Un grupo de cabezas duras

A David Ferrer le dicen el Ferru, el tenista de hierro. El apodo recupera todo su esplendor mientras Andy Roddick, todo un exn¨²mero uno mundial, va diluy¨¦ndose frente a sus punzantes restos y sus pies de polvorilla. El alicantino tritura el cerebro del estadounidense. Esta es la condena de Roddick: se adelanta por 2-0 en los dos primeros sets y ambos pierde. Tiene siete puntos para cerrar la primera manga y no lo consigue. Vive por encima en el marcador y jam¨¢s abrocha un parcial, superado en intensidad por el n¨²mero seis, que escarba en sus dudas, que siempre le hace frente, que compite conociendo al dedillo una estad¨ªstica: jam¨¢s ha logrado Roddick ganar a otro de los diez mejores del mundo en la Copa Davis. Tampoco en Austin (7-6, 7-5 y 6-3), donde antes, en un encuentro tremendo, Feliciano L¨®pez tumba 6-4, 3-6, 6-3, 6-7 y 8-6a Mardy Fish, el n¨²mero ocho del planeta.

"En el primer set, Andy tuvo un 40-0 para ganar la manga (con 5-4), y que no lograra me dio confianza para jugar con m¨¢s fuerza y convicci¨®n", analiz¨® el alicantino, al que Albert Costa, el seleccionador, salv¨® la primera manga, al aconsejarle que solicitara la revisi¨®n electr¨®nica en el punto que le hab¨ªa dado la manga a Roddick. "Sab¨ªa que la clave iba a estar en mi resto. Cuando gan¨¦ ese primer set, lo mejor¨¦. Creo que ¨¦l se cans¨® un poco y que yo aprovech¨¦ mis oportunidades", prosigui¨® el tenista. "El 0-2 es muy importante, pero esto no est¨¢ acabado".

Inesperadamente, Espa?a domina 0-2 la serie de cuartos de final. Queda el partido de dobles, donde los hermanos Bryan son favoritos frente a L¨®pez y Fernando Verdasco, y los individuales del domingo. Los resultados del viernes, sin embargo, certifican la capacidad de los tenistas de la selecci¨®n para sobreponerse a las circunstancias, superar la presi¨®n de enfrentarse a domicilio a una potencia con dos de los diez mejores del mundo y para convertir el cruce en un pu?ado de partidos de tenis, m¨¢s que en un duelo de pasiones.

Ferrer tortur¨® a Roddick. Para cada uno de sus saque supers¨®nicos tuvo un resto. Para cada uno de sus progresos en el marcador, una respuesta. El estadounidense perdi¨® con dobles faltas seguidas, se?al de que ya andaba groggy. Feliciano, por su parte, se sobrepuso a Fish, que se adelant¨® con break en el quinto y definitivo parcial. Los espa?oles a¨²n pueden perder la eliminatoria. Est¨¢n, sin embargo, donde solo ellos esperaban: con tres partidos para conseguir el ¨²nico punto que les falta.