Los toros, ante el 2021; una noticia buena (Francisco Brines) y una amenaza

¡°Si la pr¨®xima temporada no comienza en Castell¨®n y Valencia, estamos muertos. Veo mucho futuro en los festejos populares, pero el mercado taurino se reducir¨¢ much¨ªsimo, y solo quedar¨¢n varias ganader¨ªas para las figuras y otras cuantas para los aficionados de verdad. El porvenir es muy negro¡­¡±

Este es el diagn¨®stico que la semana pasada aventuraba en este blog Jos¨¦ Joaqu¨ªn Moreno Silva, ganadero del hierro de Saltillo. Pudiera parecer alarmista, pero no hace m¨¢s que reflejar la realidad taurina, esa ante la que el propio sector cierra los ojos y guarda silencio.

Ciertamente, la temporada pr¨®xima depende fundamentalmente del curso de la pandemia, pero est¨¢ a la vuelta de la esquina, y las grav¨ªsimas circunstancias que padece el sector exigen que a d¨ªa de hoy exista un boceto de estrategia para impedir la desaparici¨®n de la tauromaquia en el caso de la situaci¨®n sanitaria no mejore.

Llama poderosamente la atenci¨®n que, a estas alturas del a?o, toreros, empresarios y ganaderos permanezcan encerrados en su cuarteles de invierno y hayan decidido esperar a que amaine el temporal antes que dar un paso al frente, saltar al ruedo, coger el toro por los cuernos y redactar una hoja de ruta para la temporada pr¨®xima; aunque, despu¨¦s, no se pueda cumplir.

?D¨®nde est¨¢n las figuras del toreo? ?D¨®nde est¨¢n El Juli, Cayetano, Manzanares, Perera, Aguado, Morante, Emilio de Justo, Ferrera, Ure?a, Ponce, Urdiales, Roca Rey¡­? ?Qu¨¦ opinan? ?Qu¨¦ est¨¢n dispuestos a hacer para que la fiesta perviva?

?D¨®nde est¨¢n los toreros, empresarios y ganaderos?

?D¨®nde est¨¢n los empresarios? ?D¨®nde est¨¢n Sim¨®n Casas, Ram¨®n Valencia, la casa Chopera, Alberto Bailleres (FIT), entre otros gestores de plazas de primera y segunda categor¨ªa?

?D¨®nde est¨¢n los ganaderos? ?D¨®nde est¨¢n Juan Pedro Domecq, N¨²?ez del Cuvillo, Garcigrande, Victoriano del R¨ªo, Miura, Fuente Ymbro¡­?

?No tienen nada que decir a estas alturas de la pel¨ªcula? ?A ninguno de ellos, entre otros muchos, le hierve la sangre, y tiene el valor suficiente para pedir que el sector despierte y afronte el problema con la decisi¨®n necesaria?

Ya saben lo sucedido en 2020 en Madrid y Sevilla, las dos plazas m¨¢s importantes: que han permanecido cerradas a pesar de que las restricciones sanitarias no lo han impedido. ?Les parece bien la decisi¨®n de estas empresas, con las grav¨ªsimas repercusiones que han proyectado sobre la maltrecha salud de la tauromaquia? Sin lugar a dudas, la actitud de Plaza1 y Pag¨¦s pone en entredicho la capacidad de ambas para gestionar Las Ventas y La Maestranza.

?Acaso los taurinos no tienen claro que nadie que no sean ellos mismos ayudar¨¢ al sector a salir del abismo en el que se encuentra? ?A¨²n conf¨ªan en el ministro de Cultura, como Victorino Mart¨ªn?

Conclusi¨®n: lo m¨¢s peligroso para la temporada del 2021 puede que no sea la pandemia, sino la pasividad y el silencio de los taurinos. Quiz¨¢, cuando sean conscientes de ello, sea demasiado tarde.

Afortunadamente, ante tanta zozobra, una noticia reciente ha devuelto un ¨¢pice de optimismo a la tauromaquia: la concesi¨®n del Premio Cervantes al poeta valenciano Francisco Brines.

Este preciado galard¨®n no solo ha servido para homenajear a un extraordinario creador, sino para constatar que a¨²n quedan intelectuales que gozan con la fiesta de los toros.

