Fiesta del Getafe

El Villarreal sigue en ca¨ªda libre. Con algo de orden y un marcado estilo defensivo, el Getafe dej¨® que las dudas del conjunto castellonense se aliaran con su propuesta conservadora. Falto de l¨ªrica, al Villarreal no le da de s¨ª la ¨¦pica. Su f¨²tbol elitista no est¨¢ concebido para los menesteres mundanos de porfiar por la salvaci¨®n. El Getafe hizo lo justo para agrandar la herida de un Villarreal que peligra en Primera.

No pudo comenzar con peor pie el Villarreal. A los cinco minutos, una p¨¦rdida del bal¨®n en el centro del campo deriv¨® en un contragolpe de libro que le pill¨® desenfocado. Una apertura al costado derecho, un pase de Barrada al ¨¢rea, un control de Miku y la posterior asistencia del venezolano a Diego Castro, culminada por el exsportinguista, pon¨ªa por delante al Getafe. Una acci¨®n sencilla, natural, pon¨ªa de relieve los problemas que el Villarreal est¨¢ teniendo para sellar su ¨¢rea. Con los mismos efectivos, el Getafe daba la impresi¨®n de que dispon¨ªa de m¨¢s piezas en todas las parcelas. Cuesti¨®n de orden y atenci¨®n.

La jugada del gol result¨® la consecuencia del planteamiento ideado por Luis Garc¨ªa, al que lo mismo le da dirigir al Levante que al Getafe. Con las l¨ªneas juntas, el conjunto madrile?o pretend¨ªa bloquear la salida del esf¨¦rico del Villarreal esper¨¢ndole en su parcela defensiva para salir r¨¢pido a la contra. El gol validaba lo razonado. Sin embargo, a Pedro Le¨®n le dio por cometer la torpeza de atropellar a Jaume Costa cuando se internaba en el ¨¢rea azulona. Borja Valero asumi¨® la responsabilidad del lanzamiento del penalti. Fuerte y alto, pero al centro, y a Moy¨¢ le dio por permanecer imperturbable y de pie, conteniendo la respiraci¨®n y haciendo una parada de sangre fr¨ªa.

Nada le sal¨ªa al conjunto de Molina. Una falta botada por Marcos Senna se estrellaba en la cruceta del marco. El partido no era del equipo local, pero s¨ª la intenci¨®n ante un Getafe demasiado contemplativo, fiado a su aparente buena estrella. La confianza le jug¨® una mala pasada a Cata D¨ªaz. El argentino se permiti¨® el lujo de dejar pasar un bal¨®n sencillo de despejar y Nilmar se lo arrebat¨®. La picard¨ªa del brasile?o se complet¨® dej¨¢ndose caer al sentir el ligero contacto de su adversario cuando intentaba enmendar el entuerto. Nilmar hizo buena la piller¨ªa marcando con maestr¨ªa la pena m¨¢xima en el ¨²ltimo minuto del primer acto.

Reforzado por el empate, el Villarreal creci¨® en intensidad y presencia ofensiva en la segunda mitad, lo que oblig¨® a acentuar al Getafe su versi¨®n conservadora, salpimentada por Miku. El venezolano se bastaba para acongojar a El Madrigal, que vio c¨®mo Diego L¨®pez salvaba por los pelos un remate del delantero formado en el Valencia. Pero fue Barrada, en una jugada que pill¨® nuevamente fuera de sitio a la defensa, el que pon¨ªa en ventaja de nuevo al Getafe y le daba una victoria bals¨¢mica, la 100? en ocho temporadas en la m¨¢xima categor¨ªa.