Zeca Afonso: retrato ¨ªntimo del m¨²sico que dio el pistoletazo de salida a la Revoluci¨®n de los Claveles
La gallega Teresa Moure y la portuguesa Maria Jo?o Worm funden realidad y ficci¨®n en un c¨®mic que recorre las vivencias del compositor de ¡®Gr?ndola, Vila Morena¡¯
El 10 del mayo de 1972 el m¨²sico portugu¨¦s Zeca Afonso actu¨® en la residencia universitaria Burgo das Naci¨®ns, en Santiago de Compostela. Fue un evento organizado por el pujante movimiento estudiantil gallego, que con el acto quer¨ªa denunciar la dictadura franquista y contagiarse de los sonidos de liberaci¨®n del pa¨ªs vecino, donde el final del r¨¦gimen autoritario tambi¨¦n estaba pr¨®ximo. Seg¨²n distintas fuentes, Jos¨¦ Zeca Afonso (Aveiro, 1929-Set¨²bal, 1987) interpret¨® ese d¨ªa por primera vez el que despu¨¦s se convertir¨ªa en himno de la Revolu??o dos Cravos (la Revoluci¨®n de los Claveles), la m¨ªtica canci¨®n Gr?ndola, Vila Morena. El tema que dar¨ªa el pistoletazo de salida a la revoluci¨®n portuguesa del 25 de abril de 1974. Con guion de la gallega Teresa Moure, que prefiere no decir su lugar y fecha de nacimiento, e ilustraciones de la lisboeta Maria Jo?o Worm, el c¨®mic Balada do desterro (editado por aCentral Folque) narra ese acontecimiento, mezclando realidad y ficci¨®n en una biograf¨ªa ¨ªntima del m¨²sico nacido en 1929 y fallecido en 1987.
El c¨®mic comienza relatando las vivencias de Zeca en Angola y Mozambique; un trayecto vital que lo unir¨ªa de joven al anticolonialismo y su militancia de izquierdas mucho antes de su desembarco en la ciudad gallega. La trama de la historia, escrita en portugu¨¦s pero que mezcla las particularidades idiom¨¢ticas de los territorios que recorre, se presenta como un di¨¢logo abierto muy pr¨®ximo al teatro. ¡°Trabajamos en dos fases. Primero yo escrib¨ª y luego Maria Jo?o empez¨® a dibujar cuando ya estaba cerrado el guion¡±, cuenta Teresa Moure en un caf¨¦ universitario mientras llueve con intensidad en la capital gallega. El libro sorprende porque en cada cap¨ªtulo se aplican t¨¦cnicas diferentes, un trabajo que una vez entregado el guion tard¨® dos a?os en culminarse, y cuya minuciosidad se aprecia en cada p¨¢gina. ¡°Yo no hab¨ªa escrito nunca el guion de una novela gr¨¢fica¡±, cuenta Moure, ¡°pero s¨ª teatro. Cuando le entregu¨¦ el texto marcando mucho el di¨¢logo, Maria Jo?o entendi¨® perfectamente el contexto que yo estaba visualizando¡±.
El paso de Zeca por la ciudad gallega marc¨® profundamente a una generaci¨®n, hasta el punto de que hoy en d¨ªa ese tiempo compartido tiene un aura de simbolismo que excede lo ocurrido realmente. En ese sentido, Moure insiste en la propia dualidad que presenta Balada do desterro: ¡°La ficci¨®n puede ser m¨¢s verdad que la propia realidad. Hay un juego de espejos. Hay much¨ªsima documentaci¨®n sobre Zeca, cont¨¢bamos tambi¨¦n con el testimonio de personas reales, porque ¨¦l fue una persona con mucha influencia musical y pol¨ªtica en Galicia. Hab¨ªa gente aqu¨ª que sab¨ªa c¨®mo era, de qu¨¦ hablaba, qu¨¦ sent¨ªa, pero el n¨²cleo de la historia es ficci¨®n¡±.
