La rev¨¢lida de los ¡®sargentos¡¯
Van Gaal y Capello buscan reconducir a Holanda y Rusia tras su convulso paso por los banquillos de la ¡®oranje¡¯ e Inglaterra respectivamente
Similares en el m¨¦todo, que no en la ruta est¨¦tica empleada para alcanzar la gloria, Louis Van Gaal y Fabio Capello atisban un desaf¨ªo may¨²sculo en el horizonte. Hijos de una remesa de entrenadores cultivada con mano de hierro a finales de los ochenta e inicios de los noventa, por encima ya de la barrera de los 60 a?os los dos y poseedores de un historial de alto pedigr¨ª, encaran ahora una ardua labor en los banquillos de Holanda y Rusia respectivamente. Dos selecciones que salieron trasquiladas de la ¨²ltima Eurocopa y precisan ahora de un profundo lavado de cara. Si sonrojante fue el papel de los rusos, apeados en la fase de grupos contra todo pron¨®stico, m¨¢s flagrante fue la ca¨ªda de la oranje. Subcampeona del mundo, a priori una de las grandes favoritas para la cita de Polonia y Ucrania, se despidi¨® de forma prematura del torneo, con un cero rotundo en su casillero y mucha mar de fondo en el vestuario.
Las dos selecciones salieron trasquiladas de la ¨²ltima Eurocopa y precisan ahora de un profundo lavado de cara
De ah¨ª el aterrizaje de Louis Van Gaal. Categ¨®rico y estricto como pocos, el preparador dispone de una magn¨ªfica oportunidad para maquillar su calamitoso paso previo por el banquillo holand¨¦s, entre 2000 y 2002. Lastrado por dos tropezones en la fase clasificatoria ante Irlanda y Portugal, fue incapaz entonces de lograr un billete para el Mundial de Corea y Jap¨®n. Emborron¨® as¨ª un excepcional expediente que incluye cuatro t¨ªtulos de Liga con el Ajax, dos con el Barcelona, uno con el AZ Alkmaar y otro m¨¢s con el Bayern de M¨²nich, am¨¦n de una corona de la Liga de Campeones con el cuadro ajaccied. Aturdida Holanda, demandaba su federaci¨®n un capataz resuelto, encargado de devolver el juego de toque y combinaci¨®n perdidos bajo la batuta del anterior inquilino de la caseta, Bert Van Marwijk, alejado del ideario rom¨¢ntico de Holanda, aferrado al colmillo de tipos duros como Van Bommel y la inspiraci¨®n fugaz de sus estrellas.
¡°Que su nombramiento sea una buena o mala decisi¨®n depender¨¢ de la casualidad¡±, declar¨® Johan Cruyff, enfrentado a su compatriota
Revueltas las aguas, Van Gaal fue el elegido para devolver el orden en un equipo desmembrado por el ego y los celos. No sin resistencia. ¡°Que sea una buena o mala decisi¨®n depende de la casualidad. Esto no puede ser as¨ª¡±, declar¨® el t¨®tem del f¨²tbol holand¨¦s, Johan Cruyff, enfrentado de forma perenne a su compatriota. Siempre intervencionista, la mano de Van Gaal se ha hecho notar desde el principio. El t¨¦cnico ha prescindido en su pizarra inicial de Robin Van Persie, gran figura de la oranje. ¡°Todav¨ªa no ha logrado convencerme con el equipo nacional y en mi sistema solo hay lugar para un atacante en punta. Huntelaar tiene preferencia¡±, sentenci¨® sin reparos. Ha descartado adem¨¢s a jugadores de empaque como Van der Vaart, De Jong, Van der Wiel o Afellay. ¡°No est¨¢n en forma. Se han pasado el verano arreglando sus traspasos¡±, adujo tajante. Y, en su l¨ªnea, no pierde de ojo al vivero holand¨¦s, por lo que ha reclutado para su engranaje a j¨®venes como Van Rhijn, Willems, Fer o Strootman.
Despu¨¦s de un ensayo fallido el pasado mes en un amistoso ante B¨¦lgica (4-2), aspira Van Gaal a tener un estreno oficial pl¨¢cido frente a Turqu¨ªa. Sin embargo, parece estar permanentemente envuelto por la zozobra. Una aeronave teledirigida sobrevol¨® el Amsterdam Arena para destapar sus planes en la ¨²ltima sesi¨®n. ¡°Tenemos que lidiar con estas cosas, pero no me quitan el sue?o. Cuando estaba en Barcelona los periodistas grababan nuestros entrenamientos desde apartamentos cercanos¡±, record¨® el holand¨¦s, un sargento al que no le tiembla el pulso por m¨¢s que la tempestad asome.Tampoco a su hom¨®logo Fabio Capello, que afronta otra rev¨¢lida exigente despu¨¦s de abandonar el banquillo de Inglaterra a solo tres meses de la Eurocopa. Vehemente, el italiano contempl¨® como un recorte de su autoridad y un cuestionamiento de su jerarqu¨ªa la decisi¨®n de la Federaci¨®n inglesa de desposeer al zaguero John Terry de la capitan¨ªa por sus insultos racistas contra Anton Ferdinand, central del Queen¡¯s Park Rangers. Dej¨® en su legado un juego pobret¨®n con el que, sin embargo, obtuvo el mejor porcentaje de victorias (66,7%) de los ¨²ltimos 18 seleccionadores de Inglaterra.
Triunfador en varios equipos, el reto del t¨¦cnico italiano es ahora guiar a Rusia hasta el Mundial de 2014 a cambio de 12 millones de euros
Opt¨® por emigrar Capello, enervado primero, aliviado poco despu¨¦s con la llamada de Rusia y los 12 millones de euros que recaudar¨¢ en los dos pr¨®ximos a?os. Triunfador en equipos como el Milan, el Real Madrid, el Juventus o el Roma, su reto consiste ahora en guiar a Rusia, ausente de los dos ¨²ltimos Mundiales, hacia la cita de 2014 en R¨ªo de Janeiro. En la l¨ªnea de Van Gaal, igualmente dr¨¢stico, ha dado un golpe de efecto al excluir de la lista contra Irlanda del Norte de Andrei Arshavin, la estrella del f¨²tbol ruso y capit¨¢n en la ¨²ltima Euro, abucheado por su propia hinchada durante el duelo preparatorio ante Costa de Marfil. Mantiene el esqueleto conformado por su predecesor, el holand¨¦s Dick Advocaat, pero no ha alistado a hombres de peso como Pavlyuchenko y Pogrebnyak. Nada novedoso, teniendo en cuenta que en su etapa en el Madrid ya refrend¨® su soberan¨ªa en el vestuario cuando apart¨® a David Beckham.
¡°Trabajo para lograr resultados y ganar¡±, defiende el italiano, otro coronel de alto rango y mano dura cuyo objetivo a corto plazo es catapultar a Rusia, potencia futbol¨ªstica emergente -con 223 millones de euros, el quinto campeonato en cuando a inversi¨®n este verano-, hacia la cita de R¨ªo. Sin embargo, su vista est¨¢ fijada un paso m¨¢s all¨¢. En 2018, cuando Rusia ser¨¢ la organizadora del Mundial.
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