El Cristiano m¨¢s dominante

Si los cl¨¢sicos son un pulso entre Cristiano y Messi, en el de vuelta de Copa no hubo color. El portugu¨¦s marc¨® dos tantos y del argentino, irreconocible, apenas hubo pistas. El Madrid tumb¨® al Barcelona y buscar¨¢ el t¨ªtulo de Copa contra el vencedor del Sevilla-Atl¨¦tico (22.00, Telecinco, los colchoneros ganaron 2-1 en la ida disputada en el Calder¨®n). Estas son las notas del partido.

Cristiano: Dominador incuestionable del partido desde su formidable estado de forma f¨ªsica. Conducci¨®n que emprend¨ªa a la carrera, conducci¨®n que culminaba con la sensaci¨®n de ser inalcanzable para cualquier jugador del Barcelona. Se movi¨® por todo el frente de ataque con una autoridad incontestable. Le hizo un nudo en la cintura a Piqu¨¦ en la jugada de penalti. Ha borrado por completo de su cabeza aquellos primeros cl¨¢sicos en los que le pod¨ªa la ansiedad por resolverlos. Esa misma bicicleta se la ha defendido bien en multitud de ocasiones Piqu¨¦, pero anoche ni la vio. Enga?¨® a Pinto en el lanzamiento del penalti, y en el segundo gol, adem¨¢s de acompa?ar la contra, resolvi¨® con tranquilidad cuando recogi¨® el rechace de Pinto. Control¨® la pelota con el pecho y fusil¨® con la izquierda. Adorn¨® su estelar actuaci¨®n ayudando a defender los saques de esquina y en algunas persecuciones a Alves cuando este se proyectaba en ataque.

Messi: Irreconocible, muy est¨¢tico, ahogado como en Mil¨¢n en esa posici¨®n central. Termin¨® el partido con dos disparos, uno al inicio del encuentro que cruz¨® demasiado, y el otro en una falta directa que se fue rozando el poste. Intent¨® alguna jugada individual sin ¨¦xito.

Di Mar¨ªa: La otra gran exhibici¨®n f¨ªsica de un jugador del Madrid. Baj¨® continuamente para defender su banda y perseguir a Jordi Alba hasta la l¨ªnea de fondo si era preciso. Evit¨® que entre el lateral del Bar?a e Iniesta le generaran superioridad a Arbeloa. En ataque, sus conducciones en velocidad sirvieron para estirar al Madrid. Muy r¨¢pido y habilidoso en la jugada que propici¨® el segundo gol. Arranc¨® en velocidad desde su propio campo en el despeje-pase que le lanz¨® Khedira. Rompi¨® a Puyol primero en velocidad y ya en el ¨¢rea con un regate que sent¨® al central catal¨¢n.

Xavi: La m¨¢xima expresi¨®n de lo que ayer fue el Bar?a. No encontr¨® espacios para filtrar balones y se vio obligado a dar muchos toques antes de poder dar un pase. Que Xavi de m¨¢s de tres toques para hacer circular la pelota significa que el Bar?a no encuentra su juego. Fue sustituido a falta de 15 minutos y se fue con cara de impotencia.

Varane: Secund¨® a Ramos en el mantenimiento de la l¨ªnea muy adelantada para provocar que el Madrid fuera un equipo corto para no dejar espacios y valiente para poder irse arriba a obstruir al Bar?a desde su inicio del juego. Imponente en el cabezazo del tercer gol como lo fue en el del empate en la ida en el Bernab¨¦u (1-1). Su aparici¨®n en esta eliminatoria ha sido estelar. Con 19 a?os el temple y la seguridad que ha mostrado en los cruces y a la hora de jugar la pelota en los dos partidos le han allanado el camino hacia su consolidaci¨®n como un central de jerarqu¨ªa para muchos a?os.

Iniesta: El jugador m¨¢s activo y desequilibrante del Bar?a, aunque se fue diluyendo con el paso de los minutos por falta de socios eficaces. Parti¨® como falso extremo izquierdo para meterse mucho hacia el centro en busca de orientar el juego que Xavi nunca gobern¨®. Suyo fue el pase que propici¨® el tanto de Jordi Alba, un globito por encima de la defensa del Madrid.

Xabi Alonso y Khedira: Fundamentales en la asfixia de Xavi y en la recuperaci¨®n de balones. Buscaron siempre el pase sencillo para acelerar las salidas a la contra de Cristiano. Khedira tuvo la virtud de convertir un despeje en un pase al hueco a Di Mar¨ªa en el segundo gol del Madrid.

Cesc: Su presencia en detrimento de Villa supuso siempre un pase de m¨¢s y un exceso de juego al pie. Arm¨® poco juego y no encontr¨® espacios para llegar desde segunda l¨ªnea, su gran especialidad.

Higua¨ªn: No marc¨® ni estuvo cerca, pero fue clave en la presi¨®n adelantada de su equipo cuando el Bar?a trataba de salir jugando desde las inmediaciones de Pinto. Corri¨® mucho independientemente de que percibiera que el ataque de su equipo no ten¨ªa mucho que ver con ¨¦l. Mourinho se lo agradeci¨® cuando le sustituy¨®.

Pedro: Empez¨® ruidoso con algunas incursiones por la banda que inquietaron a Coentrao, pero se difumin¨®. El exceso de juego al pie impidi¨® que el Bar?a explotara su velocidad con balones largos a la espalda del lateral, una soluci¨®n l¨®gica cuando es imposible progresar por el medio y el rival, como fue el caso del Madrid, adelanta tanto la defensa.

?zil: Si Di Mar¨ªa y Cristiano estiraron a la carrera a su equipo, ¨¦l escondi¨® la pelota cuando intu¨ªa que las contras no pod¨ªan finalizarse o no encontraba a qui¨¦n pasar. Con la pelota pegada al pie, su cintura y su cambio de ritmo evitaron que los defensas del Bar?a le sacaran el bal¨®n.