Telecinco estira ¡®S¨¢lvame¡¯ para cubrir el hueco de ¡®Pasapalabra¡¯

El repentino y valioso hueco que se abri¨® en la parrilla de Telecinco el martes, cuando el Tribunal Supremo convirti¨® en firme la sentencia que obligaba a dejar de emitir Pasapalabra ¡°inmediatamente¡±, encontr¨® ayer un colorido relleno: una hora m¨¢s de S¨¢lvame, el programa estrella de la cadena que ya vertebra la parrilla durante todos los d¨ªas de la semana. En concreto, S¨¢lvame Banana, siguiendo la tradici¨®n de Mediaset de diferenciar las variantes del mismo programa usando nombres de fruta, seg¨²n cambian de franja horaria. S¨¢lvame Lim¨®n empieza a las 16.00 (hora peninsular espa?ola) y es para mayores de 12 a?os; S¨¢lvame Naranja arranca a las 17.00 y se dirige a mayores de siete. En el caso de la hora extra que reemplaza al concurso cultural, de 20.00 a 21.10, va dirigida a mayores de 16 a?os, lo que permite a sus colaboradores tratar temas m¨¢s espinosos.

M¨¢s informaci¨®n

El verdadero valor de la audiencia de ¡®Pasapalabra¡¯

Nada sugiere que la soluci¨®n sea definitiva. S¨¢lvame es un arma poderosa y tan maleable, que Mediaset puede usarla para reaccionar con la inmediatez que le exig¨ªa la sentencia, pero su enorme alcance no es ilimitado. El p¨²blico al que se dirige no es el mismo que hasta el martes consum¨ªa Pasapalabra, que sol¨ªa ser el concurso m¨¢s visto, con poco menos de dos millones de espectadores de media diaria (18,8% de cuota de pantalla de media en septiembre). Esos dos millones, que adem¨¢s eran inusualmente fieles con un formato que lleva casi dos d¨¦cadas en la parrilla, representaban 0,94 puntos de la media del 15% de cuota de pantalla que alcanz¨® Telecinco en septiembre. Un tipo de p¨²blico que, seg¨²n los especialistas, demanda m¨¢s concursos y cultura, no m¨¢s cotilleos. Mantener a esos fieles exige no abusar de la muleta de S¨¢lvame.

No solo ese 0,94% de audiencia est¨¢ en juego. Tambi¨¦n puede cambiar el rendimiento de los informativos de Pedro Piqueras, los m¨¢s vistos de la televisi¨®n espa?ola, que durante a?os se han visto beneficiados por el llamado efecto arrastre de Pasapalabra: el p¨²blico se quedaba viendo ese programa de noticias porque era el que hab¨ªa justo despu¨¦s del concurso, lo cual explica que su hora de arranque, las 21.10, sea la m¨¢s tard¨ªa de la televisi¨®n generalista. Est¨¢ demostrado que hay menos posibilidades de que un espectador quiera sumarse a un informativo que ya est¨¢ empezado cuando ya tiene uno que se ajusta a sus horarios. El perfil de espectador que se queda viendo la informaci¨®n es m¨¢s parecido al que ve¨ªa Pasapalabra que el que, seg¨²n varios estudios, consume S¨¢lvame.

Concursos

El cambio a algo m¨¢s definitivo se da por muy probable en el sector audiovisual pero requiere tiempo. En Telecinco ya se sospechaba que el desenlace de su batalla legal con la brit¨¢nica ITV Global Entertainment, propietaria del formato original a la que Mediaset dej¨® de pagar hace a?os, estaba cerca; y que ese desenlace no les ser¨ªa favorable. Seg¨²n el portal F¨®rmula TV, durante el verano estuvieron rodando pilotos de concursos similares, algunos con el mismo presentador, Christian G¨¢lvez, para que la transici¨®n tuviese el menor impacto posible en la parrilla.

Al mismo tiempo, nada de esto implica que Pasapalabra est¨¦ muerto para la televisi¨®n espa?ola. Los valiosos derechos contin¨²an en manos de ITV, quien ahora puede renegociarlos con cualquier grupo medi¨¢tico, lo cual est¨¢ haciendo, seg¨²n fuentes de la industria; incluido con la propia Mediaset. Si las conversaciones llegan a buen puerto, no es descabellado imaginar un mundo en el que Pasapalabrase encuentre en otra cadena, sin los elementos que le a?adi¨® Mediaset (los famosos, el decorado y la c¨¦lebre prueba final con el Rosco), mientras Telecinco emite un concurso similar.