Bronce monumental de Mireia
Belmonte, en plena excelencia y madurez, extiende su explosi¨®n ol¨ªmpica a los Mundiales con una inteligente remontada en los 200 estilos El martes nada la final de los 1500 libre
Mireia Belmonte explot¨® en la ¨¦lite con dos medallas de plata en los Juegos Ol¨ªmpicos de Londres. Un a?o despu¨¦s, sobre la navaja de doble filo que acarrea un Mundial en casa, se situ¨® a pie de obra, obsesionada en un desaf¨ªo solo al alcance de unos pocos elegidos. Un rosario de pruebas, 14 en seis modalidades distintas, durante ocho d¨ªas en remojo. El marat¨®n empez¨® el domingo y no de la mejor manera, con la eliminaci¨®n en los 400 libre. No hubo tiempo para lamentarse. Piscina, masaje, relajaci¨®n, unos hidratos, un ratito de m¨²sica, y otra vez a nadar. Y as¨ª transcurri¨® el domingo y prosigui¨® la ma?ana del lunes, en la que se clasific¨® para la final de los 1.500 libre con el cuarto mejor tiempo. Y por la tarde, otra vez a la pileta del Sant Jordi. Otra vez repiti¨® el rito. Trat¨® de abstraerse de la claca, con la m¨²sica que sonaba en sus auriculares blancos hasta llegar al poyete. All¨ª apoy¨® la pierna izquierda, en una estampa un tanto quijotesca. En sus sucesivos pasos por la zona mixta, en las entra?as del Sant Jordi, all¨ª donde se confiesa con los periodistas unos instantes tras cada prueba, hab¨ªa avisado. ¡°Los 200 estilos no es mi prueba¡±. Tal vez ni siquiera ella misma es consciente de la excelencia y la madurez que ha alcanzado. Se emple¨® con la inteligencia y seguridad de las grandes figuras y atrap¨® una medalla con la que no contaba. Fue de bronce, roz¨® la de plata.
La medalla me da confianza y fuerza para lo que queda¡±
Solo se le resistieron la h¨²ngara Katinka Hosszu y la australiana Alicia Coutts, que se salv¨® por la campana de la dentellada de Mireia, desbocada en los ¨²ltimos metros. Fue su primera medalla en un Mundial, la confirmaci¨®n de su acceso a la cumbre en Londres hace un a?o. La carrera se las tra¨ªa. Mireia part¨ªa con el quinto mejor tiempo, frente a rivales m¨¢s acreditadas en la distancia, como la china Shiwen Ye, campeona ol¨ªmpica y mundial, Coutts, subcampeona en ambas citas, y Hosszu, que exhibe un estado de forma excepcional. Mireia fue a lo suyo. Muy fuerte mentalmente. Consciente de que la clave era no perder comba en mariposa y la espalda. Corr¨ªa el riesgo de sucumbir. Fue cuarta al paso de los 50 mariposa y qued¨® relegada a la s¨¦ptima plaza tras el turno de espalda. ¡°He apretado los dientes. Me ha parecido que iba muy retrasada en la espalda y el viraje a braza me ha ido un poco mal, no he tocado bien. La clave ha sido no rendirme. No puedo pedir m¨¢s. Era mi peor prueba¡±, analiz¨® la nadadora badalonesa de 22 a?os, que dedic¨® su triunfo a los familiares y a las v¨ªctimas del accidente de tren de Santiago.
El suyo fue el triunfo de la experiencia, de la plena consciencia y perfecta gesti¨®n de sus debilidades y fortalezas en el nado. ¡°Ten¨ªa a la australiana al lado y pensaba que la china iba por delante, de manera que notaba que iba un poco atr¨¢s. Pensaba que iba cuarta¡±, relat¨®. Pero no. Shiwen Ye se hundi¨® de una forma estrepitosa. Y Mireia fue remontando cuando entr¨® en acci¨®n con la braza y el libre. El p¨²blico vibr¨® con el aceler¨®n. Obtuvo el segundo mejor tiempo en la braza (37,08s) solo superada por la ya totalmente descartada brit¨¢nica Sophie Allen. Pero todav¨ªa quedaba lo mejor. Despu¨¦s de doblar en cuarta posici¨®n en el ¨²ltimo giro, devor¨® los ¨²ltimos 50 metros a nado libre. Su parcial (30,43s) fue el mejor de todas las concurrentes. Le faltaron siete cent¨¦simas para superar a Coutts y ganar la plata. Cerr¨® con 2m 9,45s, r¨¦cord de Espa?a.
El podio le supo a gloria a Mireia, tan enredada en la mara?a de pruebas que ni siquiera recuerda el turbulento invierno, la ruptura con su club, el CN Sabadell, su obligado par¨®n hasta que por fin encontr¨® una alambicada soluci¨®n de continuidad, una f¨®rmula basada en su fichaje por el UCAM Murcia pero al mismo tiempo seguir con Fred Vergnoux y utilizar las instalaciones sabadellenses.
La clave ha sido no rendirme. No puedo pedir m¨¢s. Era mi peor prueba¡±
Las turbulencias fuera del agua tras su ¨¦xito ol¨ªmpico se apaciguaron justo a tiempo para encontrar la tranquilidad imprescindible y afrontar el enorme desaf¨ªo. ¡°Son sensaciones. Cuanto mejor te encuentras, mejor te va. Pero nunca sabes lo que va a pasar. Ahora, un poco de relax para afrontar otra jornada¡±, cerr¨®. Los d¨ªas de Mireia nunca son rutinarios. Este martes compite en la final de los 1.500 libre. Comparece con el cuarto mejor tiempo (16m 00,31s), por detr¨¢s de los de nadadoras excepcionales como la danesa Lotte Friis (15m 49,18s), la estadounidense Katie Ledecky (15m 49,26s) y la chilena Kristel Kobich (15m 54,30s). ¡°La medalla me da confianza y fuerza para lo que queda¡±, se regocija Mireia.
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