Duelo de divas en la inauguraci¨®n de la temporada del Teatro Real con una exitosa ¡®Adriana Lecouvreur¡¯
Gran triunfo de Ermonela Jaho y El¨©na Garan?a en el estreno de la ¨®pera de Cilea en el coliseo madrile?o junto con la excelente direcci¨®n musical de Nicola Luisotti
Cuando aparece por primera vez en escena la protagonista de Adriana Lecouvreur, no escuchamos una melod¨ªa sino un perfume musical. En esta sutileza de la ¨®pera de Francesco Cilea insisti¨® el director de orquesta Nicola Luisotti, hace seis d¨ªas, durante su presentaci¨®n al p¨²blico del Teatro Real. Y el pasado lunes, 23 de septiembre, exprimi¨® toda la seducci¨®n sonora ...
Cuando aparece por primera vez en escena la protagonista de Adriana Lecouvreur, no escuchamos una melod¨ªa sino un perfume musical. En esta sutileza de la ¨®pera de Francesco Cilea insisti¨® el director de orquesta Nicola Luisotti, hace seis d¨ªas, durante su presentaci¨®n al p¨²blico del Teatro Real. Y el pasado lunes, 23 de septiembre, exprimi¨® toda la seducci¨®n sonora de estos arom¨¢ticos arpegios de violines y arpas, durante el estreno en el coliseo madrile?o de este famoso t¨ªtulo, de 1902, como apertura de la temporada 2024-25.
Ese detalle musical conect¨® con el inicio de Io son l¡¯umile ancella, el aria m¨¢s popular de Adriana Lecouvreur. Tambi¨¦n fue la primera gran ovaci¨®n de la noche para Ermonela Jaho, que encarnaba a la gran actriz de la Com¨¦die-Fran?aise del siglo XVIII, a los cinco minutos del inicio de la representaci¨®n. La soprano albanesa exhibi¨® una extraordinaria paleta de matices con admirables filados que coron¨® con un asombroso regulador. Una encarnaci¨®n tan humana como intimista que volvi¨® a brillar en el acto final, con un bell¨ªsimo Poveri fiori, antes de morir respirando el veneno en un ramo de violetas.
Jaho fue la gran triunfadora de la noche, a pesar de no alcanzar la misma altura en los dos actos centrales. En ambos se enfrenta a su rival por el amor de Maurizio, la princesa de Bouillon, que encarn¨® la mezzosoprano El¨©na Garan?a, y fue la otra triunfadora en este particular duelo vocal femenino que es la ¨®pera de Cilea. La famosa cantante letona, que debutaba en una ¨®pera del Teatro Real, irrumpi¨® en el dram¨¢tico inicio del segundo acto, en Acerba volutt¨¤, con un imponente dominio de registros extremos y prosigui¨® exhibiendo el esmalte l¨ªrico de su fraseo en la arieta O vagabonda.
El retrato que hizo Garan?a de esta mujer despechada, celosa y vengativa fue impecable. Y no perdi¨® un ¨¢pice de elegancia en el tercer acto frente al momento menos logrado de Jaho que no encontr¨® la autoridad dram¨¢tica en su recitaci¨®n de Fedra de Racine. No obstante, lo mejor de la noche lo escuchamos al final del segundo acto, en un impresionante d¨²o Sia! Non risponde, convertido en un progresivo y ag¨®nico duelo por el amor de un mismo hombre idealmente inflamado por la orquesta.
Los dos protagonistas masculinos quedaron un poco por debajo. El bar¨ªtono siciliano Nicola Alaimo dio vida a un excelente y bondadoso Michonnet, aunque no termin¨® de encontrar los matices verdianos que requiere el personaje. Por su parte, el tenor estadounidense Brian Jagde exhibi¨®, como Maurizio, el brillo y el poder¨ªo de sus agudos, aunque sus aciertos fueron menores en las abundantes medias voces y en su pronunciaci¨®n del italiano.
Entre los actores secundarios despunt¨® el brillante Abate di Chazeuil interpretado por el tenor bilba¨ªno Mikeldi Atxalandabaso, que sobresali¨® en el inicio del tercer acto. Tambi¨¦n hay que destacar la buena actuaci¨®n del bajo italiano Maurizio Muraro, que interpret¨® al pr¨ªncipe de Bouillon, junto al magn¨ªfico cuarteto de actores de la Com¨¦die-Fran?aise formado por David Lagares, Vicen? Esteve, Sylvia Schwartz y Monica Bacelli. Los seis brillaron en el dif¨ªcil sexteto bufo del primer acto.
