Se venden pisos sobre el palacio de Asdr¨²bal
El desarrollo inmobiliario aprobado por el gobierno local en el cerro donde podr¨ªa estar un notable complejo arqueol¨®gico desata una batalla pol¨ªtica en Cartagena
La culpa fue de Polibio de Megal¨®polis, el historiador griego que visit¨® Cartagena hacia el 150 a.C, y se qued¨® sorprendido ante un enorme otero que se extend¨ªa junto al puerto. As¨ª que escribi¨®: ¡°En ¨¦l se alzan los magn¨ªficos palacios reales que construy¨® [el general cartagin¨¦s] Asdr¨²bal [245-207 a.C] cuando aspiraba a la monarqu¨ªa¡±. Unos 2.200 a?os despu¨¦s, el cerro del Molinete es una gran parcela pelada de forma c¨®nica, en el centro de la ciudad, completamente rodeada de edificaciones y a cuyos pies se extiende un parque arqueol¨®gico (un 26.000 metros cuadrados) y donde se exponen registros entre el III a. C y el XX. Es decir, la historia de la ciudad.
Pero la mayor parte del cerro est¨¢ sin investigar y all¨ª, asegura Iv¨¢n Negueruela, director del Museo Nacional de Arqueolog¨ªa Subactu¨¢tica de Cartagena (Arqua), sigue oculto el palacio del cartagin¨¦s que describi¨® el griego. Sin embargo, si las aseveraciones de este doctor en Arqueolog¨ªa, asesor de la Unesco y excavador de Petra (Jordania) con la Sorbona de Par¨ªs son ciertas, todo corre un tremendo peligro de desaparici¨®n porque sobre la parcela p¨²blica se han aprobado unos 120 pisos.
El equipo de gobierno municipal ¨Duna coalici¨®n del PP y exconcejales socialistas¨D replica que all¨ª no hay nada que impida las obras, que es ¡°dificultosa la interpretaci¨®n de una sucinta referencia en las Historias de Polibio, que data de mediados del siglo II a.C. y de la que, adem¨¢s, solo se conservan copias¡±, en respuesta a un cuestionario de este diario el gabinete de la alcaldesa Ana Bel¨¦n Castej¨®n. Eso s¨ª, admiten que si se hallan restos arqueol¨®gicos, en las parcelas urbanizables, deber¨¢n mostrarse al p¨²blico obligatoriamente en los garajes de los edificios.
El director del museo Arqua escribi¨® en 2015 el libro El magn¨ªfico palacio de Asdr¨²bal en Cartagena: Cerro del Molinete, que fue publicado con el respaldo de la Real Academia de la Historia (RAH). Y comenz¨® la cruenta batalla. El Ayuntamiento hab¨ªa sacado en 2014 a subasta cuatro parcelas en la parte baja de la ladera oeste, aunque la puja qued¨® desierta. En agosto de este a?o, las volvi¨® a subastar. Ahora, los adjudicatarios de los terrenos podr¨¢n construir las viviendas con la ¨²nica condici¨®n de que si se encontrase algo arqueol¨®gico de valor, deber¨ªan mantenerlo en los aparcamientos subterr¨¢neos. ¡°Todos los s¨®tanos, aunque sean de parcelas diferentes, deber¨¢n estar comunicados entre s¨ª y con accesos distintos para facilitar la entrada a los visitantes y propiciar que se conviertan en un conjunto visitable¡±, recuerda el Ayuntamiento.
Negueruela se echa, por eso, las manos a la cabeza. En su libro sostiene que ¨¦l ha detectado ¨Dlleva 20 a?os haciendo mediciones¨D la existencia de ¡°los restos de m¨¢s de cien muros del palacio de Asdr¨²bal, tallados en la roca madre¡±, lo que inclu¨ªa habitaciones, salones, rampas... El edificio, seg¨²n el arque¨®logo, ten¨ªa una planta, ¡°¨²nica en el Mundo Antiguo¡±, que se correspond¨ªa con un tri¨¢ngulo rect¨¢ngulo, el del teorema de Pit¨¢goras, en el que la hipotenusa al cuadrado es igual a la suma de los cuadrados de los catetos, lo que se visualiza habitualmente como tri¨¢ngulo 3-4-5, No se conoce en el Mediterr¨¢neo un palacio cartagin¨¦s de estas caracter¨ªsticas¡±, afirma.
Las aseveraciones de Negueruela provocaron, incluso, la reacci¨®n de colectivos de defensa del patrimonio y de partidos pol¨ªticos en la oposici¨®n. Movimiento Ciudadano (MC), la formaci¨®n m¨¢s votada en las ¨²ltimas elecciones, pero que no gobierna ¨DCartagena est¨¢ regida por una coalici¨®n del PP y de exconcejales socialistas¡ª ha exigido una declaraci¨®n expresa BIC para la colina.
