Dignidad, justicia y solidaridad, las tres palabras que incendiaron el premio de narrativa Dulce Chac¨®n

En la ¨²nica ventana de la planta baja de esta casa blanca estuvo el cuarto donde nacieron, el 3 de junio de 1954, las hermanas gemelas Dulce e Inmaculada Chac¨®n, junto a la Plaza Grande de la ciudad pacense de Zafra (17.000 habitantes). As¨ª lo recuerdan, en la fachada de lo que hoy es un hotel, dos placas y un poste informativo. Hijas del que fue alcalde de la localidad en el franquismo entre 1960 y 1965, Antonio Chac¨®n, ambas tomaron el camino de la literatura. Sin embargo, un c¨¢ncer se llev¨® a Dulce el 3 de diciembre de 2003, a los 49 a?os, cuando disfrutaba del reconocimiento como escritora gracias a su novela La voz dormida (2002). Tras su fallecimiento, se instituy¨® en Zafra, en 2004, un premio de narrativa en su honor, para obras cuyo ¡°valor fundamental¡± deb¨ªa ser ¡°la calidad literaria¡± y tambi¨¦n que estuviesen vinculadas a tres principios esenciales en su vida y obra: ¡°Dignidad, justicia y solidaridad¡±.

Sin embargo, la referencia a esas tres palabras fue eliminada de las bases cuando se convoc¨® el 11 de abril la 19? edici¨®n por el alcalde de Zafra, Juan Carlos Fern¨¢ndez Calder¨®n, del PP, lo que indign¨® a la familia de la autora. Hasta el punto de retirar el nombre del premio. Esto oblig¨® al alcalde a desconvocarlo el 8 de julio, y el pasado viernes, Dolores y Mar¨ªa, hijas de Dulce (su hermano Eduardo no pudo acudir) y la hermana de la escritora anunciaron en M¨¦rida que el certamen continuaba, pero desligado del Ayuntamiento de la villa donde naci¨® y que inspir¨® sus libros. Ahora lo convocar¨¢ la Diputaci¨®n de Badajoz (PSOE).

Adem¨¢s de la casa donde naci¨® Dulce, en Zafra hay otros lugares que conforman una ruta para quienes quieran acercarse a espacios importantes en su vida, cuando la calor lo permite estos d¨ªas. Como la plaza con su nombre, en la que varios de los azulejos de la placa han sido arrancados estos d¨ªas de pol¨¦mica, y su tumba. La de una mujer de izquierdas que se implic¨® en diferentes campa?as: contra la violencia machista, contra la guerra de Irak o para que los familiares de asesinados en la Guerra Civil pudieran recuperar los restos de sus seres queridos abandonados en cunetas. Como dijo Rosa Reg¨¤s, escritora fallecida esta semana, ¡°la suya fue una literatura comprometida, en la que se rebelaba contra lo que consideraba injusto¡±.

Otra parada de la ruta es el Ayuntamiento, un antiguo convento del siglo XVII que desde 1881 es sede del Consistorio, con un precioso patio con fuente. De un despacho sale el alcalde.

¡ª Se?or alcalde, sobre el premio Dulce Chac¨®n...

¡ª No voy a hacer m¨¢s declaraciones, ya lo he dicho todo. Doy la pol¨¦mica por zanjada. Si la familia de Dulce Chac¨®n cree que el premio es suyo, pues que se lo lleven.

Inma Chac¨®n se enter¨® de las nuevas bases en mayo, cuando acudi¨® a la feria del libro de Zafra. ¡°El alcalde lo cambi¨® unilateralmente, no nos comunic¨® nada¡±, dice por tel¨¦fono quien es albacea testamentaria y literaria de Dulce. ¡°El premio reconoc¨ªa a obras publicadas el a?o anterior que defendieran esos principios universales, que no son excluyentes. Solo quer¨ªamos que se restituyesen¡±. En el nuevo certamen se valorar¨ªa ¡°¨²nicamente la calidad literaria¡±.

