Contra los periodistas, los bur¨®cratas y los pol¨ªticos
Josep Casals se redime del tono panfletario de este libro cuando aborda el ¡®proc¨¦s¡¯. Cualquiera que sea el sentimiento sobre la cuesti¨®n catalana, el lector encontrar¨¢ interrogantes y respuestas dignas de atenci¨®n
En 2003, Josep Casals recibi¨® el Premio Anagrama de Ensayo por su libro Afinidades vienesas, que mereci¨® reconocimiento casi general. Hace un lustro dio a luz Constelaci¨®n de pasaje, un tocho de m¨¢s de mil p¨¢ginas al que su editor rindi¨® homenaje p¨²blico, justificado al menos por el enorme esfuerzo personal del autor, que confes¨® encontrarse absolutamente agotado tras entregar su original a la imprenta. Le¨ª entonces unas declaraciones suyas en el sentido de que, por lo mismo, en su siguiente libro iba a decir m¨¢s o menos lo que le diera la gana, ya que se encontraba harto de la situaci¨®n.
O sea, que no sorprende el tono panfletario de muchos p¨¢rrafos de Cr¨®nica cr¨ªtica, tercer tomo de esa trilog¨ªa que llega a los escaparates en la desescalada del confinamiento. Algunas frases dignas de figurar en los mejores libelos ayudan felizmente a ventilar la lectura de algo que en ocasiones m¨¢s parece un diccionario de citas que el ensayo que se nos promete sobre periodismo, universidad, burocracia, pol¨ªtica y naci¨®n. Entiendo al menos, y as¨ª lo corrobora la obra, que de aquello de lo que estaba harto Casals era precisamente de los periodistas, los pol¨ªticos, los catedr¨¢ticos y los bur¨®cratas. Muchos lo est¨¢n tambi¨¦n, pero no necesitan citar cientos de veces a Robert Musil, Michel Foucault o Walter Benjamin para defender sus argumentos. La erudici¨®n no equivale a la sabidur¨ªa y desde que Internet existe ni siquiera rinde tributo al conocimiento. Estoy seguro de que todas las menciones que pueblan el texto son fruto de la atenta lectura de quien lo firma, pero tambi¨¦n creo que abundar¨¢n quienes se sientan decepcionados por su oscuridad interpretativa. Aunque en algunos talleres de literatura se ense?a que cuando no se sabe c¨®mo ser brillante, merece la pena tratar de parecerlo a fuer de mostrarse incomprensible.
La erudici¨®n no equivale a la sabidur¨ªa y desde que Internet existe ni siquiera rinde tributo al conocimiento
Por todo lo dicho, a la hora de escoger entre las 500 p¨¢ginas de este desigual libro, me quedo con las que narran, como casi ning¨²n periodista lo ha hecho, la historia menuda del proc¨¦s catal¨¢n puesto en marcha por el se?or Puigdemont y que solo una pandemia viral parec¨ªa capaz de desarticular. Casals nos demuestra que ¨¦l puede ser tan eficaz en esto como el mismo coronavirus y desde su coraz¨®n de anarquista, aunque lo sea un poco a la violeta, no deja t¨ªtere con cabeza a la hora de repartir culpas y desatinos entre los independentistas y los que no lo sean.
Nadie se libra de sus improperios. Pujol, y no digamos Marta Ferrusola, Felipe Gonz¨¢lez, Mas, Zapatero, Maragall, Puigdemont, Torra, Oriol Junqueras, etc¨¦tera, etc¨¦tera¡, todos son traidores, egotistas, voraces o tontos, incluso varias de esas cosas a la vez. Podemos parece haber traicionado a sus ra¨ªces y ni siquiera la CUP merece absoluci¨®n de sus pecados. Incluso los dos grandes mitos de la catalanidad, Bar?a y Caixa, son objeto de mortales lanzadas dial¨¦cticas. Est¨¢ claro que frente al tono doctoral y sabelotodo que emplea en sus cr¨ªticas al periodismo, la universidad o la revoluci¨®n tecnol¨®gica, sobre la que demuestra una pat¨¦tica ignorancia, su mejor pluma es la que se apodera del libelista que lleva dentro. Semejante apasionamiento permite redimirle de sus errores en el relato, algunos tan manifiestos como llamar repetidas veces general al coronel P¨¦rez de los Cobos, del que encima asegura es hermano del presidente del Tribunal Constitucional que firm¨® la sentencia sobre el Estatuto catal¨¢n. Una simple b¨²squeda en Google le hubiera permitido saber que la r¨²brica pertenec¨ªa a la presidenta Mar¨ªa Emilia Casas, al frente de una instituci¨®n mayoritariamente integrada por jueces progresistas y cercanos a partidos de izquierda. Para no hablar de la definici¨®n de Fernando el Cat¨®lico como rey de Catalu?a, donde su autoridad, legitimada por ser titular de la corona de Arag¨®n, no pas¨® de ser reconocida mediante el t¨ªtulo de pr¨ªncipe. Peque?os errores que deslucen una obra de ambici¨®n intelectual.
Pero no todo es espeso, pretencioso ni sectario en el libro. Hay reflexiones sobre el nacionalismo y la identidad y debates acerca del Estado policial que merecen una meditaci¨®n y ponen de relieve las preocupaciones sinceras de Casals. Muchas de ellas pueden y deben ser compartidas, sin necesidad de haber le¨ªdo a Giorgio Agamben, el fil¨®sofo italiano de la Nuda Vita, profusamente citado por aqu¨¦l hasta el punto de que el volumen parece en muchos casos un homenaje a su obra. Por ejemplo, cuando se?ala que a la idea de pertenencia a la naci¨®n-Estado ¡°como condici¨®n dada se le opone la de una identidad como devenir plural¡±. Esta reivindicaci¨®n identitaria de signo tan ben¨¦volo es la base de su reclamo del derecho a la autodeterminaci¨®n. Adem¨¢s sugiere reconocerlo de forma indirecta y bastante ingenua mediante una disposici¨®n transitoria en la Constituci¨®n espa?ola que permitiera organizar un refer¨¦ndum al respecto de la cuesti¨®n catalana. En un alarde de pragmatismo, poco coherente con su ensue?o doctrinal, llega incluso a reconocer que ¡°un hipot¨¦tico devenir tendente a alcanzar la independencia de Catalunya no ser¨¢ independiente de lo que ocurra en Espa?a y Europa¡±, y advierte adem¨¢s de que ¡°la exaltaci¨®n nacional desata v¨¦rtigos que para unos juegan un papel compensatorio, pero para otros, los que pasan a ser una minor¨ªa, son fuente de malestar y disensi¨®n¡±.
Son precisamente estas ¨²ltimas p¨¢ginas, en donde se revela el pensamiento m¨¢s pragm¨¢tico del autor, las que me llevaron a reconciliarme con una obra que en principio no parec¨ªa destinada a exponer una tesis personal, sino una colecci¨®n de esl¨®ganes de otros a fin de justificar el cabreo del firmante. Cualquiera que sea el sentimiento respecto a la cuesti¨®n catalana, el lector encontrar¨¢ interrogantes y respuestas dignas de atenci¨®n en esta ¡°cr¨®nica cr¨ªtica¡± de la que deriva un notable conocimiento de los siglos XIX y XX y un lamentable pasmo respecto al porvenir del actual.
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Autor: Josep Casals.
Editorial: Anagrama, 2020.
Formato: tapa blanda (528 p¨¢ginas, 24,90 euros).
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