²ltimas d¨¦cadas destruyeron el cuerpo de su progenitor, obrero en una f¨¢brica de Picard¨ªa que, tras una prolongada baja por invalidez, fue obligado a barrer las calles tras un cambio en las pol¨ªticas de desempleo. ¡°Hoy no puede respirar sin ayuda de una m¨¢quina. Ha perdido el control de su cuerpo y la posibilidad de tener una vida digna, de experimentar la alegr¨ªa o el deseo¡±, relata Louis. ¡°Las decisiones pol¨ªticas han transformado su vida. Es como una tragedia griega: Sarkozy o Macron han asesinado a mi padre, igual que Cre¨®n mat¨® a Ant¨ªgona¡±.
Pasada la moda del nouveau roman, tan marcada por su obsesi¨®n formalista, y el largo auge de la autoficci¨®n, con la introspecci¨®n narcisista como ¨²nica ambici¨®n, la literatura francesa regresa a las vidas de los perif¨¦ricos y los invisibles. Los conflictos de clase han vuelto a la producci¨®n actual, te?ida de un potente rebrote de neomarxismo. Lo demuestran autores como Olivier Adam, ?lisabeth Filhol o Arno Bertina, quien novel¨® en Des ch?teaux qui br?lent, in¨¦dita en castellano, el secuestro de un secretario de Estado a cargo de los trabajadores de un matadero en quiebra. ¡°Hace 40 a?os que nos dicen que no hay alternativa al modelo impuesto por el neoliberalismo. Nos cuentan que no es imposible imaginar un mundo distinto. Para un escritor, no existe una mayor provocaci¨®n que esa¡±, ironiza Bertina.
Con menor intensidad, el fen¨®meno se reproduce tambi¨¦n en otras literaturas. En Estados Unidos no faltan ejemplos recientes, como La fiebre del carb¨®n (Siruela), de Tawni O¡¯Dell, sobre el ocaso de la miner¨ªa en Pensilvania, o El valle del ¨®xido (Random House), de Philipp Meyer, con el declive de la metalurgia como tel¨®n de fondo. La reinvenci¨®n permanente que pregona el mito fundacional del pa¨ªs se da de bruces con una nueva realidad, en la que las fuentes de riqueza se extinguen para una parte considerable de la poblaci¨®n y los asalariados se quedan sin trabajo y descubren un ins¨®lito sentimiento de inutilidad. En el Reino Unido, los h¨¦roes de clase trabajadora que abundaron en las obras de j¨®venes airados como John Osborne o Alan Sillitoe han desaparecido del mapa. Pero hoy triunfan los ensayos sobre la desigualdad, como demuestran autores como Owen Jones (El establishment, enf¨¢tico llamamiento a acabar con la denominada casta), Kerry Hudson (el in¨¦dito Lowborn, sobre la infancia de la autora en una Inglaterra paup¨¦rrima) o Selina Todd, profesora de Historia Moderna en Oxford y autora de El pueblo. Auge y declive de la clase obrera (Akal), publicado en castellano el a?o pasado. ¡°El ¨¦xito de los libros de no ficci¨®n sobre la desigualdad se hizo evidente hacia 2010. La crisis hizo que se reconsiderara el neoliberalismo en el que hab¨ªamos convivido desde 1979¡±, afirma la historiadora. Ese boom del ensayo militante se intensific¨® tras la elecci¨®n de Jeremy Corbyn como l¨ªder laborista y el refer¨¦ndum del Brexit. ¡°De repente, la mayor¨ªa de la poblaci¨®n se sinti¨® vulnerable. La clase obrera dej¨® de parecer un grupo social tan peque?o¡±, concluye Todd.
La literatura espa?ola parece haber pasado de puntillas sobre asuntos como el cierre de las minas o la reconversi¨®n industrial, que ha tratado de manera tangencial. Para la escritora Marta Sanz, que abord¨® los riesgos de pauperizaci¨®n de las clases medias en Animales dom¨¦sticos, una propuesta literaria ex¨®tica en un momento en que todo era sofisticaci¨®n cosmopolita y secuelas de la iron¨ªa posmoderna, la cuesti¨®n viene de lejos. ¡°El borrado de la clase obrera en las narraciones del siglo XX proviene de la demonizaci¨®n, por parte de cierto sector de la ¨¦lite literaria, del realismo social o socialista, asociados a una supuesta pesantez del marxismo y a la idea de que lo pol¨ªtico mancha una literatura de arc¨¢ngeles¡±, sostiene Sanz. Las obras inscritas en ese modelo fueron tratadas, en consecuencia, como burdos panfletos.
Sin embargo, ante la toma de conciencia sobre la pervivencia de la clase social como un vector de desigualdad imbatible, que se refleja en el reciente repunte de algunas opciones pol¨ªticas, sorprende que siga sin haber ning¨²n ?douard Louis en la literatura actual. ¡°Persiste esa convicci¨®n de que el discurso literario no deber¨ªa intervenir en lo p¨²blico con af¨¢n transformador. Aqu¨ª, en los cuarenta, no tuvimos a Sartre ni un ensayo como ?Qu¨¦ es la literatura? Aqu¨ª tuvimos sonetos a la rosa en plena represi¨®n franquista, como lamenta ?ngela Figuera en sus poemas¡±, agrega Sanz. Pese a todo, autores como Bel¨¦n Gopegui, Isaac Rosa o Javier P¨¦rez And¨²jar han introducido los conflictos laborales en sus libros, un tropismo que se ha acrecentado desde comienzos de esta d¨¦cada en la obra de autores como Elvira Navarro, Javier Mestre, Pablo Guti¨¦rrez o Sara Cord¨®n.
LECTURAS
Sus hijos despu¨¦s de ellos
Nicolas Mathieu
Traducci¨®n de Amaya Garc¨ªa
AdN, 2019
464 p¨¢ginas. 19,50 euros.
Qui¨¦n mat¨® a mi padre
?douard Louis
Traducci¨®n de Pablo Mart¨ªn
Salamandra, 2019
96 p¨¢ginas. 12 euros
El d¨ªa antes?
Sorj Chalandon
Traducci¨®n de Palmira Freixas
Reservoir Books, 2019
304 p¨¢ginas. 18,90 euros
La clase obrera no va al para¨ªso
Ricardo Romero Laull¨®n (Nega) y Arantxa Tirado S¨¢nchez
Akal, 2016
384 p¨¢ginas. 20 euros
El pueblo. Auge y declive de la clase obrera (1910-2010)
Selina Todd
Traducci¨®n de Antonio Jos¨¦ Ant¨®n Fern¨¢ndez
Akal, 2018
544 p¨¢ginas. 26 euros
El valle del ¨®xido
Philipp Meyer
Traducci¨®n de Eduardo Iriarte
Literatura Random House, 2017
416 p¨¢ginas. 21,90 euros
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