¡°?Qu¨¦ gloriosa cosa es escribir novelas!¡±

Muchos a?os antes de ganar el Nobel de Literatura, Mario Vargas Llosa intent¨® comprender a la distancia en qu¨¦ momento se hab¨ªa jodido su pa¨ªs, Per¨². Detr¨¢s de uno de los arranques m¨¢s emblem¨¢ticos de una de las obras cumbres del boom latinoamericano se encontraba un periodista que escrib¨ªa por las ma?anas antes de ir a trabajar a una agencia de noticias de Par¨ªs. El autor en ciernes vivi¨® tres a?os en una monta?a rusa emocional de ¡°entusiasmo y depresi¨®n¡± que terminaron por forjarlo como una de las voces literarias imprescindibles en espa?ol. El resultado de este proceso es Conversaci¨®n en La Catedral, que cumple medio siglo desde su publicaci¨®n en 1969.

¡°?Qu¨¦ gloriosa cosa es escribir novelas!¡±, escribi¨® aquel a?o Vargas Llosa a Abelardo Oquendo, uno de los amigos que, a lo lejos, lo acompa?¨® en el tortuoso camino de la escritura. El entusiasmo reflej¨® uno de los momentos buenos. ¡°Uno se siente como Sans¨®n tirando las columnas del templo¡±, contaba en la misma carta a su amistad, a quien finalmente dedic¨® la novela junto al tambi¨¦n escritor Lucho Loayza. El intercambio epistolar lo recuerda el acad¨¦mico Carlos Aguirre, historiador de la Universidad de Oreg¨®n, en un ap¨¦ndice a la edici¨®n conmemorativa de la novela, hoy publicada por Alfaguara.

Vargas Llosa rememor¨® este s¨¢bado en la FIL de Guadalajara aquellos a?os en los que cre¨® las cuatro horas de pl¨¢tica entre el desencantado periodista Zavalita y el zambo Ambrosio en una cantina donde ¡°el olor a fritura, pies y axilas revolotea, picante y envolvente, sobre las cabezas lacias o hirsutas¡±. La charla tiene como tel¨®n de fondo el Per¨² del dictador Manuel Odri¨¢, quien gobern¨® el pa¨ªs sudamericano entre 1948 y 1956.

Vargas Llosa confes¨® que el primer a?o de la escritura de la novela fue el m¨¢s dif¨ªcil. Sab¨ªa la historia que quer¨ªa contar. Ten¨ªa los personajes y episodios que la formar¨ªan, pero ?c¨®mo usarlos con coherencia? El escritor define aquellos momentos como llenos de ¡°oscuridad¡±. ¡°Me sac¨® las canas que tengo¡±, dijo el autor, quien no encontraba la estructura id¨®nea.

Finalmente, como pas¨® con otros miembros del boom, Vargas Llosa encontr¨® los mejores consejos leyendo a William Faulkner. ¡°Descubr¨ª la riqueza de la t¨¦cnica literaria ley¨¦ndolo. Fue el primer escritor al que le¨ª con l¨¢piz y papel para entender las construcciones de sus novelas y cuentos, c¨®mo descompon¨ªa las historias para despu¨¦s volver a recomponerlas¡±, explic¨® el Nobel de Literatura de 2010.

Fue as¨ª que se le ocurri¨® situar a sus personajes principales en una charla cantinera que sirvi¨® de tronco a un ¡°¨¢rbol de conversaciones¡± que evoca el encuentro de otros muchos personajes. Ya con esa estructura decidida, lo dem¨¢s fue pulir una extensa novela que Seix Barral lleg¨® a publicar originalmente en dos tomos.

Una de las claves de Conversaci¨®n en La Catedral es su lenguaje, definido por su autor como ¡°gris, de plomo¡±. La historia evit¨® contar el golpe que llev¨® a Odri¨¢ al poder, y se centr¨® en mostrar los efectos que el Gobierno militar provoc¨® en la sociedad peruana. Fue por esto que Vargas Llosa se alej¨® de un estilo pirot¨¦cnico. ¡°Elud¨ª la brillantez, los adjetivos llamativos est¨¢n desparecidos¡±. La novela ¡°era incompatibles con el lucimiento de un lenguaje bello, brillante¡±.

El Nobel pol¨ªtico

Antes de llegar a Guadalajara, el Nobel dej¨® una estela de pol¨¦mica tras su breve paso por Ciudad de M¨¦xico. El viernes, en el Museo de la Memoria y Tolerancia, Vargas Llosa dedic¨® algunas palabras al Gobierno de Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador, que cumple un a?o este domingo. ¡°Mucho me temo que este Gobierno est¨¦ retrocediendo un poco a M¨¦xico, que comenzaba a salir de esa dictadura perfecta y temo much¨ªsimo que el populismo, que parece realmente la ideolog¨ªa del presidente de M¨¦xico, nos conduzca otra vez a la dictadura, perfecta o imperfecta¡±, dijo retomando la famosa frase que ¨¦l mismo acu?¨® sobre el r¨¦gimen del PRI en septiembre de 1990 en el coloquio El siglo XX: la experiencia de la libertad.

El comentario fue respondido por Beatriz Guti¨¦rrez M¨¹ller, la esposa de L¨®pez Obrador. ¡°Veo mal a ciertos escritores que han ganado el Premio Nobel... Me temo much¨ªsimo que el fanatismo y el dogmatismo, que parece la ideolog¨ªa de algunos, nos conduzca otra vez al panfletario perfecto", escribi¨® en Facebook la historiadora, quien coordina trabajos de Memoria Hist¨®rica y Cultura en la Administraci¨®n de la autodenominada Cuarta Transformaci¨®n.