Gisela Pulido: "Sigo siendo una ni?a"

Los dioses del viento y del mar, Eolo y Poseid¨®n, decidieron hacer un pacto en agosto de 2002. Una ni?a de ocho a?os jugaba en la playa con una cometa, pero so?aba con navegar sobre las olas, y con volar muy alto al mismo tiempo. As¨ª que los dioses se pusieron de acuerdo, y la ni?a comenz¨® a practicar kiteboard, un novedoso deporte extremo que combina la habilidad sobre una tabla de surf con el manejo de la cometa. Poco tiempo despu¨¦s, con s¨®lo 10 a?os, Gisela Pulido (Premi¨¤ de Mar, 1994) se convirti¨® en la campeona del mundo m¨¢s joven del orbe. Todo se lo debe a su padre, Juan Manuel, que practicaba windsurf, y enseguida se sinti¨® atra¨ªda por lo que hac¨ªa, claro, que no es dif¨ªcil para alguien que aprendi¨® a nadar con un a?o, casi al mismo tiempo que a andar.

Gisela vive en Tarifa (C¨¢diz), un para¨ªso para los windsurfistas, donde puede aprovechar las mejores rachas de aire del Mediterr¨¢neo. Hace un tiempo tom¨® la decisi¨®n de trasladarse a vivir all¨ª junto a su padre, dejando lejos su Catalu?a natal, porque all¨ª no pod¨ªa entrenarse correctamente.

Cada tarde, al salir del instituto -estudia 3? de ESO- pasa dos horas y media embutida en su traje de neopreno, desliz¨¢ndose por el agua con una tabla especial, sujeta con su arn¨¦s a la cometa, y ensayando todos los trucos -piruetas en el argot de este deporte- que pondr¨¢ en pr¨¢ctica en los campeonatos mundiales. All¨ª, en las mejores playas del planeta, se re¨²ne con rivales mayores que ella a las que casi siempre derrota. "Me llevo muy bien con ellas, no les molesta que una ni?a las supere", dice. A todas, excepto a una, la brasile?a Bruna Kajiya, su gran rival. Aunque Gisela tampoco tiene buen perder. "He llegado a llorar, pero mi padre me ense?¨® que un campe¨®n tiene que saber perder, y ahora lo llevo por dentro", confiesa.

Madurar con rapidez

El vivir en un mundo de adultos, entre periodistas, patrocinadores y eventos, le ha hecho madurar con rapidez. "He conocido muchas culturas, ni?os pobres, ni?os ricos. Viajar es lo que me ha hecho madurar m¨¢s deprisa que a los dem¨¢s ni?os de mi edad. Aunque en el fondo sigo siendo una ni?a, creo que aunque tengamos 30 a?os, todos tenemos una parte de ni?os", explica.

El ¨¦xito no se le ha subido a la cabeza, a pesar de que si escribes su nombre en Google aparecen m¨¢s de 65.000 entradas y de que tiene un club de fans en Facebook con 66 miembros. "Me gustar¨ªa ser como Fernando Alonso, aunque no poder salir a la calle porque todo el mundo te para y te pide aut¨®grafos debe de ser un rollo", dice.

Gisela Pulido: "Cuando no hay viento es un rollo"