El ¡®9¡¯ por aclamaci¨®n
El tanto del canterano Morata, de 20 a?os, al Levante lleva a Ancelotti a cuestionarse la titularidad de Benzema
Carlo Ancelotti contempl¨® la escena en el Ciutat de Val¨¨ncia con los ojos clavados en el infinito y una mueca de amargura en los labios. Como quien miraba un cortejo f¨²nebre, solo que ante s¨ª corr¨ªa ?lvaro Morata con el bal¨®n entre las manos dando voces para arengar a sus compa?eros. Se consum¨ªa el minuto 88 del Levante-Madrid el s¨¢bado, el canterano acababa de meter el 2-2 que devolv¨ªa al Madrid a la vida, y el partido bull¨ªa. Sin Benzema en el campo. Sin el nueve titular, y con el joven Morata, las cosas parec¨ªan funcionar mejor. Ancelotti, desde el banquillo, lo supo de inmediato. A juzgar por su semblante, debi¨® pensar que, m¨¢s all¨¢ de sus convicciones, en este mundo de juego y espect¨¢culo las apariencias son se?ales poderosas que obligan a actuar. Los socios del Bernab¨¦u y la opini¨®n p¨²blica m¨¢s madridista le reclamar¨ªan una reacci¨®n. Un cambio de Morata por Benzema en la pr¨®xima alineaci¨®n, contra el M¨¢laga, el s¨¢bado 19 de octubre.
Hac¨ªa mucho tiempo que el Bernab¨¦u no ped¨ªa con tanta insistencia un jugador. ¡°Moraaaaataaaaaa...¡±, gritan los parroquianos, aclamando al canterano como quien exige la presencia de algo genuino, algo que no se compre con dinero, algo que escasea porque en Chamart¨ªn sobra todo lo que se puede pagar.
El c¨¢ntico se derrama sobre Ancelotti desde la primera jornada de Liga, contra el Betis. El entrenador responde d¨¢ndole minutos a Morata. En total, le ha brindado 75 minutos de competici¨®n en Liga frente a los 11 que le dio Mourinho en las primeras ocho jornadas de la ¨²ltima temporada. Sin embargo, el t¨¦cnico italiano ha procurado defender a Benzema. Tiene motivos para ello. Por un lado, el nueve franc¨¦s es, en su opini¨®n, el m¨¢s completo y experimentado de la plantilla, due?o de una sensibilidad en los pies y un sentido colectivo ¨²nico, capaz de ayudar a sus compa?eros a hilar jugadas en los ¨²ltimos metros. Por otra parte, Ancelotti sabe que Benzema es uno de esos futbolistas a quienes el presidente, Florentino P¨¦rez, reserva una consideraci¨®n especial. El traspaso de Higua¨ªn, un competidor temible para Benzema, muy querido por la afici¨®n y m¨¢s goleador, se relaciona con el trato que P¨¦rez tuvo hacia el franc¨¦s, con quien siempre mantuvo una relaci¨®n fluida de contactos y llamadas telef¨®nicas. Es el trato habitual de P¨¦rez hacia los futbolistas que ¨¦l ficha personalmente, como Isco, Illarra o Kak¨¢.
Hac¨ªa mucho tiempo que el Bernab¨¦u no ped¨ªa con tanta insistencia a un jugador
A sus 20 a?os, Morata no tiene ni la experiencia de Benzema, ni su dominio del bal¨®n, ni un padrinazgo tan importante. Sus credenciales son el cari?o del p¨²blico y una trayectoria impecable en la cantera y en las inferiores de la selecci¨®n. En el Europeo sub-21 anot¨® nueve goles en siete partidos antes de levantar el t¨ªtulo.
Sergio Pi?a, uno de los primeros entrenadores de Morata en la cantera del Madrid, asegura que el delantero ofrece garant¨ªas suficientes para ser titular. ¡°Uno de los indicadores m¨¢s importantes para darle el puesto a un nueve es la efectividad¡±, dice Pina, ¡°y ¨¦l ha aprovechado sus minutos de forma m¨¢s que suficiente. Siempre fue un goleador con un porcentaje muy alto de acierto. Es muy h¨¢bil con el bal¨®n en los pies, sabe jugar de espaldas, conecta bien con los centrocampistas y es un virtuoso del juego de cabeza. Los aficionados del Madrid han visto en ¨¦l algo diferente: un talento dif¨ªcil de encontrar en un jugador de casi 1,90 que, adem¨¢s, viene de abajo con hambre¡±.
Benzema no est¨¢ jugando mal. Pero Morata tampoco, y cuenta con una presi¨®n popular favorable y la inercia de su gol al Levante. Efectivamente, Ancelotti, que es perspicaz, se ha dado cuenta de que debe tomar una decisi¨®n pol¨ªticamente dif¨ªcil.
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