Una s¨ªntesis mordaz de la esperp¨¦ntica corrupci¨®n valenciana del PP: ¡°Si me vot¨¢is, tendr¨¦is un Ferrari¡±

De tan grotescos e inveros¨ªmiles pueden parecer una exageraci¨®n, una deformaci¨®n de la realidad, un esperpento de Valle-Incl¨¢n. Si, adem¨¢s, los casos de corrupci¨®n m¨¢s llamativos detectados durante el mandato del PP en las principales instituciones de la Comunidad Valenciana entre 1995 y 2015, se relatan con ¨¢nimo mordaz, uno detr¨¢s de otro o mezcl¨¢ndolos a trav¨¦s de sus vasos comunicantes, se corre el riesgo de caer en la parodia. Pero son todos muy reales. Por eso, el periodista Rodrigo Terrasa inserta los testimonios personales de testigos protegidos de la Agencia Valenciana Antifraude que han denunciado pr¨¢cticas corruptas en su reciente libro La ciudad de la euforia. Una hip¨®tesis de la mafia (Libros del KO), un recorrido vertiginoso por los esc¨¢ndalos de un periodo pol¨ªtico que se sigue juzgando en los tribunales.

El virulento acoso al que han sido sometidos esos testigos por no participar en el negocio constituye un brutal contrapunto a las carcajadas del p¨²blico de los m¨ªtines por el desparpajo del expresidente de la Diputaci¨®n de Valencia (¡°Yo ten¨ªa un Ferrari y no quer¨ªan que lo tuviera. (...) Pero yo os digo: si me vot¨¢is, todos tendr¨¦is uno¡±), el procesado Alfonso Rus, al que grabaron supuestamente contando billetes en el coche; la habilidad del condenado Carlos Fabra, expresidente de la Diputaci¨®n de Castell¨®n, para divertir a sus invitados con sus chistes verdes (como el matrimonio Aznar), o la justificaci¨®n del pago de prostitutas con la contrataci¨®n de ¡°traductoras rumanas¡± a trav¨¦s de la depuradora de Valencia, en la que se saquearon m¨¢s de 20 millones de euros.

¡°Yo quer¨ªa que el libro tuviera mucho color, no que fuera un retrato judicial¡±, explica el autor valenciano, de 43 a?os, ¡°contar esas reuniones del empresario Enrique Ortiz con Sonia Castedo [exalcaldesa de Alicante] en el yate, retratar situaciones y los personajes secundarios¡±. ¡°Ten¨ªa muy clara la intenci¨®n mordaz y quer¨ªa que el libro fuera divertido, pero tem¨ªa resultar fr¨ªvolo. Es verdad que corrupci¨®n ha habido en muchos otros sitios, y tal vez con casos m¨¢s graves, pero en Valencia tiene ingredientes muy especiales con personajes como El Bigotes que env¨ªa la G¨¹rtel o como Marcos Benavent [procesado en la trama Taula], que se arrepiente y se declara un yonki del dinero. Por eso introduje los testimonios an¨®nimos con el consentimiento de los mismos y sin identificar, claro¡±, apunta.

La idea de escribir sobre la materia le surgi¨® entrevistando al escritor valenciano Ferran Torrent, que se ha inspirado en algunos casos de corrupci¨®n. ¡°Cuando le pregunt¨¦ por qu¨¦ empleaba la ficci¨®n, me contest¨® que si cont¨¢ramos la verdad, nadie se la creer¨ªa. Entonces empec¨¦ a colaborar en un proyecto de serie como The Wire a la valenciana y a recopilar documentaci¨®n, pero se frustr¨® y ha acabado siendo un libro¡±, relata el periodista del peri¨®dico El Mundo, que desempe?¨® su labor en Valencia hasta 2015 y cubri¨® varios casos. ¡°Al venir a trabajar a Madrid, contaba cosas de los esc¨¢ndalos de Valencia, de Francisco Camps [expresidente de la Generalitat] y su amiguito del alma, El Bigotes, y la gente alucinaba porque la realidad era incre¨ªble, aunque los valencianos ya la tuvi¨¦ramos interiorizada¡±, comenta. El libro, que ha redactado durante la pandemia, se suma a otros t¨ªtulos y tambi¨¦n pel¨ªculas y series que han retratado o se han inspirado completa o parcialmente en la corrupci¨®n valenciana.

Los sumarios, las noticias de diversos medios y las escuchas policiales son las principales fuentes de este ejercicio de s¨ªntesis de los esc¨¢ndalos por el que desfilan pol¨ªticos como el expresidente Eduardo Zaplana (investigado), la exalcaldesa Rita Barber¨¢ (fallecida en 2016), el exvicepresidente Juan Cotino (muerto en 2020) o la exconsejera Milagrosa Mart¨ªnez, condenada a prisi¨®n, al igual que el exconsejero Rafael Blasco, casado con Consuelo Ciscar, condenada por usar los recursos del museo que dirig¨ªa, el IVAM, para beneficiar la carrera de su hijo artista. Tambi¨¦n se destripan casos como la visita del papa Benedicto XVI a Valencia en 2006, que la trama G¨¹rtel aprovech¨® para sacar tajada, los sobrecostes de las obras de Santiago Calatrava o el enchufismo y la manipulaci¨®n generalizada en la antigua televisi¨®n valenciana Canal 9, incluidas sendas denuncias de abusos sexuales contra uno de sus mandamases, el exdirigente del PP Vicente Sanz.

¡°Yo quer¨ªa tambi¨¦n que el libro fuera un homenaje a la prensa local, de provincias, como se dice despectivamente en Madrid, porque se ha hecho un trabajo de denuncia alucinante. Aunque tambi¨¦n soy muy autocr¨ªtico: creo que fuimos c¨®mplices durante un tiempo y participamos de la fiesta. Al menos es lo que yo he visto¡±, asevera.