Durante la conversaci¨®n con la autora est¨¢ presente el vigu¨¦s Ramon Pinheiro Almuinha, editor de aCentral Folque (Centro Galego de M¨²sica Popular). Con tono calmado, aporta su visi¨®n sobre el m¨²sico: ¡°Zeca es de los pocos personajes del imaginario contempor¨¢neo portugu¨¦s que forma parte de la memoria emocional de muchos gallegos, entre los que me incluyo. Su discograf¨ªa, como ocurre con m¨²sicos como Charlie Parker o Frank Zappa, se puede seguir revisitando y encontrar cosas nuevas. Era un poeta y consegu¨ªa que en los textos pasen m¨¢s cosas de las que en principio parecen¡±. Y explica Pinheiro sobre las particularidades del c¨®mic que han publicado: ¡°No quer¨ªamos hacer otro homenaje m¨¢s, quer¨ªamos enfrentarnos a un reto con esta novela gr¨¢fica. Zeca nunca par¨® de escuchar m¨²sica y tuvo un compromiso no panfletario con la pol¨ªtica, por eso tambi¨¦n nos parece un referente muy necesario¡±.
Una parte importante de ese reto fue desarrollar el personaje con una mirada intencionadamente feminista. ¡°Yo quer¨ªa ser fiel a mis trabajos anteriores. En mi proyecto narrativo siempre el protagonismo est¨¢ en las mujeres. En este caso hab¨ªa un inter¨¦s en feminizar la figura de Zeca Afonso¡±, explica Teresa Moure, que se expresa con frases contundentes y mirada fija para enfatizar la precisi¨®n de sus reflexiones. As¨ª, la mayor¨ªa de personajes que atraviesan la historia de Zeca en el c¨®mic son mujeres. ¡°Busqu¨¦ a las mujeres protagonistas de aquel tiempo y al encontrar a Beg¨®nia Moa pude contarlo desde una perspectiva que no fuera de poder, sino de alguien que fue su amiga¡±.
Moure pone como contraejemplo el habitual retrato heroico de figuras como el Che Guevara para explicar el camino que ella prefiri¨® transitar en su aproximaci¨®n al personaje: ¡°Todos aquellos relatos de hace a?os asociados a una imagen revolucionaria, aunque me resulta una palabra querida, se transformaron¡±. Y finaliza mientras en el exterior sigue diluviando con rotundidad: ¡°Aunque Zeca Afonso ten¨ªa las ideas socialistas de fraternidad, su legado es mucho mayor, es muy acorde con el cambio de mentalidad que hemos tenido en los ¨²ltimos a?os, porque es alguien que reivindica la ternura, la intimidad con sus fisuras y sus crisis, y eso es importante al revistar a Zeca con una mirada absolutamente feminista¡±.
'O povo ¨¦ quem mais ordena'
Cuando José Manuel Cerqueira Afonso dos Santos (conocido por José Afonso o Zeca) murió el 23 de febrero de 1987 con 58 años, su situación económica era muy precaria. Zeca fue un cantautor comprometido de obra y hechos. Su actitud vital hasta el final de sus días le alejó de premios y reconocimientos públicos, que siempre rechazó. Expulsado de la carrera de magisterio en 1968 por su oposición al régimen de Salazar, su vida desde entonces estuvo volcada en la música, aunque ya ejercía como tal desde antes.
Zeca grabó 14 discos y dio infinidad de conciertos, muchos de ellos para causas de la izquierda. Llevó como una carga incómoda ser el músico que había interpretado la canción que sirvió de contraseña para la revolución de los claveles. Su música, su poesía y su voz fueron mucho más que esa canción. Siempre reivindicó la influencia de la mirada africana y la lusofonía ambiental en sus letras. Cohabitó con un momento donde la canción de autor se había hecho un hueco importante en medio mundo, especialmente tras el mayo de 1968 francés. Pete Seeger, Mercedes Sosa, Daniel Viglietti, Paco Ibáñez o Luis Pastor le tuvieron como referente.
En su entierro, en la zona obrera y porturaria de Setúbal, el féretro, cubierto con una bandera roja, fue visitado por miles de personas que portaban claveles rojos, mientras sonaba su música de fondo. En Madrid también se organizó un sentido homenaje en el que actuaron, entre otros, Pablo Guerrero, Luis Pastor, Sordera, Javier Ruibal, Joaquín Sabina y Amancio Prada. Zeca exigió que nadie vistiera de luto por él, un formalismo que no encajaba en su mirada de una Terra da fraternidade.
Babelia
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