Fernando Puchol, el hombre a quien le gustaba tocar el piano

Sin haber alcanzado los ochenta a?os, la covid se ha llevado al pianista valenciano Fernando Puchol el 30 de diciembre. Nacido en Valencia en 1941, form¨® parte de una dorada generaci¨®n de grandes del teclado espa?ol cuyas carreras han dado un amplio fruto desde una larga y cumplida docencia. Fue el caso de Puchol, varias d¨¦cadas catedr¨¢tico en el Conservatorio Superior de Madrid, donde tambi¨¦n ejerci¨® la misma funci¨®n otro grande de su misma edad, Joaqu¨ªn Soriano y otros de edades cercanas, como el malague?o Manuel Carra o el canario Guillermo Gonz¨¢lez.

De todos ellos, Puchol estaba adornado con la gracia de una juventud y sencillez perennes que escond¨ªan cuidadosamente un curr¨ªculo esplendoroso que hoy trae aromas de una ¨¦poca casi irreconocible. Alumno desde la infancia valenciana de Daniel de Nueda ¡ªa los siete a?os, lo escuch¨® tocar Jos¨¦ Iturbi y aconsej¨® a sus padres que el brillante ni?o estudiara con De Nueda¡ª, complet¨® estudios en Par¨ªs con Luis Galv¨¦ y en Viena con Hans Graf. Y, ya desde los a?os sesenta, se ir¨ªan acumulando brillantes jalones a su carrera: premios, giras de conciertos y actividades docentes que le llevaron por todo el mundo, dejando una numerosa pl¨¦yade de alumnos.

Frente a este oropel, nos gusta recordar al Fernando Puchol sencillo y enamorado de la m¨²sica y al que, ¡°le gustaba tocar el piano¡±, como afirmaba en un mod¨¦lico retrato que realiz¨® Jos¨¦ Luis Garc¨ªa del Busto en la serie Pianistas espa?oles para Radio Cl¨¢sica, har¨¢ de ello cuatro a?os y medio. Daba con ello una de sus ¨²ltimas lecciones para ¡°quien corresponda¡±.

Su legado grabado es menos extenso de lo que le correspond¨ªa. Toc¨® mucho romanticismo, con especial querencia por Schumann, no despreci¨® el siglo XX y su formaci¨®n valenciana le llev¨® a dejar su marca en compositores coet¨¢neos, Manuel Palau, Francisco Ll¨¢cer Pla y, de modo especial, ya que se trata de una discograf¨ªa hoy esencial, en la obra de Carlos Palacio, otro valenciano de obligada memoria, pero de heroica recuperaci¨®n, dada su condici¨®n de exiliado republicano. De Palacio a¨²n se encuentran en Internet los ¨²nicos ejemplares de su piano completo tocado por Puchol.

Tambi¨¦n se interes¨® por la m¨²sica de c¨¢mara y su d¨²o con el violinista Pedro Le¨®n alcanz¨® en 1970 el Primer Premio del Concurso Internacional Mar¨ªa Canals de Barcelona. Colabor¨® con el Cuarteto Enesco y se embarc¨® en un d¨²o de pianos con Ana Bogani, su esposa.

En YouTube se encuentran grabaciones del maestro desaparecido, con una proporci¨®n alta de romanticismo, Liszt, Chopin, obligados en un gran docente del piano; Beethoven y Schumann, quiz¨¢ sus preferidos; Brahms, incluyendo ejemplos de su d¨²o de pianos con Ana Bogani; y en p¨¢ginas m¨¢s avanzadas, buenos ejemplos de su grabaci¨®n de Carlos Palacio. Hay tambi¨¦n una grabaci¨®n completa del concierto homenaje con motivo de sus 70 a?os, realizado en el Auditorio Nacional de M¨²sica de Madrid. Sabe a poco, pero es un buen retrato de una figura capital del piano espa?ol en el tr¨¢nsito de la dif¨ªcil posguerra hacia una Espa?a m¨¢s completa y asentada, pero a la que quiz¨¢, ?ay!, le interese menos Schumann y los compositores espa?oles que la que vio el arranque fulgurante de una carrera que ahora acaba de llegar a su fin.