Liv Str?mqvist: ¡°El trauma infantil se ha convertido en fen¨®meno de masas¡±

Liv Str?mqvist es brillante, para qu¨¦ andarnos con rodeos. Podemos a?adir muchas cosas a esta frase, como su capacidad para manejar la mejor filosof¨ªa del momento (Bauman, Zizek, Eva illouz o Byung-Chul Han), mezclarla con la basura de las redes y exponer en formato comic c¨®mo esta sociedad ha convertido los sentimientos en negocio. Pero volveremos b¨¢sicamente a lo mismo: brillante. Su nuevo libro, La voz del or¨¢culo (Reservoir Books) pone en la diana a los expertos, personal coaches y repartidores de consejos que hoy gobiernan nuestras vidas. Str?mqvist, sueca nacida en Lund en 1978, tambi¨¦n hace podcast.

Pregunta. Arranca el libro con un consejo: ¡°No sigas ning¨²n consejo¡±. ?No es contradictorio?

Respuesta. Es para que nos los pensemos dos veces. Los consejos y la constante mejora de la vida se han convertido en mercanc¨ªa. Los tenemos para todo: para tu rutina de belleza, tu cara, tus cremas, tus costumbres, tu forma de trabajar, tu dieta, criar a los hijos, c¨®mo sentirte mejor... Hay una industria de consejos sin fin para que te sientas bien todo el tiempo en la que alguien siempre te est¨¢ vendiendo algo, creando la necesidad.

P. ?Por qu¨¦?

R. La naturaleza del capitalismo incluye encontrar nuevos nichos de explotar. Y vivimos un tiempo en que el negocio puede llegar a zonas en las que no estaba. ?Se puede hacer negocio con tantas cosas! En los ¨²ltimos meses se han extendido en redes los autoproclamados ¡°coaches mentales¡± que te aconsejan, te dicen qu¨¦ pensar sobre distintas cosas y su objetivo es tener el mayor n¨²mero posible de seguidores. Veo una tendencia: ahora hablan de los traumas infantiles y explican que todo puede ser consecuencia de ellos y que necesitas un mental coach para curarlos. Hay gente traumatizada que necesita ir al psic¨®logo, claro, pero lo que est¨¢ ocurriendo es que consiguen convertirlo en un fen¨®meno de masas. Para ellos, cuanta m¨¢s gente se sienta as¨ª, mejor, consiguen m¨¢s seguidores y likes, ese es su incentivo bajo una l¨®gica econ¨®mica. El peligro es que la gente se est¨¢ viendo a s¨ª misma como v¨ªctimas, ah¨ª entran en el algoritmo y se dedican a escuchar ese tipo de cosas. La combinaci¨®n de redes, Internet y capitalismo crea una cultura que hay que analizar cr¨ªticamente y es lo que intento en mi libro.

P. ?Las redes, la cultura de likes nos hacen da?o?

R. Ha tra¨ªdo muchas consecuencias y muy diferentes, cambios muy profundos en la sociedad, en c¨®mo nos relacionamos, y y creo que no podemos ver a¨²n todas las consecuencias. Algunas son positivas, otras negativas, pero es importante debatir y analizarlo cr¨ªticamente.

P. Nos trae una reflexi¨®n de Bauman: Antes nos culp¨¢bamos por pasarlo bien y ahora nos culpamos por no pasarlo bien. ?Qu¨¦ ha ocurrido para este cambio enorme?

R. Son muchas cosas. Una es la marketizaci¨®n, la tendencia a vender todo, incluida la diversi¨®n. Un anuncio te muestra a gente de vacaciones disfrutando con cierto tipo de ropas o refrescos y no apelan a lo que te est¨¢n vendiendo, que es la ropa o el refresco, sino a la amistad, al disfrute. Aumenta la presi¨®n para sentir alegr¨ªa.

P. ?Es un resultado de capitalismo o tambi¨¦n del fin del papel de la religi¨®n?

R. S¨ª, tambi¨¦n, se acab¨® esa mirada religiosa de que es pecado disfrutar de algo y eso es bueno. Pero hay otra amenaza y es aplicar a los sentimientos la l¨®gica de los logros. Ver la alegr¨ªa como un logro, como un objetivo que puedes planear y controlar, te provoca a la vez la presi¨®n para conseguirlo. Abordas as¨ª la alegr¨ªa de una forma tan err¨®nea que pr¨¢cticamente desaparece. Se ve en las redes, donde la gente retrata el placer y la felicidad bajo el reino de control y siempre pensado en que alguien te est¨¢ mirando.

P. Tambi¨¦n destaca que hemos olvidado el dolor, la muerte, la decepci¨®n.

R. En la sociedad actual es dif¨ªcil procesar el hecho horrible de que somos mortales. La teor¨ªa de Bauman es que la soluci¨®n para la modernidad es parcelar este miedo a la muerte en partes peque?as e intentar controlarlas: lo que como, lo que hago para estar sano... Luchar contra la muerte se ha convertido en el sentido de la vida. Antes se ve¨ªa a la muerte como un ahorcado, ahora como un carcelero que te vigila todo el tiempo.

P. ?Por qu¨¦ novela gr¨¢fica?

R. Empec¨¦ de modo muy natural, como una forma de expresarme. Yo estudi¨¦ pol¨ªticas, sociolog¨ªa y filosof¨ªa en la universidad, trabajo en la radio en programas de humor y he intentado escribir un libro solo con texto, pero siempre se convierte en comic. Adem¨¢s vivimos una era en que nos comunicamos mucho a trav¨¦s de las fotos y el c¨®mic lo utiliza. Si voy a debatir sobre las redes contigo, incorporar la imagen es efectivo. Algo pasa cuando lees y ves algo dibujado, se ralentiza todo. El comic es una forma interesante de debatir.

P. Usted vivi¨® estudi¨® en Salamanca un semestre. ?Cu¨¢l es su recuerdo de Espa?a?

R. Lo pas¨¦ genial, tantos estudiantes, fiestas, discotecas... Ten¨ªa 19 a?os. En Suecia todo cierra muy pronto, pero all¨ª hab¨ªa una discoteca que cerraba a las 8.00, as¨ª que pod¨ªa estar toda la noche fuera, luego dormir una hora y volver a clase (r¨ªe).

P. ?O sea que no aprendi¨® espa?ol, pero s¨ª a bailar?

R. Eso, exactamente, s¨ª (y vuelve a re¨ªr, tras hacer toda la entrevista en ingl¨¦s).