La polic¨ªa da una baza a Pistorius

Apuntaba a convertirse en un cl¨¢sico drama griego ¡ªfama, belleza, amor, dinero y muerte¡ª, pero al paso que va el proceso contra Oscar Pistorius amenaza con convertirse en un librucho que ponga en evidencia a la polic¨ªa sudafricana. Ayer, lo de menos casi era si el velocista obten¨ªa o no la libertad condicional ¡ªla decisi¨®n volvi¨® a retrasarse hasta hoy por tercera vez¡ª porque el caso dio un giro inesperado al conocerse que el investigador jefe del crimen, Hilton Bota, quedaba apartado del caso porque, parad¨®jicamente, la fiscal¨ªa le imputa siete supuestos intentos de asesinato. Su relevo lleg¨® horas despu¨¦s de que este polic¨ªa aportara pruebas reforzando la versi¨®n de que el atleta amputado plane¨® la muerte de su novia, Reeva Steemkamp.

En 2009 se acus¨® a un Botha de servicio y con alguna copa de m¨¢s de disparar contra un minib¨²s con pasajeros. El fiscal archiv¨® la causa, pero la volvi¨® a abrir este mismo mes y ayer, en una rueda de prensa precipitada, la polic¨ªa regional de Gauteng anunci¨® que lo retiraba del caso estrella del a?o en Sud¨¢frica.

Sobre Pistorius, su trabajo deja mucho que desear. No solo no se cubri¨® los zapatos para entrar en la escena del crimen, con el riesgo de contaminar pruebas, sin¨® que se olvid¨® de mencionar un cuarto disparo que impact¨® contra el cuerpo de la joven y tampoco ha entregado a¨²n los informes de llamadas de los tel¨¦fonos del acusado, Pistorius, y su supuesta v¨ªctima.

El relevo policial puede ser una aut¨¦ntica baza para la defensa de Pistorius. Los abogados del deportista son reconocidos en Sud¨¢frica por conseguir absoluciones casi imposibles. Ayer lo ten¨ªan f¨¢cil y en su alegato final Barry Roux sac¨® a relucir ¡°la pobre calidad¡± del trabajo de Botha y denunci¨® que el caso se sostiene solamente con ¡°especulaciones¡±. Seg¨²n su versi¨®n, Pistorius dispar¨® atemorizado por la supuesta presencia de un ladr¨®n y cuando se dio cuenta de que hab¨ªa herido a su novia intent¨® ¡°salvarle la vida¡±. De por qu¨¦ Steemkamp se encerr¨® en el ba?o, el letrado apunt¨® que pudo sentir miedo al o¨ªr los gritos de atleta, a pesar de que vive en una urbanizaci¨®n con seguridad privada. Sud¨¢frica tiene uno de los ¨ªndices de violencia m¨¢s elevados del mundo y sus habitantes una aut¨¦ntica obsesi¨®n por ser la siguientes v¨ªctimas.

El que tuvo que poner buena cara es el fiscal, Gerrie Neil, el mismo que el mi¨¦rcoles cit¨® a Botha como testigo para evitar que Pistorius saliera bajo fianza. La acusaci¨®n sostuvo como primera hip¨®tesis la planificaci¨®n del crimen de su novia y no descart¨® que Pistorius hubiera ¡°preparado la escena en beneficio propio¡± e insinu¨® que su declaraci¨®n jurada estaba ¡°llena de mentiras¡± y buscaba un ¡°efecto dram¨¢tico¡±. Tambi¨¦n rechaz¨® que el velocista actuara por un miedo insuperable ya que, a su entender, su decisi¨®n de salir de la habitaci¨®n para ir ¡°en busca del peligro¡± en el ba?o demuestran que era un ¡°hombre preparado y dispuesto a matar¡±. ¡°Tuvo intenci¨®n de matar¡±, en cualquier caso, expuso. ¡°D¨¦mosle el beneficio de la duda¡±, asinti¨® para oponerse a la fianza con la que el deportista conseguir¨ªa llevar ¡°su vida normal, como si nade hubiera pasado¡±, dijo, o fugarse del pa¨ªs. Adem¨¢s, no descart¨® poder rebajar los cargos, de asesinato premeditado, que implica la cadena perpetua, a homicidio, con un castigo m¨¢s leve.