Los correos del robo en la Biblioteca Nacional: ¡°Informada directora de ¡®caso Galileo¡±

Una serie de correos electr¨®nicos intercambiados en 2014 entre dos responsables de la direcci¨®n t¨¦cnica de la Biblioteca Nacional de Espa?a (BNE) apuntan que la directora, Ana Santos, fue informada en aquellas fechas de la desaparici¨®n del Sidereus nuncius, el libro de Galileo Galilei impreso en Venecia en 1610. Entre los mensajes a los que ha tenido acceso EL PA?S figuran frases como ¡°Informada directora de caso Galileo¡±, ¡°Ayer estuve viendo este tema con la directora¡± o ¡°Te paso las primeras conclusiones del estudio para pasarle a la directora¡±. Santos, que dice no haber conocido el caso entonces, denunci¨® el robo en 2018, cuatro a?os y cinco meses despu¨¦s de que se descubriera el caso.

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Los correos que cruzaron en el verano de 2014 la directora t¨¦cnica, Mar Hern¨¢ndez, en aquel momento de vacaciones, y la subdirectora del departamento, A. V., muestran las gestiones que se pusieron en marcha tras la desaparici¨®n del tratado astron¨®mico y c¨®mo todo el trabajo de varios departamentos ten¨ªa como ¨²nico objeto informar a Santos. En uno de los mensajes, Hern¨¢ndez le dice a su n¨²mero dos: ¡°Aprovecha para ense?¨¢rselo a la directora¡±. Preguntada anteayer, martes, por estos nuevos correos, Santos declin¨® responder a EL PA?S con el argumento de que hay una investigaci¨®n en marcha. En efecto, el Ministerio de Cultura abri¨® un expediente informativo el pasado lunes 15 para aclarar lo ocurrido despu¨¦s de que este diario destapara el caso.

En declaraciones anteriores, Ana Santos, que desempe?a el cargo desde 2013, asegura que no fue informada del robo por sus subordinadas en 2014 y que se enter¨® en septiembre de 2018 (51 meses despu¨¦s de que se descubriese), por el correo que le envi¨® el profesor de la Universidad de Georgia (EE UU) Nick Wilding. Este experto en Galileo advert¨ªa de que el Sidereus nuncius que aparec¨ªa en el cat¨¢logo digital de la Biblioteca era una falsificaci¨®n similar a las de Massimo De Caro, el famoso falsificador italiano. En las mismas fechas el catedr¨¢tico de Historia de la Ciencia en la UNED Carlos Sol¨ªs pregunt¨® a la Biblioteca d¨®nde estaba el original de la obra.

Pero la historia de esta misteriosa desaparici¨®n hab¨ªa empezado muchos a?os antes. El 19 de mayo de 2014, responsables del Departamento de Conservaci¨®n y Preservaci¨®n de Fondos comunicaron a la Direcci¨®n T¨¦cnica y al Departamento de Manuscritos, Incunables y Raros la aparici¨®n del ejemplar sospechoso de haber sustituido al original. El Sidereus nuncius se analiz¨® en el taller de restauraci¨®n y a la vista del microscopio se confirm¨® que se trataba de una falsificaci¨®n.

La obra de Galileo Galilei hab¨ªa sido sustra¨ªda mucho antes, en 1987, junto con otros 413 vol¨²menes; y recuperada dos a?os despu¨¦s. En 2007 se produjo el robo de los ptolomeos, los mapas sustra¨ªdos por el uruguayo C¨¦sar Ovilio G¨®mez. Ese mismo a?o ya se comprob¨® que la ¨²nica obra consultada entonces por el ladr¨®n, el 4 de junio de 2004, fue el Sidereus nuncius. Por estos antecedentes, C¨¦sar Ovilio G¨®mez es tambi¨¦n el principal sospechoso para la polic¨ªa de la desaparici¨®n del galileo. El autor del robo extrajo el cuerpo del libro de la BNE, coloc¨® una copia en su lugar y m¨¢s tarde hizo falsificaciones que han aparecido en una librer¨ªa de Nueva York y en una subasta de Sotheby?s.

El an¨¢lisis de los correos cruzados entre responsables de la direcci¨®n t¨¦cnica de entonces ofrece una imagen de c¨®mo se gestion¨® el caso. El mismo 19 de mayo de 2014, fecha en la que se comunicaron las sospechas sobre este ejemplar, Mar Hern¨¢ndez, directora t¨¦cnica, pidi¨® un informe ¡°lo m¨¢s r¨¢pido posible, aunque no sea completo¡±. Al d¨ªa siguiente se celebr¨® una reuni¨®n en la que participaron 11 directores de departamento y en la que comunic¨® sus sospechas de que el libro 2/40418 Sidereus nuncius hab¨ªa sido falsificado; y ese mismo d¨ªa Hern¨¢ndez escribi¨® a su equipo un correo en el que ped¨ªa discreci¨®n. Hern¨¢ndez lo explica ahora as¨ª: ¡°Lo ped¨ª de cara a la gente de la BNE y de cara al exterior. Ten¨ªa que informar a la directora, iniciar la investigaci¨®n y ver su magnitud¡±.

