Alonso corre con red

Fernando Alonso llevaba m¨¢s de tres a?os reclam¨¢ndole a Ferrari el monoplaza que conduce en estos momentos, aunque las paradojas que esconde la f¨®rmula 1, b¨¢sicamente debido a los n¨²meros, puedan llevar a pensar que el curso pasado, al volante de un coche tan resistente como perezoso, la cosa le iba mejor que ahora a estas alturas de la pel¨ªcula. En 2012 abandon¨® China, la tercera parada del calendario, en la tercera posici¨®n de la tabla, con un margen de ocho puntos de desventaja con respecto al l¨ªder, Lewis Hamilton, tras haber terminado el quinto en Australia, haberse impuesto en Malasia y concluir el noveno en Shangh¨¢i. Hoy por hoy, Alonso tambi¨¦n ocupa el tercer puesto de la general y la diferencia que le separa, en este caso de Vettel, es un punto mayor a la de entonces.

Aunque ambos casos sean pr¨¢cticamente calcados a nivel estad¨ªstico, entre ellos hay diferencias importantes que avalan la tranquilidad que acompa?a al asturiano. B¨¢sicamente, porque su prototipo actual est¨¢ a la altura de los m¨¢s r¨¢pidos, a tenor de la opini¨®n del propio Alonso y de sus registros: al margen del accidente que le llev¨® a retirarse en Malasia, en Australia termin¨® segundo y el domingo, en China, logr¨® una victoria incontestable. Los resultados de un Mundial y el otro no tienen comparaci¨®n posible.

Siempre que se le pregunta por el pasado campeonato y dada la flojera que demostr¨® la primera versi¨®n del b¨®lido que manej¨®, al asturiano le cuesta entender que se fuera de vacaciones, en verano, con la batuta del certamen y un coj¨ªn de 40 puntos sobre el segundo (Webber). Pero a¨²n encuentra menos explicaci¨®n a que pudiera pelear por la corona hasta la ¨²ltima cita, en Brasil, algo que se cans¨® de calificar de ¡°milagro¡±. ¡°El rendimiento del F2012 fue muy malo de entrada. A pesar de ello, conseguimos sumar muchos puntos. No ser¨¢ f¨¢cil igualarlo¡±, vaticinaba en Australia Domenicali, director de Ferrari.

¡°No quiero un coche que sea un segundo m¨¢s r¨¢pido que el resto, solo quiero poder pelear con los dem¨¢s en igualdad de condiciones¡±

Alonso, por otro lado, se encuentra en su mejor momento como piloto. Durante el ejercicio anterior solo contabiliz¨® un error individual, en Melbourne, durante la primera sesi¨®n cronometrada, mientras estrujaba un aparato que rodaba un segundo y medio m¨¢s lento que los m¨¢s r¨¢pidos. ¡°No quiero un coche que sea un segundo m¨¢s r¨¢pido que el resto, solo quiero poder pelear con los dem¨¢s en igualdad de condiciones¡±, se cans¨® de reclamar. De marzo a noviembre solo dej¨® de puntuar dos veces (B¨¦lgica y Jap¨®n), y fue a ra¨ªz de dos accidentes en la arrancada. Este a?o, no obstante, el ovetense ya ha cometido un error que le dej¨® fuera de combate hace tres semanas, en Sepang, al rozar con el aler¨®n delantero el trasero del RB9 de Vettel, una caricia que termin¨® con el Ferrari en la escapatoria y el primer cero en su casillero. ¡°La suerte a¨²n est¨¢ en deuda con nosotros. Sabemos que cada temporada sufriremos dos o tres domingos de tristeza. O sea que nos falta otro u dos m¨¢s¡±, argumenta el espa?ol.

Alonso est¨¢ sereno y confiado, mucho m¨¢s que hace un a?o, cuando complet¨® un Mundial para enmarcaraunque no le valiera para igualar los tres t¨ªtulos de Ayrton Senna. Entonces, debido a la falta de pegada de su Ferrari, fallar una vez hubiera significado despedirse de la corona mucho antes. Con el nuevo F138, el margen para poder recuperarse de los errores tambi¨¦n aumenta.