El cuento de hadas de Jagoba
Arrasate entrenaba hace cinco a?os al equipo de su pueblo, el Berriatuko de Regional, y hoy est¨¢ en la ¡®Champions¡¯
Berriatua es una localidad vizca¨ªna de poco m¨¢s de 20 kil¨®metros cuadrados y poco m¨¢s de 1.200 habitantes. Dos de ellos eran Ion Ansotegui y Jagoba Arrasate, central y entrenador de la Real Sociedad, respectivamente, que figuran en el breve apartado de personajes ilustres del pueblo junto a Patxi Goenaga, campe¨®n de Espa?a de ciclocross en 1940, dos bertsolaris (improvisadores de versos cantados) y el escultor Miguel ?ngel Lertxundi. En esa peque?a localidad, rural y nacionalista (el PSOE obtuvo tres votos y el PP ninguno en las ¨²ltimas elecciones municipales) naci¨® Jagoba Arrasate el 22 de abril de 1978 con la pasi¨®n del f¨²tbol en las venas. Arrasate no era un ariete a la antigua usanza. ¡°Como no era muy alto, pero s¨ª muy fuerte, buscaba m¨¢s los espacios. Era el t¨ªpico delantero que ten¨ªa que buscarse la vida por los aleda?os del ¨¢rea¡±, recuerda un ex compa?ero de equipo de los primeros tiempos.
El chico de Berriatua, que se recorri¨® media Guip¨²zcoa y media Vizcaya sin llegar a superar la Segunda Divisi¨®n B, se sienta hoy en el banquillo de uno de los estadios m¨ªticos de Francia, el viejo Gerland, la casa del Olympique de Lyon dirigiendo a la Real Sociedad en busca de una plaza en la fase de grupos de la Liga de Campeones. Hace cinco a?os, Jagoba Arrasate entrenaba al Berriatuko F¨²tbol Taldea, el equipo de su pueblo que militaba en la categor¨ªa de la Regional Preferente vizca¨ªna. Su curr¨ªculo como entrenador incluy¨® despu¨¦s un a?o en el Elgoibar guipuzcoano de Tercera y dos al frente de los juveniles de la Real, antes de convertirse en ayudante de Philippe Montanier.
Fue un modesto delantero y antes de llegar a la Real dirigi¨® al Elgoibar, en Tercera
Cuando la Real ca¨ªa eliminada en octavos de final por el Olympique de Lyon, hace nueve a?os tras perder 1-0 en Gerland con un gol de Juninho Pernambucano, Jagoba Arrasate defend¨ªa los colores del Elgoibar en Tercera Divisi¨®n. Su sue?o de jugar en la Real apenas hab¨ªa durado dos a?os, cuando milit¨® en el juvenil blanquiazul. Pero en aquel futbolista que ya daba sus ¨²ltimos coletazos en el f¨²tbol activo, hac¨ªa tiempo que se adivinaba un entrenador vocacional. ¡°Cuando est¨¢bamos en el Eibar (Arrasate estuvo cuatro a?os en el filial armero, pero nunca debut¨® con el primer equipo), ya se ve¨ªa que ten¨ªa alma de entrenador. Siempre se quedaba despu¨¦s de los entrenamientos con los t¨¦cnicos del equipo en unas reuniones informales a las que asist¨ªan algunos futbolistas con vocaci¨®n de aprendizaje. Jagoba no faltaba a ninguna. Le apasionaban esas charlas que iban cultivando su madera de futuro entrenador¡±, rememora un ex compa?ero del Eibar. Sin duda, su condici¨®n de delantero vivo, listo, obligado a sobrevivir entre torres de centrales, agudizaban el ingenio para buscar espacios, para ser m¨¢s t¨¢ctico que los delanteros de referencia.
El programa
Hoy. (Vuelta mi¨¦rcoles 28) 17.00. Shakhter (Kaz.)-Celtic (Esc.). 20.45. Pa?os de Ferreira (Por.)-Zenit (Rus.). PSV (Hol.)-Milan (Ita.). V. Plzen (R. Ch.)-Maribor (Svn.)
Ma?ana (Vuelta martes 27). Todos a las 20:45. Dinamo Zagreb (Cr.)-Austria de Viena (Aus.). Fenerbah?e (Tur.)-Arsenal (Ing.). Razgrad (Bul.)-Basilea (Sui.). Schalke 04 (Ale.)-PAOK (Gre.). Steaua (Rum.)-Legia (Pol.)
Sorteo de la fase de grupos: 29 de agosto en M¨®naco (17:45)
En 2007, con 30 a?os, colg¨® las botas, en el Amorebieta, y sac¨® la pizarra y los programas de ordenador. ¡°Es un conocedor absoluto del f¨²tbol vasco¡±, asegura un t¨¦cnico vizca¨ªno. ¡°Conoce a todos los jugadores vascos que pueden tener algo que decir y rastrea futbolistas uno por uno con una intensidad absoluta¡±.
Sin embargo, su nombramiento como primer entrenador de la Real, tras la salida de Montanier, fue un sobresalto general. La Real afrontaba una temporada exigente, con el a?adido de una Liga de Campeones, un caramelo lleno de prestigio y dinero para un club que tiene a¨²n fresco su infierno en Segunda Divisi¨®n y una penuria econ¨®mica que le dej¨® al borde de la disoluci¨®n. El Tata Martino era la primera opci¨®n, pero la continuidad de Newell¡¯s en la Copa Libertadores abort¨® la operaci¨®n. La v¨ªa argentina se cerraba de golpe, como dos a?os antes se hab¨ªa cerrado con Marcelo Bielsa, que eligi¨® finalmente Bilbao.
La Real se agarr¨® a su idea, entonces, de entrenadores de perfil bajo y rendimiento alto. La experiencia con Denoueix, fichado en 2002, y con la Real subcampeona de Liga, prendi¨® la mecha y el conjunto donostiarra huy¨® de los nombres rimbombantes (con mejor o peor fortuna) mientras el club se desangraba en luchas intestinas y sangr¨ªas econ¨®micas. Montanier, otro franc¨¦s, le devolvi¨® el pedigr¨ª perdido y la fe en los productos de la tierra.
Ahora, la responsabilidad cae sobre Jagoba Arrasate que hace siete a?os jugaba en el campo de Urritxe (Amorebieta) y hoy se sienta en el banquillo del estadio de Gerland, el de las grandes citas donde los mil y pico habitantes de Berriatua podr¨ªan ver el partido sin verse los unos a los otros. Fiel a sus or¨ªgenes, Arrasate no quiere dar brochazos a la obra del t¨¦cnico franc¨¦s, de la que tambi¨¦n fue part¨ªcipe. Por algo Berriatua, en euskera significa ¡°lo renovado¡±, ¡°lo rehecho¡±.
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