?Qu¨¦ le llev¨® al alcalde a meterse en este jard¨ªn? Dos fuentes confirman a este peri¨®dico que todo se origin¨® en diciembre, en la ceremonia de entrega del premio a Jos¨¦ Ovejero. Su discurso irrit¨® a Fern¨¢ndez, un malestar que le lleg¨® ese mismo d¨ªa al escritor. ¡°Mi intervenci¨®n debi¨® de durar 25 minutos y las referencias pol¨ªticas fueron como un minuto. Dije que cuando el PP deja en manos de Vox la cultura, se producen censuras. Lo coment¨¦ a ra¨ªz de lo que hab¨ªa pasado con la representaci¨®n de Orlando, de Virginia Woolf, en Valdemorillo (Madrid)¡±, cuenta por tel¨¦fono.

¡°Es una dejaci¨®n de funciones cuando se permite al socio de coalici¨®n establecer lo que debe ser cultura y a qui¨¦n se financia. Es algo que tampoco admito en la izquierda. Pero creo que lo que m¨¢s molest¨® fue cuando dije que est¨¢bamos en una deriva mundial con el trumpismo, el bolsonarismo [por Jair Bolsonaro, expresidente brasile?o] y el ayusismo. Si la derecha en Espa?a se identifica con [Isabel D¨ªaz] Ayuso, tenemos un problema¡±, a?ade.

Ovejero, que este s¨¢bado public¨® un art¨ªculo en La marea sobre el tema, opina que ¡°la obligaci¨®n de quien habla en p¨²blico es la honestidad, decir lo que piensa¡±. ¡°Si me hubiera callado, habr¨ªa sido un hip¨®crita. Lo dije con educaci¨®n y no me preocup¨® que molestara. Ser alcalde no te habilita para decidir qui¨¦n puede hablar ni qu¨¦ puede decir. Aunque si es verdad que el cambio del premio fue a ra¨ªz de aquello, lo siento mucho¡±. El autor de Las vidas ajenas ha seguido este asunto ¡°con pena¡± porque es un premio que le hizo ¡°mucha ilusi¨®n¡±. ¡°Ten¨ªa aspectos bonitos, como estar dedicado a una escritora que admiro y la tradici¨®n del jurado popular¡±.

As¨ª, otra supresi¨®n anunciada por el alcalde fue la del jurado popular, que, aunque Chac¨®n reconoce que no estaba en las bases anteriores, se hab¨ªa articulado a trav¨¦s de ¡°cuatro grupos de lectura de Zafra, que eleg¨ªa cada uno una novela para optar al premio¡±. ¡°Era una forma de que la gente participase¡±, explica. Hab¨ªa adem¨¢s un jurado de expertos, que hac¨ªan sus propuestas, y un jurado final, que tomaba en cuenta la selecci¨®n de los otros dos jurados. Para Fern¨¢ndez, era un proceso ¡°opaco¡±.

El premio ten¨ªa una dotaci¨®n de 9.000 euros y una escultura del artista I?aki Mart¨ªnez, El Abrazo, ¡°que representaba el amor que sent¨ªa Dulce por Zafra¡±. Sin embargo, en las nuevas bases desaparec¨ªa la obra, se establec¨ªa que el ganador deber¨ªa ¡°estar presente en el acto de entrega; de lo contrario se le tendr¨¢ por renunciado al mismo¡±, y que tendr¨ªa que costearse el desplazamiento a Zafra y el alojamiento.

El 14 de mayo, cuando se anunciaron los finalistas, Fern¨¢ndez, que, iron¨ªas del destino, es autor de una biograf¨ªa sobre el padre de las hermanas Chac¨®n, subray¨® que quer¨ªa ¡°darle un nuevo aire¡± al certamen, ¡°m¨¢s centrado en Extremadura y vinculado al ¨¢mbito literario¡±, y calificaba el galard¨®n como ¡°el buque insignia de Zafra¡±.