Lo que m¨¢s sorprende a Jes¨²s Gim¨¦nez, presidente de MC, es la insistencia del equipo de gobierno en urbanizar una de las pocas zonas sin construir de la ciudad. ¡°Los ciudadanos necesitan espacios libres. Los ni?os del centro juegan en las calles porque no hay parques. ?Por qu¨¦ levantar m¨¢s casas cuando en el casco antiguo hay m¨¢s de cien parcelas vac¨ªas? ?A qu¨¦ obedece todo esto?¡±.
El edil recuerda que todo el casco hist¨®rico est¨¢ declarado Bien de Inter¨¦s Cultural, la m¨¢xima protecci¨®n posible, ¡°pero aun as¨ª siguen haciendo [el Ayuntamiento] lo que les da la gana¡±. ¡°?C¨®mo es posible que digan que se puede construir sin saber lo que hay debajo en su conjunto y que lo que se halle quede en los s¨®tanos de los edificios?¡±, se pregunta.
Gim¨¦nez, que ha firmado en nombre de su grupo una petici¨®n para que el cerro tenga una protecci¨®n especial, reclama que se investigue si las afirmaciones de Negueruela son ciertas o no. ¡°Yo no s¨¦ si est¨¢ ah¨ª o no el palacio de Asdr¨²bal, pero estamos hablando de uno de los m¨¢s importantes arque¨®logos de Espa?a. Es una eminencia. ?Es que aqu¨ª nadie tiene un poco de sentido com¨²n?¡±.
El Gobierno local replica que ¡°se han realizado diferentes campa?as de excavaciones arqueol¨®gicas [en la parte baja] desde 2007 por un solvente equipo multidisciplinar dirigido por la Universidad de Murcia, y han concluido que no hay evidencias cient¨ªficamente contrastadas que permitan asociar los restos arqueol¨®gicos con la hip¨®tesis del posible palacio de Asdr¨²bal¡±. No obstante, admite que ¡°no hay ning¨²n informe cient¨ªficamente contrastado que permita, ni asegurar ni sostener, con absoluta veracidad la existencia o ausencia del palacio¡±.
?Y c¨®mo era el supuesto palacio de Asdr¨²bal? Negueruela cree que fue excavado en la colina y que su planta era un gran tri¨¢ngulo escaleno. Sus medidas, seg¨²n el experto, eran 140, 180 y 250 metros por cada lado. ¡°No se conoce ning¨²n palacio de estas proporciones fuera de Pers¨¦polis y Babilonia. Es verdad¡±, a?ade, ¡°que Pers¨¦polis lleg¨® a tener un lado de 300 metros, pero solo tras sucesivas adiciones de varios monarcas¡±.
Supuestamente, una vez tallado el tri¨¢ngulo, el cerro se estructur¨® en terrazas escalonadas. En ellas se tallaron diversas salas y servicios del palacio como almacenes, salones de representaci¨®n o de ceremonias, unidos por rampas. La t¨¦cnica de construcci¨®n fue la de ¨¢ngulos sexagesimales, el habitual en las culturas p¨²nicas, mesopot¨¢micas y egipcias, que establece las longitudes mediante la multiplicaci¨®n de codos de 52 cent¨ªmetros de longitud.
El Ayuntamiento replica que esos escalones a los que hace referencia Negueruela responden a ¡°una orograf¨ªa peculiar que motivaron una profunda transformaci¨®n antr¨®pica del espacio disponible, con numerosos recortes en la propia roca con el fin de aprovechar, sobre todo, las zonas altas y laderas de las colinas para hacerlas habitables¡±.
Para el arque¨®logo, ¡°la construcci¨®n de las viviendas propuestas por el Ayuntamiento encerrar¨¢ para siempre la ladera oeste del palacio, lo que perdurar¨¢ durante siglos como responsabilidad exclusiva de esta corporaci¨®n. Todo el casco hist¨®rico y, por tanto, la zona que se pretende urbanizar son BIC y est¨¢n sometidos a las normas legales de m¨¢xima protecci¨®n espa?olas, regionales e internacionales¡±. Por ello, sopesa presentar una denuncia por atentado contra el patrimonio y prevaricaci¨®n. ¡°Esto no se puede consentir. Ni siquiera han comprobado si lo que yo afirmo es cierto¡±.
El Ayuntamiento admite que en las ¨²ltimas prospecciones de la parte baja de la colina ¡°se ha hallado la continuaci¨®n de una calzada romana de finales del siglo I a. C. de piedra caliza, y construcciones vinculadas a la intensa actividad edilicia que se desarrolla en esta zona entre los siglos I y II d. C. y que parece relacionada con amplias estancias de trabajo, o conjuntos artesanales, vinculados en ocasiones con instalaciones hidr¨¢ulicas¡±.
El Consistorio afirma que ¡°ninguno de los edificios superar¨¢ la altura del monte¡±, que aproximadamente se eleva unos 35 metros sobre el nivel del mar. ¡°Pues nada¡±, concluye Gim¨¦nez. ¡°Que los coches de los nuevos residentes circulen por la calzada romana y que luego aparquen junto a los restos arqueol¨®gicos del garaje. Es que no son capaces de admitir que se han equivocado¡±.
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