Una partitura ecl¨¦ctica
Luisotti fue el tercer triunfador de este exitoso estreno. Su direcci¨®n encontr¨® la efervescencia y la flexibilidad en el primer y tercer acto, pero no perdi¨® intensidad ni expresividad en los actos segundo y cuarto, que abri¨® con una bell¨ªsima interpretaci¨®n del Andante triste. Toda una lecci¨®n de italianit¨¤ en una ecl¨¦ctica partitura llena de gui?os del melodrama franc¨¦s y de aromas wagnerianos. El Coro Titular del Teatro Real ofreci¨® una buena actuaci¨®n en sus puntuales intervenciones y la Orquesta mostr¨® un excelente rendimiento con destacados solos de la concertino Gergana Gergova.
Al final, tambi¨¦n hubo aplausos para el equipo esc¨¦nico responsable de la reposici¨®n, encabezado por Justin Way, de esta famosa producci¨®n de David McVicar. Se estren¨® en 2010 en la Royal Opera House de Londres, dentro de una coproducci¨®n con las ¨®peras de Viena, Par¨ªs y San Francisco junto al Liceu de Barcelona, en donde se repuso hace tres meses. Una puesta en escena que ha contribuido a un curioso renacer actual de esta ¨®pera de Cilea, que tambi¨¦n ha viajado a La Scala de Mil¨¢n o a la Metropolitan de Nueva York.
La propuesta esc¨¦nica constituye un exquisito homenaje a la escena francesa del siglo XVIII. Un atractivo teatro de madera giratorio dise?ado por Charles Edwards que se va transformando a lo largo de la acci¨®n para ubicarnos entre bastidores y nos permite vislumbrar la representaci¨®n de Bajazet, de Racine. La escenograf¨ªa misma deriva en el pabell¨®n Grange-Bateli¨¨re, del segundo acto, en el palacio del pr¨ªncipe de Bouillon, del tercero, o se transforma en su parte trasera desnuda para representar la casa de Adriana, en el cuarto. Cada ambiente se apoya en la iluminaci¨®n de Adam Silverman, que imita las velas, y en el atractivo vestuario de ¨¦poca dise?ado por Brigitte Reiffenstuel. Adem¨¢s, destaca un ballet de aroma historicista para el tercer acto, coreografiado por Andrew George.
Sin embargo, la propuesta de McVicar no est¨¢ exenta de sus habituales gui?os metateatrales. Un aspecto muy apropiado en una ¨®pera que conecta la actuaci¨®n con la vida de manera natural. Destac¨® en el final del ¨²ltimo acto, cuando vemos sobre el escenario a los antiguos colegas de la gran actriz de la Com¨¦die-Fran?aise para honrarla tras su muerte, mientras se apaga el tr¨¦molo de la cuerda y los arpegios del arpa.
Esta inauguraci¨®n de la nueva temporada ha vuelto a contar con la presencia de los Reyes, el ministro de Cultura, la presidenta de la Comunidad de Madrid y el alcalde de la capital. Y ha servido tambi¨¦n como homenaje al tenor Jos¨¦ Carreras en conmemoraci¨®n del 50? aniversario de su interpretaci¨®n de esta ¨®pera en el Teatro de la Zarzuela. Fue en junio de 1974, dentro del XI Festival de ?pera de Madrid, y en compa?¨ªa de la inolvidable Montserrat Caball¨¦.
Adriana Lecouvreur
Música de Francesco Cilea. Libreto de Arturo Colautti. Ermonela Jaho, soprano (Adriana Lecouvreur); Brian Jagde, tenor (Maurizio), Nicola Alaimo, barítono (Michonnet), El¨©na Garan?a, mezzosoprano (La princesa de Bouillon), Maurizio Muraro, barítono (Príncipe de Bouillon), Mikeldi Atxalandabaso, tenor (Abate di Chazeuil), David Lagares, barítono (Quinault), Vicenç Esteve, tenor (Poisson), Sylvia Schwartz, soprano (Mademoiselle Jouvenot), Monica Bacelli, mezzosoprano (Mademoiselle Dangeville). Coro y Orquesta Titulares del Teatro Real. Dirección musical: Nicola Luisotti. Dirección de escena: David McVicar. Reposición: Justin Way. Teatro Real, 23 de septiembre. Hasta el 11 de octubre.