Tambi¨¦n en la adversidad

El camino del Mundial se construye sobre las situaciones favorables y la adversidad. Tarde o temprano, los dos factores se presentan a los equipos con pretensiones. Espa?a se encontr¨® con todos los factores a su favor en el encuentro con Ucrania: goles r¨¢pidos y la expulsi¨®n de un jugador rival. El juego fue tan bueno como la satisfacci¨®n de la goleada. Frente a T¨²nez se enred¨® en el cl¨¢sico partido lleno de problemas. Recibi¨® muy pronto el tanto de Minari y el equipo se oblig¨® a un esfuerzo descomunal. En medio de las dificultades, jug¨® bien casi siempre, en los malos y en los buenos tiempos. Jug¨® con madurez, no perdi¨® la onda y recibi¨® la ayuda necesaria del entrenador. Luis hizo los cambios perfectos. La selecci¨®n sali¨® reforzada de un encuentro m¨¢s que complicado.

El f¨²tbol espa?ol es ciclot¨ªmico por naturaleza. Pasa de la euforia al des¨¢nimo con demasiada frecuencia. Algunos datos del encuentro con T¨²nez invitaron a la duda, no al des¨¢nimo. Los errores defensivos se multiplicaron en los primeros minutos. Eso se paga con sangre en los Mundiales. El gol tunecino fue un ejemplo de errores encadenados. Se resbal¨® Luis Garc¨ªa, jugador que se equivoca en lo sencillo —en los controles sobre todo— y acierta en lo imposible. Tambi¨¦n se equivoc¨® Puyol, siempre amparado por sus facultades f¨ªsicas. Est¨¢ acostumbrado a jugar al borde del abismo y no suele fallar. Pero esta vez midi¨® mal en el contragolpe tunecino. Pablo fue blando. Dej¨® pensar a Jaziri, mala cosa en el ¨¢rea. Tampoco es bueno que el portero rechace el bal¨®n hacia el medio, aunque Casillas apenas tuvo tiempo de poner las manos en el remate de Manari. Sali¨® mal todo lo que pod¨ªa salir mal.

La jugada dej¨® secuelas en la defensa. Tard¨® en reponerse del impacto. Puyol pareci¨® especialmente afectado. Pern¨ªa tuvo un ataque de desconfianza que super¨® con dificultades. Cualquier contragolpe de T¨²nez asom¨® el peligro, grave s¨ªntoma en un Mundial. La vigilancia de Buazizi sobre Xavi tambi¨¦n pes¨® sobre el partido. Xavi tard¨® en encontrar las vueltas al problema. Pero tambi¨¦n manifest¨® su categor¨ªa en varias acciones. Es un futbolista extraordinario. Espa?a reaccion¨® con algo de ansiedad, pero no perdi¨® los papeles. Mantuvo su estilo en la adversidad, signo de madurez que sirvi¨® para medir los recursos del equipo. En ese cap¨ªtulo, Xabi Alonso estuvo insuperable. Jug¨® con criterio y estilo, un l¨ªder en toda regla.

Espa?a jug¨® bien en el primer tiempo, pero sac¨® un mal resultado. A Luis le tocaba mover pieza. Estaba claro que el equipo necesitaba el punto de profundidad. No necesitaba prisas, ni pelotazos al ¨¢rea. Los cambios fueron irreprochables. Sustituto de Villa, Ra¨²l se enchuf¨® con rapidez. Colabor¨® en el medio campo y recuper¨® la cualidad que le ha distinguido toda la vida: la astucia en el ¨¢rea. Marc¨® el tanto del empate, lo celebr¨® con el entusiasmo de un juvenil. Ra¨²l fue importante en la reacci¨®n del equipo. Cesc, tambi¨¦n. Con apenas 19 a?os, tiene maneras de gran jugador. Est¨¢ en la elaboraci¨®n y en la finalizaci¨®n. Dej¨® pasar en el primer gol —estaba en posici¨®n de remate— y dibuj¨® un pase exquisito a Torres en el segundo tanto. Cesc es una garant¨ªa de gran rendimiento en cualquier partido, en cualquier competici¨®n. El ingreso de Joaqu¨ªn funcion¨®. Espa?a no juega con extremos, pero eso no les inhabilita. En Espa?a hay varios y buenos. Joaqu¨ªn interpret¨® perfectamente su papel. Se coloc¨® en la raya y comenz¨® un duelo de habilidad y rapidez con el lateral. Gan¨®. Y por ah¨ª gan¨® la selecci¨®n. Gran parte del m¨¦rito le corresponde a Luis. Si el equipo logr¨® sobreponerse a la adversidad, se debi¨® en buena medida a los cambios.

Torres coron¨® el partido con un gran gol. Cada vez est¨¢ m¨¢s cerca de las posibilidades que se le imaginan. Su crecimiento es necesario en un equipo que no terminaba de encontrar este tipo de delantero: r¨¢pido, potente, con una buena cuota de habilidad. Torres, que ha tenido problemas para definir, termin¨® la jugada como un maestro. Regate largo y toque con el interior del pie derecho. Una belleza de gol por el pase y por el cierre. Plet¨®rico de confianza, Torres se convirti¨® en una pesadilla para la defensa de T¨²nez. Su partidazo concret¨® la buena actuaci¨®n de Espa?a, que aprendi¨® una lecci¨®n t¨ªpica de los Mundiales. El camino es largo y siempre hay dificultades. Los buenos equipos se sobreponen. Es lo que hizo la selecci¨®n.