Una historia con final feliz que comenz¨® hace 20 a?os con el robo de un valioso cuadro

La base de datos (ID-Art) de la Interpol tiene registradas como robadas o desaparecidas 6.684 obras de arte en Italia. En el caso de Espa?a, el n¨²mero de piezas en busca y captura se eleva a 727. Ayer, en la Embajada de Italia en Madrid, la Polic¨ªa Nacional hizo entrega oficial a los Carabinieri de dos objetos de incalculable valor recuperados por los agentes espa?oles: un busto relicario de madera dorada del papa San Clemente, del siglo XVI, y un ¨®leo del XVII titulado El almuerzo. El emocionado embajador de Italia, Riccardo Guariglia, record¨® que la recuperaci¨®n solo fue posible ¡°por la estrecha colaboraci¨®n entre ambos pa¨ªses¡±, mientras que el director general de la Polic¨ªa Nacional, Francisco Pardo Piqueras, destac¨® que esta cooperaci¨®n se extiende tanto ¡°en la lucha contra la delincuencia, como en la protecci¨®n del patrimonio cultural¡±.

Esta historia de final feliz comenz¨® hace 20 a?os cuando unos ladrones sustrajeron de una colecci¨®n privada de Bolonia el cuadro, fechado en 1600 y de autor an¨®nimo, que representa a tres comensales jugando con un gato: una alegor¨ªa sobre el pecado y las tentaciones. De la obra nunca m¨¢s se supo, hasta que Interpol la localiz¨® dos d¨¦cadas despu¨¦s en una casa de subastas espa?ola. Las indagaciones de la Brigada de Patrimonio de la Polic¨ªa Nacional llevaron a los investigadores hasta una sociedad propiedad de tres anticuarios que, a su vez, lo hab¨ªan adquirido a un tercero. La transacci¨®n se hab¨ªa realizado sin permisos de exportaci¨®n.

Cuando el protestantismo era ya una realidad en Europa, la Iglesia cat¨®lica reaccion¨® con la Contrarreforma. Una forma de poner en valor a sus santos y, por tanto, de ganar terreno en predios reformadores, seg¨²n explica Roberto Alonso, profesor de la Universidad Complutense de Madrid y especializado en arte napolitano de los siglos XVI y XVII. De esta manera, comenz¨® una fren¨¦tica carrera en los talleres artesanales cat¨®licos para tallar obras de arte con el fin de que todos los templos luciesen sus respectivas reliquias en su interior. Tantas se crearon que, si en principio estas deb¨ªan estar hechas con materiales nobles como piedra o bronce, los artistas tuvieron que reducir sus expectativas y manufacturarlas en madera, luego pintada o recubierta de pan de oro o plata. Ese es el caso del Relicario del papa san Clemente, que se expon¨ªa en la iglesia del Ges¨², en la localidad italiana de Lecce. Aprovechando la soledad de los lugares de culto durante la pandemia de la covid, la obra ¨Dparte de un conjunto escult¨®rico¨D desapareci¨®.

Fue en esta ocasi¨®n la Brigada de Patrimonio Hist¨®rico de la Polic¨ªa Nacional la que localiz¨® esta joya artesanal gracias a una informaci¨®n procedente del Ministerio de Cultura y Deporte: el relicario estaba a la venta en una tienda de antig¨¹edades de Madrid. El Mando de Protecci¨®n del Patrimonio Cultural de los Carabinieri fue informado. El busto papal hab¨ªa sido adquirido en la feria de antig¨¹edades de Parma por un anticuario de El Rastro madrile?o. ¡°La Uni¨®n Europea tiene cosas muy buenas, pero tambi¨¦n la eliminaci¨®n de las fronteras, y el tr¨¢fico de obras de arte ilegal lo sufre en sus propias carnes¡±, se?ala Roberto Alonso.

En el acto de entrega de ayer, que ten¨ªa como lema ¡°El arte devuelto¡±, los polic¨ªas espa?oles e italianos luc¨ªan sus mejores galas. Se mascaba el orgullo profesional de ambos cuerpos. ¡°Hablar de patrimonio cultural es hablar de nuestra identidad y de los or¨ªgenes que nos explican. Es hablar de descubrir, en nuestra diversidad, de aquello que nos une como pa¨ªs y como europeos¡±, afirm¨® el comisario general de Polic¨ªa Judicial, Rafael P¨¦rez P¨¦rez. Roberto Riccardi, jefe del Mando de Protecci¨®n del Patrimonio Cultural de los Carabinieri, incidi¨®: ¡°El crimen no tiene fronteras, la polic¨ªa tampoco deb¨ªa tenerlas¡±. El embajador concluy¨® el acto recordando ¡°el papel fundamental de la diplomacia cultural entre Italia y Espa?a, dos pa¨ªses caracterizados por una fuerte afinidad, as¨ª como por una historia com¨²n que siempre ha encontrado en el arte y en la belleza un f¨¦rtil y rico campo de colaboraci¨®n¡±.

La Interpol ya ha eliminado de las base de datos estas dos piezas, pero ha incluido en los ¨²ltimos d¨ªas otras. En caso de Espa?a, un Incipit Liber, processionarius secundum consuetidinem ordinis, de 1526, un libro de 121 p¨¢ginas que fue impreso en Alcal¨¢ de Henares. En el caso de Italia, el Retrato de hombre sentado, del pintor Johannes Stephan Van Calcar (1499-1546). Fuentes de la Interpol recuerdan que cualquier informaci¨®n sobre estas u otras obras de arte es ¡°completamente confidencial, ni siquiera los datos particulares de acceso a las bases policiales en remoto quedan grabados¡±. Y es que la b¨²squeda contin¨²a, as¨ª pasen 20 a?os.