Una reacci¨®n vertiginosa

La pl¨¢cida tarde que vive Rafael Nadal ante Mikhail Youzhny cambia en un segundo. Son los octavos del Mutua Madrid Open. El mallorqu¨ªn domina 6-2, 3-1 y 40-40. Un saque que el juez de silla da como bueno y que Nadal reclama como malo (¡°?M¨ªralo luego por la tele!¡±) lo cambia todo. El mallorqu¨ªn pierde el hilo del encuentro. Con la discusi¨®n a¨²n en la cabeza, ve c¨®mo Youzhny se lleva ese juego, ¨¦l empieza a apoyarse con precauci¨®n sobre la pierna izquierda, e inmediatamente cede un break. Es 6-2, 3-3 y saque de Youzhny. El cambio del marcador fotograf¨ªa las dificultades del escenario. Estos son los octavos de un masters 1000 y se compite a cara de perro. Nadal, que sigue jugando con la rodilla izquierda vendada, sutura la herida con un 3-0 (6-2 y 6-3 tras un doble break) que pone punto y final a un di¨¢logo que hab¨ªa comenzado como un mon¨®logo.

¡°Vamos haciendo lo que podemos cada d¨ªa, as¨ª estamos, no es momento de hablar m¨¢s de la cuenta¡±, dice cuando le preguntan por los apoyos en la pierna izquierda contra un rival que juega sin chispa.

Para eso tambi¨¦n hay razones. Cuando el mi¨¦rcoles est¨¢ muriendo, Youzhny a¨²n sigue en los vestuarios. Eliminar a Nicol¨¢s Almagro en segunda ronda le obliga a apurar los tres sets y a consumir sus energ¨ªas durante largos minutos que carcomen sus piernas. En mitad del partido, estira sobre uno de los postes de la red y pide la asistencia del fisioterapeuta. El esfuerzo deja al n¨²mero 31 en manos de su rival del jueves. Por eso, en octavos, todo, lo bueno y lo malo, ocurre seg¨²n el dictado de la raqueta de Nadal, que en cuartos se enfrentar¨¢ con un tipo duro: David Ferrer, que doblega 7-5, 4-6 y 6-4 al alem¨¢n Tommy Haas, uno de los tenistas m¨¢s en forma del circuito

Ah¨ª el list¨®n ser¨¢ otro. En Madrid ya no quedan mas que duras batallas. Que se lo digan al b¨²lgaro Grigor Dimitrov, el hombre que despid¨® al serbio Novak Djokovic, y que cuando ya est¨¢ bien instalada la noche del jueves cae frente al suizo Stan The Man Wawrinka (3-6, 6-4 y 6-1). Que le pregunten a Roger Federer: el campe¨®n de 2013, en su primer torneo en casi dos meses, se despide 4-6, 6-1 y 2-6 ante el japon¨¦s Nishikori. Esa no es una derrota cualquiera. Pone el n¨²mero dos mundial en manos del brit¨¢nico Andy Murray. Le har¨¢ llegar a Roland Garros con poco m¨¢s de un torneo sobre tierra de preparaci¨®n, porque antes de Par¨ªs solo queda Roma y en Madrid solo gan¨® un partido (Stepanek). Y acaba con la buena racha del rey de la altura en la capital: hasta ahora, el campe¨®n de 17 grandes no hab¨ªa perdido nunca antes de semifinales.