V¨ªctor Erice encuentra la piedra y el cielo en los or¨ªgenes de Oteiza

"El d¨ªa nace de la noche", versaba Jorge Oteiza. El cineasta V¨ªctor Erice se ha empapado de la poes¨ªa del escultor vasco para crear una instalaci¨®n audiovisual basada en el monumento que?Oteiza y el arquitecto Luis Vallet dedicaron al m¨²sico Aita Donostia (Jos¨¦ Gonzalo Zulaika), y que est¨¢ situado en la cima del monte Agi?a, en Lesaka (Navarra). El director ha presentado este martes en el Museo de Bellas Artes de Bilbao la filmaci¨®n Piedra y cielo, junto al director del museo bilba¨ªno, Miguel Zugaza. El responsable de la pinacoteca ha explicado durante la conferencia: "Los dos espacios de la videoinstalaci¨®n nos llevan a la poes¨ªa de Oteiza". "Oteiza fue sobre todo un poeta", ha dicho Erice, "no solo por lo que escribi¨®, sino por el significado de su obra, y por el concepto de su vida".

La instalaci¨®n es una incursi¨®n al interior del escultor de Orio (Gipuzkoa), y a toda su vida, desde su ni?ez y los miedos a los que se sobrepon¨ªa mirando al cielo, hasta el aprendizaje en Colombia, donde un grupo de poetas renovadores tomaron el nombre del libro de Juan Ram¨®n Jim¨¦nez, Piedra y cielo, para su proyecto de transformaci¨®n literaria. La obra ha sido producida por Nautilus Films para la Fundaci¨®n del Museo de Bellas Artes y patrocinada por la Fundaci¨®n BBVA.

Erice ha explicado ese c¨ªrculo que cerr¨® el escultor oriotarra en su ¨¦poca en Colombia en la que coincidi¨® en el tiempo con la Generaci¨®n de los Piedracielistas y el viaje que le llev¨® a la cuenca del r¨ªo Magdalena para ver los yacimientos de San Agust¨ªn y "abrazar" a las grandes esculturas de piedra. Un viaje de cielo y tierra que "posiblemente" le devolvi¨® el recuerdo, a?os despu¨¦s, cuando tras la muerte de Aita Donostia, la Sociedad de Ciencias Aranzadi le encarg¨® la escultura y ascendi¨® por primera vez al monte Agi?a con sus numerosos monumentos prehist¨®ricos.

Como la obra de Oteiza y Vallet, que tiene dos elementos, una estela funeraria y la capilla, la de Erice tiene otros dos mundos conectados: el Espacio D¨ªa, de 11 minutos y 3 segundos de duraci¨®n, y el Espacio Noche, de 6 minutos y 35 segundos. El sonido incluye la ¨²ltima composici¨®n para piano de Aita Donostia, en 1954: Andante doloroso.

La proyecci¨®n de d¨ªa ofrece unas im¨¢genes donde la naturaleza convive con las "huellas de la historia", mientras que la visi¨®n nocturna intenta captar "algo de la dimensi¨®n metaf¨ªsica del escenario iluminado por la luna", describe el autor. "La filmaci¨®n de noche sigue el pensamiento de Oteiza: la noche es un espacio fundamental para la reflexi¨®n", ha destacado Erice.

El cineasta ha reconocido que con este trabajo, adem¨¢s, ha saldado una deuda que le ha pesado toda su vida. "Con motivo del centenario de Oteiza, a quien conoc¨ª, me encargaron un documental. No pude rodarlo por motivos de trabajo. Lo sent¨ª mucho. Con Piedra y cielo saldo la deuda", ha reconocido.