El escritor y artista chileno Lemebel, reivindicado en las protestas

El escritor, artista y activista homosexual chileno Pedro Lemebel (Santiago de Chile, 1955-2015) us¨® su cuerpo y la palabra como barricada contra la dictadura de Augusto Pinochet. Ya en democracia, no dej¨® de cuestionar al poder en esa sociedad desigual, un mensaje que cobra hoy gran vigencia en medio del estallido que vive el pa¨ªs sudamericano, asegura Joanna Reposi Garibaldi, directora del documental Lemebel.

"Pedro era un visionario, como todos los grandes artistas. Lo que m¨¢s destacar¨ªa es su dignidad de la marginalidad, de la homosexualidad. Siempre luch¨® por su dignidad y por eso es tan vital hoy, cuando pedimos dignidad, igualdad y respeto a los derechos humanos. Hoy estar¨ªa en las calles marchando con nosotros", dice Reposi Garibaldi en una entrevista con EL PA?S en la ciudad argentina de Mar del Plata. Su largometraje participa en la Competencia latinoamericana del festival internacional de cine celebrado en esta ciudad.

"Nunca reneg¨® de sus or¨ªgenes", asegura la directora sobre el artista, nacido en 1955 como Pedro Mardones Lemebel en el Zanj¨®n de la Aguada, un canal lleno de basura que atraviesa el sur de Santiago. Logr¨® licenciarse como profesor de Artes Pl¨¢sticas en la Universidad de Chile y ejerci¨® brevemente como profesor en dos liceos. Fue despedido de ambos por su condici¨®n abierta de homosexual, el mismo motivo por el que fue rechazado de las filas de la izquierda militante cuando quiso entrar.

El documental ha tenido un ¨¦xito inesperado en los cines chilenos, que coincide con la aparici¨®n de nuevas biograf¨ªas y tambi¨¦n la proliferaci¨®n de carteles y pintadas en las calles con su imagen y frases c¨¦lebres del autor de Adi¨®s mariquita linda y Tengo miedo torero. En su texto m¨¢s conocido, el manifiesto "Hablo por mi diferencia", que ley¨® por primera vez en 1986, dice: "No me hable del proletariado, porque ser pobre y maric¨®n es peor". Dice tambi¨¦n: "Mi hombr¨ªa es aceptarme diferente", "No voy a cambiar por el marxismo, que me rechaz¨® tantas veces. Soy m¨¢s subversivo que usted".

Reposi Garibaldi grab¨® a Lemebel a lo largo de ocho a?os, hasta su muerte por c¨¢ncer de laringe a los 62 a?os. "Pedro no alcanz¨® a ver nada montado, s¨®lo un trailer muy libre, pero me dijo: 'Haz la pel¨ªcula que querai", cuenta la directora, que recogi¨® el premio Teddy al mejor documental de tem¨¢tica LGBT+ en el ¨²ltimo Festival de cine de Berl¨ªn.

A trav¨¦s de abundante material de archivo, Lemebel aparece travestido, desnudo, con tacones, bailando, en su adolescencia y en sus ¨²ltimos a?os. El documental se centra en su faceta de artista visual y performer, en la que destacaron actuaciones como La conquista de Am¨¦rica, realizada por el colectivo homosexual Las Yeguas del Apocalipsis en la sede de la Comisi¨®n chilena de derechos humanos el 12 de octubre de 1989. Lemebel y su compa?ero art¨ªstico, Francisco Casas, bailaron descalzos sobre un mapa de Am¨¦rica Latina con vidrios rotos. Est¨¢ tambi¨¦n Lemebel con la corona de jeringas con la llam¨® la atenci¨®n sobre el sida en Stonewall y envuelto en llamas en distintas performances a lo largo del tiempo.

"El fuego es la molotov, la bomba. Us¨® su cuerpo como una barricada, algo que hoy est¨¢ tan presente", destaca Reposi Garibaldi, quien se muestra sorprendida de la vigencia del discurso de Lemebel en aspectos como la violencia. "?Por qu¨¦ hay quemas hoy en Santiago? Estoy en contra de la violencia, creo que es peligrosa, pero esos chicos que est¨¢n quemando est¨¢n pidiendo a gritos que los visibilicen, si no queman no los ven. La cacerola, uno puede marchar pac¨ªficamente, pero no te ven".

Reposi Garibaldi confiesa tener sentimientos encontrados sobre lo que ocurre en su pa¨ªs: "Siento felicidad porque hay un pueblo que ha despertado y hay una uni¨®n y una reflexi¨®n. Pasamos de ser un pueblo muy individualista a estar conversando con el que tienes al lado y hay una necesidad imperiosa de informarnos de nuestros derechos para proponer y de salir a la calle para gritar Basta a esta sociedad neoliberal extrema. Pero tambi¨¦n tengo miedo porque est¨¢ muriendo gente y no nos est¨¢n mirando, porque el Gobierno no est¨¢ escuchando sino haciendo cambios desde la elite y porque no veo una salida, no hay nadie que aglutine esta energ¨ªa y no s¨¦ c¨®mo puede terminar esto".