El 28 de mayo, la subdirectora t¨¦cnica A. V. volvi¨® a pedir discreci¨®n en otro correo, y uno de sus receptores sugiri¨® que se comunicara el caso a la Guardia Civil, lo que se desech¨® a la espera de reunir m¨¢s datos. Hern¨¢ndez se?ala: ¡°Informar a la Guardia Civil era algo que ten¨ªamos que pasar a Santos para que ella lo valorara¡±.

El 7 de junio de 2014 se hizo un informe preliminar sobre la obra donde se aseguraba que era una falsificaci¨®n y se destacaba que el libro hab¨ªa sido consultado por el autor de los robos de los ptolomeos. Santos se?ala sin embargo que no se le envi¨® este informe ni se le inform¨® de su existencia.

El 1 de agosto, cuando Mar Hern¨¢ndez ya estaba de vacaciones, A.V., la subdirectora t¨¦cnica, envi¨® a su jefa un correo con las primeras indagaciones: ¡°Las cosas van estando claras. De momento, un solo falso, el ya conocido y varias faltas, si bien estas faltas son antiguas. Cuando lo tenga todo, terminar¨¦ nuestra tabla y pasar¨¦ las incidencias a un informe para que podamos escribir a Ana [en referencia a la directora, Ana Santos]¡±.

Al d¨ªa siguiente las dos responsables de esta unidad siguieron comunic¨¢ndose por correo sobre las listas de obras desaparecidas y la conveniencia de seguir buscando. La subdirectora A. V. escribi¨® a su jefa a las 11.31: ¡°Yo tambi¨¦n creo que es suficiente con lo hecho hasta ahora, he seguido con ello porque no me queda claro si Ana [de nuevo se refiere a Ana Santos] lo que quiere es saber que hemos revisado y tras una cata est¨¢ todo bien, o un informe detallado con la comprobaci¨®n de cada obra y las incidencias de las que tengan algo¡±.

Una hora m¨¢s tarde, a las 12.36, A. V. envi¨® un nuevo correo a Hern¨¢ndez: ¡°Te paso informaci¨®n referente a las comprobaciones realizadas respecto a los libros de geograf¨ªa objeto de robo (¡¯caso Galileo¡¯) tras la detecci¨®n de que uno de ellos era falso. Primeras conclusiones del estudio para pas¨¢rselas a la Directora¡±. A las 19.09 Hern¨¢ndez respondi¨® a su subordinada: ¡°Ana, aprovecha a ense?¨¢rselo a la Directora¡±.

El 4 de agosto, dos d¨ªas m¨¢s tarde, A. V. remiti¨® un correo a Hern¨¢ndez con 30 puntos de diferentes asuntos. Y, entre ellos, incluy¨® la siguiente frase: ¡°Informada directora de caso Galileo¡±. La comunicaci¨®n a Santos, seg¨²n Hern¨¢ndez, fue verbal. Hasta 2016 no aparecen correos en los que se vuelva a hablar de este caso. Este vac¨ªo se explica, seg¨²n la versi¨®n de Hern¨¢ndez, porque Santos no adopt¨® ninguna iniciativa, ni les pidi¨® m¨¢s informaci¨®n.

El asunto Galileo qued¨® parado hasta el 7 de septiembre de 2016, cuando se celebr¨® una reuni¨®n de la directora de la Biblioteca con Mar Hern¨¢ndez para tratar de la situaci¨®n en cat¨¢logo de ejemplares problem¨¢ticos. El primero de los tres libros que iban a analizar era el Sidereus nuncius falsificado. Al d¨ªa siguiente, Hern¨¢ndez envi¨® un correo a cuatro personas del departamento de manuscritos para pedirles un informe completo y a?ad¨ªa: ¡°Ayer estuve viendo este tema con la directora¡­ Pregunta la directora si la migraci¨®n se hizo con el libro en la mano o desde las propias fichas¡±.

Hasta marzo de 2018, el Sidereus nuncius no vuelve a ser motivo de inter¨¦s. Desde ese mes y hasta septiembre de ese mismo a?o la obra de Galileo figur¨® en la exposici¨®n Cosmos en la Biblioteca Nacional. La visitaron 53.000 personas y en el cat¨¢logo aparec¨ªa ya como ¡°falsificado¡±. Una persona que particip¨® en la elaboraci¨®n del cat¨¢logo afirma que ¡°entonces era de sobra conocido que se trataba de una obra falsificada¡±.

En septiembre de 2018, Santos recibi¨® el correo del investigador Nick Wilding. Es entonces cuando la directora escribi¨® a los responsables y pidi¨® informaci¨®n. Entre ellos a Javier Docampo, en aquellas fechas director del Departamento de Manuscritos, Incunables y Raros: ¡°Por favor, Javier ?nos puedes decir algo de lo que cuenta este se?or? ?Tenemos informaci¨®n sobre la procedencia del ejemplar?¡±.