El coraz¨®n del primer emperador regresa de Portugal a Brasil para servir a Bolsonaro

El coraz¨®n del primer emperador de Brasil, Pedro I, que proclam¨® la independencia en 1822 y falleci¨® en 1834 en Lisboa, ya no es solo una reliquia. En los ¨²ltimos meses se ha convertido tambi¨¦n en un s¨ªmbolo pol¨ªtico reclamado por el presidente brasile?o, Jair Bolsonaro, para utilizarlo en la conmemoraci¨®n de los 200 a?os de la independencia. Se desconocen todos los detalles del papel que tendr¨¢ en las celebraciones el ¨®rgano del emperador, conservado en formol desde 1835 en la iglesia de la Lapa, en Oporto, pero el coraz¨®n estar¨¢ all¨ª para lo que disponga el Gobierno brasile?o desde este lunes, cuando est¨¢ previsto que aterrice en Brasilia en un avi¨®n de las Fuerzas Armadas brasile?as, custodiado entre otros por el alcalde de Oporto, Rui Moreira. Bolsonaro presidir¨¢ el martes una ceremonia de bienvenida.

Historiadores e intelectuales brasile?os han criticado la cesi¨®n temporal del coraz¨®n para satisfacer los deseos de Bolsonaro, que a pesar de lograr su objetivo con la reliquia no dud¨® en plantar al presidente de la Rep¨²blica de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa, durante su ¨²ltima visita al pa¨ªs con motivo de la Bienal Internacional del Libro de S?o Paulo, en la que Portugal era el pa¨ªs homenajeado. La cancelaci¨®n del almuerzo entre ambos mandatarios se produjo en respuesta a la decisi¨®n de Rebelo de Sousa de encontrarse tambi¨¦n con el expresidente Lula da Silva, que aspira de nuevo al cargo en las elecciones de octubre, que se desarrrollar¨¢n pocas semanas despu¨¦s del d¨ªa de la independencia, el 7 de septiembre. La ceremonia para recibir la reliquia en Brasilia incluir¨¢ honores de jefe de Estado, salvas militares y la guardia presidencial. Ser¨¢ expuesta al p¨²blico en Brasilia, en el palacio de Itamaraty, que dise?¨® Oscar Niemeyer como sede del Ministerio de Exteriores. Queda descartada una gira por el pa¨ªs, como pretend¨ªa el mandatario ultraderechista. Y el pr¨¦stamo ser¨¢ breve; la v¨ªscera regresar¨¢ a Oporto al d¨ªa siguiente del bicentenario.

El traslado del coraz¨®n de Pedro I, que protagoniz¨® en 1822 el llamado Grito de Ipiranga, que sell¨® la emancipaci¨®n, ser¨¢ el cl¨ªmax de un bicentenario de muy bajo perfil para un Gobierno que presume constantemente de patriotismo. Aunque el emperador ha pasado a la historia como el padre de la independencia brasile?a, ¨¦l ratific¨® la decisi¨®n adoptada cinco d¨ªas antes por su esposa, la emperatriz Leopoldina, ante el Gobierno del Brasil colonial. Al solicitar a Portugal el coraz¨®n, el ultraderechista brasile?o emula al Gobierno militar que presidi¨® las conmemoraciones del 150 aniversario de la independencia. La dictadura brasile?a pidi¨® entonces al r¨¦gimen de Oliveira Salazar los restos mortales de Pedro I, que desde entonces reposan ¡ªsalvo el coraz¨®n¡ª en S?o Paulo, cerca del lugar donde proclam¨® la emancipaci¨®n, pese a que el monarca expres¨® su deseo de ser enterrado en Lisboa.

