El Madrid espanta al Ajax

La hinchada del Ajax se dispon¨ªa a celebrar el pase a octavos de final de su equipo por primera vez en seis temporadas. Ten¨ªa siete goles de ventaja sobre su perseguidor, el Lyon, y disputaba el ¨²ltimo partido de grupo ante un Madrid en reformas. Pero el destino le reserv¨® dos infortunios extraordinarios: el Lyon le meti¨® siete goles al Dinamo y el ¨¢rbitro le anul¨® injustamente dos tantos que le habr¨ªan servido. El Madrid cerr¨® el partido en la primera parte ante un adversario sin jerarqu¨ªa que se desencaj¨® ante las dificultades.

Condicionado por la irrelevancia del partido y por la inminencia del cl¨¢sico, el Madrid present¨® un equipo de ocasi¨®n. Albiol y Varane no hab¨ªan competido juntos. Arbeloa y Coentr?o nunca se hab¨ªan repartido los laterales en un partido oficial. Sahin, Granero, Callej¨®n y Kak¨¢ compusieron una l¨ªnea apenas ejercitada en los entrenamientos. Los ¨²nicos que hab¨ªan tenido la oportunidad de desarrollar automatismos hab¨ªan sido Higua¨ªn y Benzema en las contadas ocasiones en las que han coincidido. Todo esto no pareci¨® afectar demasiado al juego de ataque del Madrid. Lo notaron m¨¢s los defensas. Albiol dio s¨ªntomas de estar padeciendo la inactividad cuando descuid¨® el primer control que le exigieron y dej¨® a Lodeiro frente a frente con Ad¨¢n. Se interpuso Varane, que cort¨® oportunamente el disparo. Hab¨ªan transcurrido menos de cinco minutos y el escenario era una copia fiel del partido del Bernab¨¦u. Avanzaba el Ajax intentando salir de la presi¨®n y el Madrid jugaba en largo buscando la espalda de los centrales adversarios.

Ejercer de centrocampista en este Madrid es una tarea ardua, cuando no ingrata. Hay que estar preparado para correr mucho, tocar pocos balones, y, en general, hacer las cosas para las que ning¨²n ni?o eligi¨® la profesi¨®n de futbolista. Lo contrario supone un conflicto con las ¨®rdenes del t¨¦cnico. Los nuevos, como Sahin, deben aclimatarse. El joven turco vive sujeto a contradicciones: hace lo que le gusta, que es tocar y moverse, o hace lo que le mandan, que es profundizar con grandes desplazamientos y esprintar para presionar en campo rival. Sahin entr¨® desorientado al partido y el Madrid atraves¨® sus habituales problemas para iniciar el juego. Pero cont¨® con la ayuda de Kak¨¢, que est¨¢ espl¨¦ndido. Recuperado de sus dolencias, el brasile?o vuelve a exhibir esa carrera el¨¢stica y feliz que le hizo grande.

Kak¨¢ se arrim¨® para apoyar a Sahin y a Albiol, y de ah¨ª surgieron las primeras jugadas. Desde las inmediaciones del c¨ªrculo central se las ingeni¨® para meter un pase raso entre Blind y Vertonghen. El pase fue muy bueno pero quiz¨¢ no tanto para evitar el anticipo de centrales m¨¢s despiertos. Descuidaron el juego, el bal¨®n y el hombre. Y el hombre fue Callej¨®n, que tir¨® la diagonal desde la derecha y remat¨® de zurda entre las piernas de Vermeer.

El Madrid maneja f¨®rmulas sencillas que facilitan la interpretaci¨®n r¨¢pida. Es la ventaja de centrar el trabajo t¨¢ctico en el juego sin bal¨®n. Como para presionar no hace falta m¨¢s que atenci¨®n y entusiasmo, y como Mourinho es un excelente motivador, el equipo ha conseguido una continuidad envidiable. Es agresivo en cualquier situaci¨®n, incluso en un partido en el que no se juega nada. El Ajax s¨ª se jugaba el pase a los octavos y necesitaba romper la presi¨®n a la que lo sometieron. Lo intent¨® con Vertonghen saliendo desde atr¨¢s y sum¨¢ndose al medio campo, y la maniobra le proporcion¨® una alternativa interesante. Un tiro desde fuera del ¨¢rea de Erikssen puso a prueba a Ad¨¢n. Minutos m¨¢s tarde, Anita volvi¨® a intentarlo desde fuera del ¨¢rea. Ad¨¢n no bloc¨® y Lodeiro cabece¨® a la red. El ¨¢rbitro, un portugu¨¦s de nombre sinuoso, Manuel de Sousa Neves Moreira de Sousa, declar¨® un fuera de juego inexistente. El estadio comenz¨® a revolverse. La silbatina fue estruendosa cuando, en la siguiente jugada, Anita clav¨® una bomba de precisi¨®n en la escuadra derecha del Madrid y el ¨¢rbitro, previo aviso de su asistente, volvi¨® a declarar el fuera de juego.

El partido se puso cuesta arriba para el Ajax, desmoralizado ante el infortunio, asistiendo impotente a las repeticiones que atestiguaban los errores arbitrales en las pantallas gigantes. La perplejidad suele pagarse cara en el f¨²tbol, sobre todo ante equipos como el Madrid, veloces y resolutivos como ninguno. Benzema cambi¨® de orientaci¨®n desde 40 metros y la defensa del Ajax volvi¨® a olvidarse del hombre que entraba por el ¨¢ngulo opuesto. Esta vez fue Higua¨ªn, que ejecut¨® su caracter¨ªstico rito cruzado de derecha.

La afici¨®n ajacied, siempre festiva, recibi¨® la segunda parte con un cl¨¢sico del ?msterdam Arena, el Everything's gonna be allright de Bob Marley. 60.000 voces lo entonaron a capela mientras el Lyon met¨ªa el quinto, el sexto y el s¨¦ptimo. Camino de la maldici¨®n. El Ajax, eliminado. Y el Madrid suscribiendo su mejor liguilla.