Solo tres d¨ªas despu¨¦s, la familia de Chac¨®n public¨® un manifiesto en el que exig¨ªa la vuelta ¡°a las antiguas bases del premio¡±. Un escrito con la firma de personalidades de la cultura como los escritores Miguel Mun¨¢rriz, Nativel Preciado, Rosa Montero, Marta Sanz, Manuel Vilas, Javier Sierra, Clara S¨¢nchez, Julio Llamazares, Alejandro Palomas, Juan Cruz, Ana Rosetti, Aurora Luque y Jos¨¦ Luis Ferris, y ganadores del premio, como Ignacio Mart¨ªnez de Pis¨®n, Luis Landero, Fernando Aramburu, Cristina Fern¨¢ndez Cubas, Bel¨¦n Gopegui, Antonio Soler y Jos¨¦ Ovejero.

La respuesta del regidor fue un art¨ªculo en una revista en el que defend¨ªa su potestad para decidir las bases y un nuevo tipo de jurado, que tendr¨ªa ¡°libertad m¨¢xima, sin constre?irlo¡±. En plena pol¨¦mica, la consejera de Cultura de la Junta de Extremadura, gobernada por el PP, se lav¨® las manos: es una decisi¨®n del alcalde, apunt¨®.

Tras alg¨²n intento de mediaci¨®n fracasado, la familia envi¨® finalmente el 1 de julio una carta al alcalde [adelantada por EL PA?S], en la que retiraba el permiso para que Dulce Chac¨®n diera nombre al premio. Una semana despu¨¦s, Fern¨¢ndez dio la rueda de prensa en la que lo desconvocaba. En ella afirmaba que todo era ¡°una campa?a orquestada¡± en contra de su decisi¨®n y que el quid de la cuesti¨®n, los valores de dignidad, justicia y solidaridad, condicionaban al jurado, ¡°lo que atentaba contra el pluralismo¡±. Unos valores que, como hab¨ªa escrito Fernando Aramburu en un art¨ªculo en este peri¨®dico, no inducen precisamente ¡°a atracar bancos¡±.

Fern¨¢ndez argument¨® en su comparecencia que ¡°otros autores con otros principios, igual de v¨¢lidos, no podr¨ªan optar al premio¡±. De paso, carg¨® contra los gastos ejecutados en algunas ediciones anteriores y concluy¨® que como no estaba ¡°dispuesto a perder m¨¢s tiempo con esta cuesti¨®n¡± porque en Zafra hay ¡°muchas cosas m¨¢s importantes¡±, desconvocaba el premio para ¡°no desprestigiar la imagen¡± de la ciudad. Eso s¨ª, anunci¨® la convocatoria de otro para el a?o que viene a una obra no publicada.

El ¨²ltimo cap¨ªtulo de esta historia se escribi¨® el viernes, con un renovado Premio Dulce Chac¨®n de Narrativa Espa?ola. Adem¨¢s de la Diputaci¨®n (que pagar¨¢ los 9.000 euros) y la Junta de Extremadura, cada a?o se incorporar¨¢ un Ayuntamiento pacense distinto, en el que se entregar¨¢ el galard¨®n. ¡°En 2024 ser¨¢ M¨¦rida y en 2025 Almendralejo, donde nacieron nuestros padres¡±, anunci¨® Chac¨®n.

Adem¨¢s, habr¨¢ un jurado de expertos de 15 personas, ¡°entre ellos dos catedr¨¢ticos y seis cr¨ªticos literarios¡± (dos de EL PA?S). Despu¨¦s, un jurado final y dos populares (uno de Zafra y el otro de la ciudad que rote cada a?o) decidir¨¢n el ganador. La ceremonia ser¨¢ el fin de semana m¨¢s cercano a la fecha de fallecimiento de Dulce (3 de diciembre).

Zafra se ha quedado sin el premio Dulce Chac¨®n, pero Dulce Chac¨®n no se ha quedado sin su premio. Con todo, lo m¨¢s importante son sus libros, como el poemario Contra el desprestigio de la altura (1995), su biograf¨ªa de la torera Cristina S¨¢nchez, la novela Cielos de barro, premio Azor¨ªn en 2000, y sobre todo, La voz dormida, la ¨²ltima que pudo escribir. Una selecci¨®n de ellos est¨¢n a mano para quien se aloje en el hotel que fue su casa. En una esquina del comedor hay una balda con los t¨ªtulos y una placa: ¡°Rinc¨®n dedicado a Dulce Chac¨®n¡±.