Algunos, como el periodista y escritor Laurentino Gomes, consideraron ¡°ingenua y precipitada¡± la decisi¨®n de la C¨¢mara Municipal de Oporto de prestar la reliquia. ¡°Existen muchas probabilidades de que [el alcalde Rui Moreira] se convierta en un actor coadyuvante en una manifestaci¨®n golpista del presidente Jair Bolsonaro¡±, se?al¨® Gomes al diario P¨²blico. El d¨ªa de la independencia, el mandatario presidir¨¢ en Brasilia el desfile oficial, en el que se espera a Rebelo de Sousa. Pero, por la tarde, Bolsonaro pretende protagonizar con sus fieles una demostraci¨®n de fuerza en las calles como hizo el a?o pasado, cuando ante una multitud amenaz¨® con poner firme al Tribunal Supremo. La actitud que Bolsonaro pueda adoptar ese d¨ªa genera enorme nerviosismo entre sus cr¨ªticos. El presidente recorta distancias, pero est¨¢ a 15 puntos de Lula, favorito desde hace meses.

El ¨®rgano de don Pedro se conserva en un mausoleo cerrado en la iglesia de la Lapa. Son raras las ocasiones en las que se abre ¡ªla ¨²ltima ocurri¨® hace un lustro para el rodaje de un documental¡ª, aunque este fin de semana se exhibi¨® en el sal¨®n noble de la Hermandad de la Lapa, antes de ser transportado a Brasil. Unas 3.000 personas acudieron este s¨¢bado a la iglesia para ver la reliquia, seg¨²n la C¨¢mara Municipal de Oporto.

La traves¨ªa oce¨¢nica del coraz¨®n ocurre casi dos siglos despu¨¦s del viaje de ida del emperador, que cruz¨® el Atl¨¢ntico en barco en 1831 para desembarcar en Portugal y enfrentarse al ej¨¦rcito de su hermano Miguel por la corona lusa. Este periplo se narra en el documental A viagem de Pedro, dirigido por La¨ªs Bodanzky y estrenado este a?o. Don Pedro encarnaba el perfil de monarca liberal y constitucionalista mientras que su hermano defend¨ªa las viejas ideas del absolutismo. Su victoria permiti¨® que los derechos sucesorios portugueses pasaran a su hija Mar¨ªa, que rigi¨® el pa¨ªs con una Constituci¨®n liberal. Es, por tanto, un monarca con peso hist¨®rico tanto para Portugal como para su antigua colonia, ya que ¨¦l proclam¨® la independencia y rompi¨® lazos con su padre, el rey Jo?o VI.

En sus ¨²ltimas voluntades expres¨® su deseo de separar el coraz¨®n y el resto del cuerpo. ¡°En Portugal ning¨²n otro rey, que sepamos, tuvo esa idea. Pero ¨¦l era un Borb¨®n y conoc¨ªa la historia. Ten¨ªa conocimiento de que los reyes franceses, principalmente los Borbones, eran sepultados de modo diferente: el cuerpo en Notre-Dame y las entra?as en la iglesia de Saint-Denis¡±, explica el historiador portugu¨¦s Francisco Ribeiro da Silva, catedr¨¢tico jubilado de la Universidad de Oporto y miembro de la Hermandad de la Lapa. Pidi¨® que su cuerpo fuese enterrado en Lisboa y su coraz¨®n, en Oporto. Aunque inicialmente se cumpli¨® su voluntad, desde hace medio siglo su cad¨¢ver reposa en Brasil.

El emperador falleci¨® de tuberculosis a los 35 a?os en la misma habitaci¨®n del palacio de Lisboa en la que naci¨®, seg¨²n relata el citado Gomes en su imprescindible trilog¨ªa sobre la formaci¨®n de Brasil como naci¨®n. As¨ª describe a Pedro I: ¡°Un rey que luch¨® contra todo y contra todos, que hizo la independencia de un pa¨ªs, reconquist¨® otro en el campo de batalla, se esforz¨® para modernizar las leyes y las sociedades que gobern¨®, am¨® a muchas mujeres [¡­], fue un buen soldado [¡­], fue un adelantado a su tiempo y muri¨® joven¡±.