La nueva Tamara Rojo: su debut como core¨®grafa y sus primeros meses como directora del San Francisco Ballet
La gran estrella espa?ola de la danza presenta en Madrid su reinterpretaci¨®n del cl¨¢sico ¡®Raymonda¡¯ cinco meses despu¨¦s de asumir las riendas de una de las compa?¨ªas m¨¢s importantes de EE UU
La ¨²ltima vez que Tamara Rojo compareci¨® ante la prensa en el Teatro Real de Madrid fue para presentar la revolucionaria versi¨®n del cl¨¢sico Giselle coreografiada por Akram Khan para el English National Ballet de Londres (ENB), dirigida y bailada por ella misma. Era octubre de 2019 y ella era adem¨¢s la directora art¨ªstica de esa compa?¨ªa, una de las formaciones m¨¢s prestigiosas de Europa, cargo que ejerc¨ªa desde 2012, tras una fulgurante carrera internacional como bailarina que empez¨® en Madrid y culmin¨® como estrella del Royal Ballet. Tres a?os y medio despu¨¦s, Rojo ha vuelto este martes al Real y parece ¡ªpandemia aparte¡ª que ha habido un terremoto por medio, pues aquel curr¨ªculo de 2019 que parec¨ªa ya dif¨ªcil de superar ha dado otra vuelta de tuerca. No solo ha venido para mostrar por primera vez en Espa?a su primer trabajo como core¨®grafa, otra revisi¨®n de un cl¨¢sico, en este caso Raymonda, sino que ya no dirige el ENB sino el San Francisco Ballet, la formaci¨®n m¨¢s antigua de Estados Unidos y una de las m¨¢s importantes del pa¨ªs.
A sus 48 a?os, Rojo ha superado dos nuevas cimas en su carrera y ahora ¡°est¨¢ de nuevo en proceso de aprendizaje¡±, seg¨²n ha confesado esta ma?ana en la presentaci¨®n de Raymonda en el Real. Observando y adapt¨¢ndose, con prudencia pero con seguridad y sin miedo. Como ha hecho ella siempre todo. Y como ya demostr¨® en su etapa en el ENB, con una irrenunciable vocaci¨®n de innovaci¨®n. ¡°Tengo la suerte de que se trata de una compa?¨ªa con mucha tradici¨®n, pero a la vez iconoclasta. Mi antecesor, Helgi Tomasson, estuvo 37 a?os en el puesto y se ocup¨® de abrir la compa?¨ªa a nuevas voces de la danza, as¨ª que el p¨²blico est¨¢ acostumbrado a ver cosas nuevas. Quiz¨¢ lo que menos conozcan sea la danza contempor¨¢nea europea y el repertorio cl¨¢sico brit¨¢nico, as¨ª que por ah¨ª podr¨¦ aportar tambi¨¦n algo¡±, ha explicado.
Mientras se asienta en San Francisco, Rojo todav¨ªa se siente muy ligada al ENB y a las producciones que ha dejado en herencia. Sobre todo esta ¨²ltima, Raymonda, estrenada en Londres en enero de 2022 y cuyo proceso de creaci¨®n le regal¨® uno de ¡°los momentos m¨¢s felices¡± que vivi¨® en sus 10 a?os al frente del ENB: ¡°No solo porque es mi primera incursi¨®n como core¨®grafa, sino porque me permiti¨® trabajar muy cerca de esos bailarines a los que conoc¨ªa tan bien. Coincidi¨® tambi¨¦n que empezamos a ensayar despu¨¦s de los confinamientos, en condiciones algo limitadas pero con much¨ªsimas ganas de volver al escenario. Fue muy especial¡±.
Raymonda es uno de los grandes ballets rom¨¢nticos del repertorio cl¨¢sico, estrenado en 1898 en el teatro Mariinski de San Petersburgo, con m¨²sica de Alexander Glazunov y coreograf¨ªa original de Marius Petipa. ¡°Su partitura es una de las mejores composiciones para ballet que se han hecho nunca¡±, ha afirmado Rojo, recordando lo que Chaikovski dijo de ella: ¡°Si la hubiera escuchado antes de componer El lago de los cisnes, posiblemente no me habr¨ªa atrevido¡±. Pese a ello, no es un t¨ªtulo muy popular ni tampoco es demasiado representado por las principales compa?¨ªas de ballet del mundo. No por el reto t¨¦cnico que suponen para los bailarines sus vertiginosas piruetas, sino porque ¡°su narrativa es algo pobre¡±, como ha reconocido la propia Rojo en su comparecencia.
?Por qu¨¦ entonces escogi¨® esta obra para su debut como core¨®grafa? ¡°No era mi primera intenci¨®n. El proceso fue largo y empez¨® cinco a?os atr¨¢s del estreno. Estaba buscando un ballet cl¨¢sico que se pudiera actualizar con una historia en la que el p¨²blico brit¨¢nico pudiera sentirse representado y empec¨¦ a investigar en Raymonda. Tanto me impliqu¨¦ en ello que cuando empezamos a pensar en la compa?¨ªa a qui¨¦n le podr¨ªamos encargar la nueva coreograf¨ªa, la productora me dijo: ¡®Lo tienes tan claro que va a ser dif¨ªcil que alguien que no seas t¨² haga exactamente eso¡¯. Y as¨ª me lanc¨¦¡±, ha recordado.
El resultado de aquel largo proceso es una producci¨®n que se define como ¡°fastuosa¡± y que reinventa la historia original traslad¨¢ndola desde la ¨¦poca de las Cruzadas en la Francia medieval a la guerra de Crimea (1853-1856) y d¨¢ndole un papel m¨¢s activo a la protagonista, Raymonda, inspirada en la enfermera Florence Nightingale y las mujeres que la acompa?aron a asistir a los heridos en aquel conflicto. ¡°Las protagonistas de los ballets cl¨¢sicos son personajes pasivos a los que les pasan cosas. Yo he querido darle la vuelta a eso¡±, ha explicado Rojo. Hay bastantes pasajes coreogr¨¢ficos nuevos, pero tambi¨¦n muchos originales. ¡°?Originales de verdad!¡±, ha subrayado, recordando que acudi¨® a los registros originales de Petipa que se conservan en Harvard para reconstruirlos y trabajar desde esa base.
El Teatro Real ofrecer¨¢ esta semana cinco funciones de Raymonda de mi¨¦rcoles a s¨¢bado. Se alternar¨¢n tres elencos en los papeles protagonistas: Shiori Kase, Fernanda Oliveira y Emma Hawes (Raymonda); Isaac Hern¨¢ndez, Francesco Gabriele Frola y Aitor Arrieta (John de Bryan), y Fernando Carratal¨¢ Coloma, Eric Woolhouse y Daniel McCormick (Abdur Rahman). Al frente de la orquesta estar¨¢ Gavin Sutherland, responsable de la reorquestaci¨®n de partes de la partitura de Glazunov para adaptarlas a la nueva dramaturgia (excepto el viernes, que ser¨¢ sustituido por Alexander Ingram).
Babelia
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