Brines est¨¢ considerado un ferviente partidario y defensor de la tauromaquia, seguidor de Antonio Ord¨®?ez y Rafael de Paula y amigo de Luis Francisco Espl¨¢. Colaborador de la revista Quites, ha escrito que ¡°la fiesta de los toros es el espect¨¢culo m¨¢s razonado y emocionante que se ha originado y logrado en Espa?a¡±.

Este premio ha pasado desapercibido para el taurinismo oficial; a excepci¨®n de Espl¨¢ y los portales especializados, nadie ha destacado la importancia may¨²scula de que un personaje de su talla siga pensando que ¡°a veces, en un natural, da la impresi¨®n de que el tiempo se ha detenido¡±.

Las referencias de la Ley de Educaci¨®n al cuidado de los animales pueden tener consecuencias para el futuro de la fiesta

Por el contrario, parece que la afici¨®n del galardonado ha pasado desapercibida para el jurado, donde figuraba alg¨²n antitaurino militante. ?Le han concedido el Premio Cervantes a pesar de su militancia taurina o es que la desconoc¨ªan? Cualquiera sabe¡­

Esa era la buena noticia.

La amenaza la componen las distintas referencias de la nueva Ley Org¨¢nica de Educaci¨®n al cuidado de los animales y las consecuencias que ello puede suponer para la tauromaquia en el futuro.

Uno de los fines de la ley es ¡°la adquisici¨®n de valores que propicien el respeto hacia los seres vivos¡± (Art. 2.1e); uno de los objetivos de la educaci¨®n primaria es ¡°conocer y valorar los animales m¨¢s pr¨®ximos al ser humano y adoptar modos de comportamiento que favorezcan su cuidado¡± (Art. 17 l).

Y entre los objetivos de la Educaci¨®n Secundaria Obligatoria, figura ¡°valorar cr¨ªticamente los h¨¢bitos sociales relacionados con la salud, el consumo, el cuidado de los seres vivos y el medio ambiente, contribuyendo a su conservaci¨®n y mejora¡± (Art. 23 k).

Nada que objetar, como no puede ser de otra manera, a que se regule por ley la atenci¨®n y el respeto que merecen todos los seres vivos, pero a nadie se le oculta que estos buenos prop¨®sitos pueden ser argumentos suficientes para cercenar la afici¨®n a los toros en las j¨®venes generaciones; prueba de ello es la satisfacci¨®n mostrada por distintas asociaciones animalistas.

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Javier L¨®pez-Galiacho, jurista, presidente del C¨ªrculo Taurino Universitario Mazzantini y un aficionado comprometido, est¨¢ convencido de que ¡°introducir estos contenidos en la educaci¨®n b¨¢sica supone un ¡®golletazo¡¯ al futuro del toreo, y tambi¨¦n, c¨®mo no, a la viabilidad de esa especie zoot¨¦cnica ¨²nica en el mundo que es el toro de lidia¡±.

¡°Me da miedo que estas asignaturas del ma?ana caigan en manos de fundamentalistas del animalismo y condenen el toreo a su desaparici¨®n¡±, insiste.

¡°?Qu¨¦ profesores impartir¨¢n esta materia? ?Cu¨¢l ser¨¢ su contenido en los planes de estudio¡±?, se pregunta L¨®pez-Galiacho. ¡°A ver qu¨¦ ni?o se va a atrever a pisar una plaza de toros¡±, prosigue, ¡°o c¨®mo se sentir¨¢ en la escuela el hijo de un torero o de un ganadero¡±.

¡°Todo esto deja en evidencia la urgente necesidad de un lobby taurino en el Parlamento que asesore a los representantes para que estas frivolidades sean combatidas¡±, concluye el aficionado.

El Premio Cervantes, el galard¨®n literario m¨¢s prestigioso en lengua castellana, para un aficionado cabal, un intelectual que prestigia la tauromaquia, y una Ley de Educaci¨®n que encierra lo que pudiera ser una bomba de relojer¨ªa contra el porvenir de los toros; y los taurinos, callados, en silencio, cada cual pertrechado de la tormenta, cuando deber¨ªan estar en todos los medios con propuestas para la pr¨®xima temporada.

Menos mal que est¨¢ el ministro de Cultura, en quien tanto conf¨ªa, con desbordante ingenuidad, la Fundaci¨®n Toro de Lidia¡­ Como si el Gobierno tuviera alg¨²n inter¨¦s en la pervivencia de la fiesta. Ya ver¨¢n...