Recital azulgrana
El Bar?a se impone con un f¨²tbol de fantas¨ªa y un golazo de Pedro a un Depor melanc¨®lico
Abatido el Madrid, al Barcelona le ha dado por goller¨ªas, por mostrar su perfil m¨¢s art¨ªstico, la mejor manera de responder a la presi¨®n . Actuaron ayer los azulgrana de forma muy fina y acad¨¦mica, exquisita, siempre atrevida, sorprendente si se tiene en cuenta que se est¨¢n jugando la Liga y se supone que en tales circunstancias pesa la presi¨®n. Hasta los goles resultaron est¨¦ticamente impecables, sobre todo el de Bojan y despu¨¦s el de Pedro, un delantero que se supera a cada jornada. Anoche meti¨® un gol desde casi medio campo con un toque prodigioso: le dio de primera, sin parar, a un bal¨®n fuerte rechazado por Aranzubia. La comba que describi¨® la pelota hasta besar la red result¨® tan po¨¦tica como la propia historia del humilde delantero canario.
BARCELONA 3 - DEPORTIVO 0
Barcelona: V¨ªctor Vald¨¦s; Dani Alves, Piqu¨¦, M¨¢rquez, Maxwell; Xavi (Busquest, min.77), Tour¨¦ Yaya, Jeffr¨¦n (Keita, min.51); Messi, Bojan (Henry, min.72) y Pedro.
Deportivo: Aranzub¨ªa; Manuel Pablo, Lopo, Pisku, Laure; Pablo ?lvarez (Juan Dom¨ªnguez, min.53), Juan Rodr¨ªguez, Antonio Tom¨¢s, Sergio (Iv¨¢n P¨¦rez, min.85), Guardado; y Riki (Lassad, min.70).
Goles: 1-0, min.15: Bojan. 2-0, min.69: Pedro. 3-0, min.71: Tour¨¦.
?rbitro: Jos¨¦ Luis Paradas Romero, del comit¨¦ andaluz. Mostr¨® cartulina amarilla a Lopo (min.13), Pablo ?lvarez (min.30) y Manuel Pablo (min.79).
Incidencias: partido correspondiente a la trig¨¦simo segunda jornada de la Liga, disputado en el Camp Nou ante 75.897 espectadores, seg¨²n datos ofrecidos por la organizaci¨®n. Se guard¨® un minuto de silencio en memoria del periodista deportivo c¨¢ntabro Jos¨¦ Manuel Gozalo, que falleci¨® esta semana en Santander.
Los goles fueron preciosos, se contaron acciones excelentes y la noche result¨® estupenda. Hay que tener mucho temple para jugar de forma tan serena y exacta, divertida y destensada, como lo hizo ayer el Barcelona en una jornada valle, a la salida del cl¨¢sico y camino del derby, momento en que se supone conviene economizar esfuerzos m¨¢s que imponer una velocidad f¨ªsica y mental que fue imposible para un desalmado Deportivo. Las alineaciones han dejado de ser noticia mientras est¨¦n Xavi, Messi y Pedro, tres futbolistas en un momento de forma excelente.
Al calor de una hinchada muy militante en una jornada laborable, el Bar?a alcanz¨® pronto el ¨¢rea de Aranzubia. Atacaban los azulgrana con un pelot¨®n de delanteros ligero, din¨¢mico y ortodoxo: Pedro y Jeffren abr¨ªan muy bien el campo mientras Messi se situaba por detr¨¢s de Bojan y Xavi manejaba la sala de m¨¢quinas con un ojo cl¨ªnico prodigioso. Las salidas de Piqu¨¦ y las llegadas de Alves y Maxwell, acabaron por desestabilizar a la zaga del Deportivo, un equipo melanc¨®lico, desbravado, entregado a su portero. Imposible defender a ocho barcelonistas.
Al cuarto de hora, Bojan ya hab¨ªa marcado un gol despu¨¦s de un buen control y un ajustado remate, el mejor punto y final al pase sensacional de Xavi. El volante se divierte m¨¢s que nunca cuando le ponen un par de extremos y un delantero centro tan aplicados como Pedro, Jeffren y Bojan. Los atacantes barcelonistas eran balines y el juego interior y exterior del equipo desbord¨® a los deportivistas, redimidos por su portero y aliviados por la falta de punter¨ªa azulgrana. Al Barcelona s¨®lo le falt¨® precisi¨®n para rematar el partido cuando lo tuvo en franquicia. Las ocasiones se suced¨ªan y el f¨²tbol pintaba tan bonito que a menudo parec¨ªa que el Bar?a jugaba a billar.
Messi y Alves incluso se montaron un partido por su cuenta, plagado de detalles t¨¦cnicos, de lujosas combinaciones, de toques sublimes, de continuas paredes. Hubo un pase interior del argentino al que respondi¨® el brasile?o con un control con la cabeza y un remate de chilena que conmocion¨® a la afici¨®n hasta que la pelota dio en el travesa?o. El refinamiento en ataque fue excesivo si se atiende a la escrupulosa tarea defensiva. Presionaron mucho y bien los barcelonistas, seguros y concentrados, verticales hasta llegar el ¨¢rea, momento en que se adornaron demasiado, como si dieran la victoria por descontada. Mal asunto porque incluso el mejor de los equipos est¨¢ expuesto a un accidente, a un error, a una tonter¨ªa, a una decisi¨®n.
Tuvo suerte por ejemplo el Bar?a de que el ¨¢rbitro no pitara penalti de Jeffren a Lopo. Las pocas noticias del Deportivo se produc¨ªan a la salida de los c¨®rners botados por los azulgrana, rebuscados y poco efectivos. El Bar?a record¨® por momentos la mejor versi¨®n mostrada en Londres ante el Arsenal. El equipo se despleg¨® con una t¨¦cnica tan depurada, con una multiplicaci¨®n de pases y asociaciones tan art¨ªsticas, que el partido se convirti¨® en una exhibici¨®n. ?nicamente sobraba la porter¨ªa o faltaba un segundo gol para culminar la fiesta. Y el tanto lleg¨® despu¨¦s de pasar un mal rato. El Bar?a perdi¨® encanto y gas, no hab¨ªa manera de que volviera a encontrar el hilo del juego, como si su duende se hubiera quedado en el vestuario durante el descanso, y ahora compareciera un equipo sin fluidez, excesivo en la conducci¨®n.
La monoton¨ªa s¨®lo se pod¨ªa romper con una jugada el¨¦ctrica como la que arm¨® Vald¨¦s: el portero sac¨® r¨¢pido y en largo para la carrera de Alves, Aranzubia despej¨® antes de la llegada del lateral y el bal¨®n sali¨® en direcci¨®n al c¨ªrculo central, y all¨ª compareci¨® Pedro para rematar a la red con un tiro excepcional. El golazo devolvi¨® la fantas¨ªa al Bar?a y el partido recuper¨® el car¨¢cter l¨²dico del inicio. Los barcelonistas se adornaron hasta el final con un buen surtido de jugadas mientras la hinchada se acordaba de Iniesta, del Madrid y de Pedro. Una noche a pedir de boca.
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